El presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU), Gabriel Murara, expresó a CRÓNICAS que el descuento en electricidad a las empresas que más exporten, anunciadas por el MIEM días atrás, no cumple con las expectativas del sector pero vislumbró que mejorarán los costos. Además, reconoció, a su entender, que dicho beneficio se debe a un esfuerzo directo de la cartera y no “a una política de Estado”.
A comienzos de esta semana, durante el Consejo de Ministros realizado en la localidad de La Macana, en el departamento de Florida, la jefa de la cartera de Industria, Energía y Minería (MIEM), Carolina Cosse, realizó un anuncio que calificó como “una muy buena noticia para la industria”.
La novedad en cuestión consistió en la difusión del otorgamiento de un descuento comercial en la facturación por el cargo de energía eléctrica sin IVA, en base al aumento del volumen físico exportado en un trimestre con respecto al trimestre base definido para las empresas industriales.
Según información publicada en la web del Ministerio, el mismo podrá ser otorgado por un período inicial de hasta un año, y podrá ser prorrogado por otro período igual, siempre y cuando se cumplan con las condiciones establecidas por el MIEM.
El porcentaje del descuento se calculará en base a la variación porcentual del volumen físico exportado, con respecto al volumen físico vendido total de la empresa, y en relación al mismo período base definido. El máximo del porcentaje de descuento en el cargo de energía será de 25%. Las industrias beneficiarias serán aquellas empresas suscritoras de UTE categorizadas como industriales, según su giro principal y localizado en Uruguay, con excepción de las empresas industriales alcanzadas por la ley de zonas francas.
A raíz de esta información, el presidente de la CIU, Gabriel Murara, reconoció que la misma corresponde a un esfuerzo directo de la cartera, por lo que debe ser valorada más, según dijo en diálogo con CRÓNICAS. “No es una política de Estado”, sostuvo.
Si bien expresó que esta noticia no cumple con las expectativas del sector, el dirigente empresarial declaró que se trata de “un paso”, y aunque remarcó que no cree que alcance para estimular la industria, “por lo menos sirve para mejorar en un granito de arena los costos”.
En ocasiones anteriores, el titular de la gremial señaló la pérdida de productividad del sector a pesar de las importaciones de maquinaria que se han realizado en el último tiempo. En contrapartida, el continuo crecimiento del salario es la causa, según el titular de la CIU, de la pérdida de competitividad.
En el caso de la industria manufacturera, su situación no viene al hilo con el resto de la economía nacional, según aseguró durante una conferencia de la Confederación de Cámaras Empresariales, en el marco de la séptima edición de la Expo Melilla.
La última medición de enero indicó un 3% menos en comparación con el mismo mes del año anterior, por lo que para Murara son necesarias otras medidas que, además, no dependan solo de la industria. Respecto a los salarios, afirmó que “el sector no está en condiciones de seguir haciendo aumentos reales cuando la producción baja”.
En tanto, la capacidad instalada está hoy en un 63%, uno de los mínimos que ha tenido la industria, por lo que la mejora en la competitividad es clave para Murara. Respecto a esto, apuntó a mejorar el mercado interno, dado que “la industria local está muy afectada por las importaciones”, remarcó.