FLORENCIA ÁLVAREZ, ENCARGADA DE SOCIOS DE LA ASOCIACIÓN DE JÓVENES EMPRESARIOS DEL URUGUAY (AJE)
De niña soñaba con ser guardavidas, pero hoy, con 23 años, Florencia se encuentra cursando la carrera de licenciada en Desarrollo en la Facultad de Ciencias Sociales de la UdelaR. Comenta, además, que su vocación es la consultoría e investigación.
A los 16 años trabajó como auxiliar en un centro de educación inicial, donde se encargaba de las clases de inglés y acompañaba a natación a niños de entre 3 y 5 años. Lo que rescata de su experiencia laboral es que trabajar por amor a algo, el esfuerzo y el compromiso siempre es premiado sin necesidad de que sea algo material. “Las personas que se conocen en el camino te nutren de diferentes experiencias que permiten llevar enseñanzas a la vida profesional y personal”, reflexiona.
Su núcleo familiar está compuesto por su madre, padre y hermana, y hace tres años ingresó al mismo su pareja y su familia.
Son sus padres quienes reflejan el ejemplo a seguir. Confiesa que son ellos quienes le brindaron los pilares necesarios en los que se basa para llevar adelante con pasión y esmero cada uno de sus proyectos.
«El equipo de AJE se compone por personas que donan su tiempo para generar espacios de coordinación y promoción del empresariado entre los jóvenes».
Hace algo más de seis meses que trabaja en AJE. Se anotó en un llamado donde se solicitaba una secretaria ejecutiva para una ONG, y si bien no especificaba qué tipo de organización era, es un sector de interés para desempeñarse profesionalmente, según Florencia. “En la organización siempre hay alguien dispuesto a ayudar y reconocer el esfuerzo diario. Y considerando que somos solo dos asalariadas, el equipo se compone por personas que donan su tiempo para generar espacios de coordinación y promoción del empresariado joven”, indica.
Además, explica que le gusta estar en constante relación con proyectos y el desarrollo de los mismos. Interiorizarse en los problemas para buscar las soluciones acordes a los actores que involucran es algo que le apasiona, sostuvo la entrevistada a Empresas & Negocios.
Lo que más le agrada de su trabajo son las oportunidades que le generan en cuanto a conocer diferentes experiencias y diversos grupos humanos, sobre todo las dinámicas empresariales entre los actores de hoy en día y determinadas sinergias que escapan del imaginario social.
Lo que no puede faltar en la oficina de Florencia son lapiceras y papeles para anotar cosas espontáneas. El género de música que prefiere es el chill out y alternativa, aunque no descarta el reggae, blues y rock. De aquí a 10 años se ve con hijos pequeños, espera haber conocido Asia y con un posgrado bajo el brazo, además de estar en un proyecto que le permita lograr sus objetivos.
Su libro preferido es ‘Las Venas Abiertas de América Latina’. “Es un libro que está en la raíz de los problemas que estudio en el mundo en el que vivimos y orienta el sentido que le doy a la visión del desarrollo”. En sus horas libres gusta de hacer ejercicio, estar al aire libre, mirar una serie o leer un libro nuevo. Las películas que recomendaría son ‘Diario de una Pasión’ y ‘Contratiempo’. Confiesa tener muchas pasiones, ya que todo lo realiza con entusiasmo, pero lo que más le gusta es cocinar. “Sí uno quiere lograr algo, con esfuerzo y coraje se puede”, es el lema de Florencia.
