La Unión de Exportadores apuntará a mejorar la competitividad mediante la apertura de mercados y rebajas de los costos de producción, buscará atender la situación de las pymes y potenciar al sector servicios, según explicó a CRÓNICAS la nueva presidenta de la gremial, Andrea Roth. Aseguró que la crisis en Argentina está afectando a los exportadores uruguayos con la cancelación directa de pedidos y por la mayor competitividad de los productos argentinos en la negociación con terceros países.
La Unión de Exportadores del Uruguay (UEU) eligió a quienes serán las nuevas autoridades del Consejo Directivo y designó a Andrea Roth como su nueva presidenta, marcando que por primera vez en la historia haya una mujer al tope de la gremial. Roth lleva vinculada diez años al Directorio de la UEU, es directora del Laboratorio Apiter, y a partir de ahora comandará las principales directivas y gestionará los reclamos de uno de los sectores más importantes de la economía del país.
Su llegada no se da en un momento cualquiera. La situación del comercio exterior no es la mejor, como lo demuestran los datos que difunde la propia gremial, así como el Instituto Uruguay XXI (ver recuadro). En ese sentido, reconoce importantes desafíos a corto plazo, como la reducción de los costos de producción, pero también insta a tener una mirada hacia el mediano y largo término.
-¿Qué significa para usted ser la primera presidenta mujer de la Unión de Exportadores?
-Más allá de ser mujer, creo que todos traemos nuestra experiencia y nuestro aprendizaje y venimos con una impronta a nuestra gestión. En lo personal vengo de una empresa familiar, con más de 40 años, donde siempre los valores de ser perseverante, de buscar la innovación, el desarrollo, ser creativo, pensar a largo plazo, es lo que ha predominado. Esos son los pilares con los que queremos aportar y trabajar. El género en sí mismo no debería ser un factor sustancial. La UEU de alguna manera representa a todo el sector exportador: bienes, servicios, empresas grandes, chicas, y lo importante es lo que representamos y cuáles son los objetivos, no tanto las características de la persona que lleva adelante circunstancialmente la institución.
-Hace diez años que se encuentran en la gremial ¿Qué le aporta esta experiencia ahora que está al mando?
-Sin duda que es muy significativa porque durante estos diez años la UEU siempre ha sido muy integradora de todo tipo de tamaños de empresas y de sectores, y hemos venido trabajando en los pilares fundamentales, que aparte son transversales a todos los exportadores. Todos tenemos de alguna manera las mismas dificultades a la hora de exportar, más allá de las características de cada sector específico y sin duda que uno trae toda la expertise de haber trabajado y haber acompañado todo el trabajo de las presidencias anteriores. Vamos a seguir trabajando y poniendo foco en estos pilares fundamentales, como pueden ser aspectos generales vinculados a la competitividad, a los costos internos, al tipo de cambio, al valor del dólar.
-¿Ahí van a concentrar los esfuerzos?
-Estamos queriendo hacer foco específicamente y lograr acciones concretas respecto a competitividad. Por un lado tratar de implementar lo máximo posible todo lo que sean acuerdos internacionales que nos permitan abrir nuevos mercados y ser más competitivos en igualdad de condiciones. Del otro lado, tratar de focalizarnos en identificar qué acciones podemos manejar y articular con el gobierno y con todas las partes que formen parte de las decisiones en lo que respecta a tarifas, costos logísticos, servicios, etc. Después hay otros aspectos importantes. Queremos ver cómo poder apoyar las Pymes que son el 75% de las empresas exportadoras, y creemos que hay herramientas, instrumentos y programas que se pueden articular y ayudar a que sean accesibles, o por lo menos que se tenga conocimiento. Informar a todo el sector Pymes exportador que sin duda viene sufriendo también toda la situación regional que estamos teniendo. El sector de las Pymes en un alto porcentaje aporta a la región y son los mercados más afectados hoy en día. Por último, está todo el rubro de servicios que son el 30% de nuestras exportaciones y que es un mercado que está con un potencial importante de crecimiento y de la UEU también queremos ver cómo poder dar un soporte a este sector.
-¿Qué incidencia tiene el dólar en la competitividad de las empresas?
