La economía de la nueva normalidad implica épocas desafiantes

El nivel de actividad de la industria manufacturera viene registrando un magro desempeño, y la situación mundial de la pandemia profundizó el deterioro. El índice de volumen físico en junio registró una disminución en términos interanuales.

Por Sofía Tuyaré (*)

El escenario de la industria manufacturera se observa desafiante desde hace un par de años. En 2019, el nivel de actividad del sector disminuyó 2.3%,y con la llegada de la pandemia la situación se agudizó. Los datos que se van conociendo de la primera parte del corriente año confirman lo que se esperaba: muchas ramas de actividad muestran dificultades.

El contexto regional y mundial, dado los acontecimientos recientes de la crisis sanitaria que enfrentan nuestros vecinos y las principales economías del mundo, generó un importante impacto en el primer tramo del año. Aún no se tiene certeza del alcance ni la duración de la pandemia, pero será un reto para muchos sectores de la economía, para los orientados al mercado doméstico y, sobre todo, los que miran al exterior.

Las exportaciones en lo que va del año muestran una importante caída respecto al mismo período del año anterior y esto es muestra del deterioro que se observa en el comercio internacional.

Actividad

Según los últimos datos disponibles publicados por el Banco Central del Uruguay (BCU), la industria manufacturera disminuyó ligeramente un 0.1% en el primer trimestre de 2020 respecto al mismo trimestre del año anterior, luego de caer 2.2% en el cuarto trimestre de 2019. Si se toma la variación del índice desestacionalizado, el PIB en el periodo enero-marzo de este año aumentó 2.9% respecto al trimestre inmediatamente anterior. Este crecimiento se observa luego de caer en el último tramo del año pasado;recordemos que el PIB en el cuatro trimestre de 2019 disminuyó 5.4% respecto al tercero. Recién a mediados de setiembre conoceremos los datos del segundo trimestre del año.

Se debe destacar que el periodo analizado aún no contempla lo más profundo de la emergencia sanitaria del país, que se decretó a mediados de marzo.

Según el informe de cuentas nacionales del BCU, el incremento en la actividad de los rubros como la elaboración de jarabes y concentrados, pulpa de celulosa y la refinería de petróleo evitaron que disminuyera más el nivel de producción. El conjunto del resto de las industrias se mostraron contractivas en el primer trimestre del año respecto del mismo periodo del año anterior.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) elabora el Índice de volumen físico de la industria manufacturera, un dato que brinda información sobre la evolución de la producción del sector, más actualizada. Según este indicador, en junio de 2020, último dato disponible, cayó 0.8% respecto a junio de 2019, y acumula una caída de 6.5% en el primer semestre del corriente año. Si se excluye la refinería del indicador, el índice disminuyó 3.4% para la medición interanual y acumula una baja de 8.4% entre los meses enero-junio respecto del mismo periodo del año anterior.

Si se compara junio de este año contra el mismo mes del año anterior, el comportamiento se explica por la incidencia principalmente de los rubros “Curtiembres y Talleres de Acabado”, “Actividades de Encuadernación, Edición e Impresión”, y en tercer lugar, “Industrias de Metálica Básica”.

La Cámara de Industrias del Uruguay (CIU) publicó su informe sobre “Indicadores de difusión de la industria”, donde muestra un importante deterioro en la producción del sector. El Índice de Volumen Físico de la industria manufacturera elaborado por la CIU, sin incluir la refinería de Ancap, disminuyó en el segundo trimestre de 2020 un 16.2% respecto de mismo periodo del año anterior. Según el organismo, si se excluye las empresas Pepsi Zona Franca, UPM y Montes del Plata, el indicador se contrajo 18.3% para el periodo abril-junio.

Empleo

El empleo es un indicador que preocupa, dado que a nivel general se observa un deterioro en los últimos años. La industria no escapa a esta realidad y los datos muestran bajas en el nivel de empleo del sector. Según el INE, 10% de las personas ocupadas en el total del país pertenecen a la industria manufacturera.

El INE elabora, en el marco de su informe del sector, el Índice de Horas Trabajadas (IHT) y el Índice de Personal Ocupado (IPO). Según el organismo, en el sexto mes del año ambos indicadores registraron un comportamiento contractivo. El IHT en junio de 2020 disminuyó 14% respecto al mismo mes del año anterior, y el IPO cayó 12.2% para el mismo periodo de medición.

Expectativas

Este comportamiento debilitado del sector no sorprendió. Antes de instalada la emergencia sanitaria ya se evidenciaban dificultades en algunas ramas del sector. El actual contexto, naturalmente, profundizó la situación, y el hecho de no tener claro la fecha de salida de la pandemia genera desafíos para la economía. Se espera que en el tramo final del año la situación de la pandemia esté controlada, pero no hay certezas. Los países empiezan a retomar las actividades y prender los motores bajo lo que se denomina como “la nueva normalidad”.

La economía, en su conjunto, enfrenta un año muy complejo.Las proyecciones para el mundo y las principales naciones del globo son de recesión para 2020. En Uruguay también se estiman caídas en el nivel de actividad. Según la Encuesta de Expectativas Económicas que elabora el BCU, en agosto de 2020 la mediana de los analistas proyecta una caída del PIB de 3.7% en 2020, y que crezca 3.9% en 2021 y 2.5% en 2022.

* Economista, integrante del departamento  de Consultoría de CARLE & ANDRIOLI, firma miembro independiente de Geneva Group International.