–La competitividad es un fenómeno complejo que involucra muchas variables. Sin duda los costos productivos son un factor clave, necesariamente hay que poder medirlos en dólares para podernos comparar con el mundo. Ahí es donde el dólar empieza a ser un factor predominante, porque está fuera de control para el empresario, y puede sacar una empresa de un día para el otro del mercado. Por eso la importancia de tener un tipo de cambio real, competitivo y estable. Sin duda hay otros factores que hacen la competitividad, como puede ser la tecnología, la innovación, la capacitación de gente, la educación, la formación, facilidades para poder emprender, invertir, para desarrollar negocios, financiamientos… Hay un montón de aspectos, pero los costos de producción son un desafío importante y a corto plazo. Hay otras cosas que hay que empezarlas a hacer hoy también, pero que van a irse viendo los resultados en mediano y largo plazo.
-¿Qué nuevo enfoque se le puede dar a la dirección de la gremial?
-No hablamos de un nuevo enfoque. Quizás agregar estas aristas que mencionaba al inicio, pero que siempre han estado en la agenda de la UEU y que se le da mayor prioridad o importancia en función de la situación puntual que se esté viviendo.
-Asume en un momento complejo de la economía, que se refleja en los datos de comercio exterior ¿Cómo analiza la evolución de las exportaciones?
-Las exportaciones cayeron 18,6%. Lo que bajó básicamente fue la carne, madera y soja, que son tres de los principales rubros de exportación para nosotros. La coyuntura de Argentina puntualmente, más allá de lo que todos conocemos de la crisis de confianza, hay una realidad con el tipo de cambio que se abarató en dólares. Todavía no se ve reflejado en las cifras actuales de la venta argentina. Los pedidos que se están cancelando son los pedidos hacia delante, por eso ahora se siguen cumpliendo los negocios en estas cifras que hemos visto. Los pedidos hacia delante ya nos han informado varios exportadores que algunos se están cancelando. Por otro lado, las ventas uruguayas hacia terceros mercados se están viendo afectadas por ofertas de los mismos productos argentinos que condicionan nuestro precio. O sea, estamos en muchas situaciones puntuales condicionados con los precios de Argentina para bajarlos o perder los mercados.
-¿Cree que son problemas generales o corresponden a determinados sectores en particular?
-Son dificultades que nos atienden a todos los exportadores. En mayor o menor grado.
-¿Qué espera de la relación con el gobierno?
-Con el gobierno siempre tenemos un muy excelente diálogo, con todas las partes involucradas en lo que hace al comercio exterior y demás sectores. Como siempre, lo que buscamos es un consenso respecto a qué estrategias seguir, y básicamente lo que buscamos es que cualquier próximo programa de gobierno incluya todo lo que pueda ser un capítulo vinculado a la exportación y que lo podamos trabajar en conjunto.
Exportaciones cayeron un 18,6% en setiembre
Las exportaciones de bienes –sin incluir las ventas desde zonas francas- registraron US$ 634 millones durante el mes de setiembre, lo que implica una caída interanual de 18,6%, según los datos publicados por el Instituto Uruguay XXI. Si se agregan las zonas francas los números mejoran un poco, pero de todas formas se observa una contracción de las ventas del exterior del 10,2%.
Al considerar el acumulado del año, las exportaciones –con zonas francas incluidas-alcanzan unos US$ 6.850 millones, marcando un descenso interanual de 0,3%. La soja es el producto que más cayó en sus ventas en el acumulado del año, debido fundamentalmente a factores climáticos, seguida de lejos por el arroz. Por el contrario, los productos con impacto positivo en enero-setiembre fueron celulosa, madera, carne bovina, ganado en pie y lácteos.
El informe tiene un capítulo especial sobre el precio de los commodities que Uruguay exporta. “Hasta mediados de 2016 los precios internacionales de los alimentos marcaron una tendencia a la baja que comenzó en 2011, aunque hubo distintos desarrollos de acuerdo a cada producto”, sostiene. Agrega que los precios han acompañado el desempeño global de las exportaciones uruguayas que entre 2015 y 2016 registraron dos años ininterrumpidos de caídas mensuales en la variación interanual, que se revirtió a partir de febrero 2017, cuando comenzaron a repuntar, manteniéndose en crecimiento hasta comienzos de este año. Sin embargo, se advierte que a partir de mayo se evidenció una desaceleración en los precios de exportación como consecuencia de un contexto regional inestable y una escalada del proteccionismo, que tiene en el centro de atención la guerra comercial entre Estados Unidos y China. “En este escenario se prevé que el comercio internacional crezca a una tasa más moderada de la que se preveía sobre finales de 2017, y con una desaceleración en los precios de los principales commodities internacionales”, concluye.
