En entrevista con CRÓNICAS, la nueva presidenta de la Federación Rural, Mónica Silva, indicó que durante su gestión tratará de que los productores se involucren en el gremialismo. Asimismo, comentó que no se sentían escuchados por los gobiernos del Frente Amplio (FA) y que les generó una “gran tristeza” que el fallecido expresidente, Tabaré Vázquez, no haya participado de la Rural del Prado cuando estuvo al frente del país. En esa misma línea, indicó que la relación con el actual mandatario, Luis Lacalle Pou, es buena y de trabajo, pero que eso no quita que la gremial le haga los reclamos que necesita el agro.
El pasado lunes se produjo el cambio de mando en la Federación Rural, luego de un largo proceso electoral que finalizó el sábado 3 de julio, Mónica Silva, productora ganadera y política de Salto asumió la presidencia de la gremial agropecuaria.
Por primera vez la Federación Rural la preside una mujer, algo que sí o sí se iba a dar porque fueron dos mujeres las candidatas a la presidencia: Mónica Silva y Soledad Arrate.
Silva ocupará el lugar que hasta el pasado lunes ocupó Julio Armand Ugón.
En la asunción oficial de Silva participó el nuevo ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Fernando Mattos, quien felicitó a la nueva presidenta de la gremial. “Hemos transcurrido parte de nuestra vida pensando en la mejora del sector agropecuario, pensando en un mejor sector que mejore el negocio y la calidad de vida de la gente”, puntualizó Mattos en dicha instancia.
En entrevista con CRÓNICAS, la nueva titular de la gremial ruralista expresó que lo primero en su gestión será el trabajo en equipo para poder conocer la realidad de las diferentes zonas del país. Indicó que hay grandes diferenciales que llevan a un mismo rubro a producir distinto, además de las diferenciaciones propias de cada sector.
Asimismo, comentó que la nueva directiva quiere involucrar al productor en el gremialismo.
Silva dijo que entiende que las jornadas en el agro son largas y cansadoras, pero que los productores deben involucrarse para poder dar sus diferentes puntos de vista y así evitar que se creen políticas con las que no están de acuerdo o que saben que no funcionarán.
“Necesitamos a los productores colaborando, opinando, y la forma de conseguirlo es que se relacionen con las gremiales de los distintos departamentos”, puntualizó.
Silva expresó que la directiva ya tiene una hoja de ruta para seguir avanzando en las mejoras del agro. Expresó que el año pasado no se pudo hacer el congreso de la Federación Rural por la pandemia, pero este año se hizo virtual y tienen las ponencias –que son las demandas de las distintas gremiales a las que nuclea la Federación- para poder empezar a trabajar en ellas en cuanto la emergencia sanitaria lo permita; porque muchas de ellas se deben hacer de manera presencial.
Algunos de los asuntos que preocupan a los productores rurales, según expresó Silva, son los de continuo reclamo: sanidad, jaurías de perros, competitividad, la burocracia en el tema de la baja de aranceles, y la conectividad.
Asimismo, expresó que durante muchos años no se sintieron escuchados por los gobiernos de turno.
“No nos sentíamos escuchados por los gobiernos del FA. El caso más claro es que tuvimos dos veces un presidente que una sola vez cruzó al Prado; vivía cerca y no cruzaba. El Prado es el símbolo del trabajo del campo, donde estamos todos -el grande y el chico-, y la verdad que eso era tremendamente doloroso”, reflexionó.
En esa misma línea, indicó que el campo produce entre el 70 % y el 80 % de los ingresos de divisas del país, y por eso necesitan producir y ser escuchados por los actores del gobierno.
Sin embargo, Silva reconoce que hoy el diálogo es totalmente diferente.
Para la gremialista, este gobierno entiende bien lo que significa el agro para los ingresos y la economía de Uruguay. Sin embargo, aclaró que si bien la relación es buena y de colaboración, no quita que el sector siga demandando cosas para mejorar la calidad de vida de quienes desempeñan distintas tareas rurales.
“El llamado del presidente el sábado a la noche –día en que Silva ganó las elecciones- es para trabajar unidos, pero eso no significa que no demandemos medidas”, remarcó.
Por otro lado, expresó que la salida del ahora exministro de Ganadería, Carlos María Uriarte, la sorprendió. De hecho, el último acto público que hizo Uriarte como ministro fue en las elecciones de la Federación. Silva indicó que la relación con el exjerarca era “muy buena”.
La primera mujer
En sus más de 100 años es la primera vez que la Federación Rural es presidida por una mujer. Respecto a esto, Silva expresó que, si bien llamó la atención, ella se siente “un presidente más” de la gremial.
“Éramos dos mujeres candidatas y eso generó algo más importante de que fuéramos dos listas, porque los productores pudieron averiguar, informarse y participar, agregar un granito de arena, tomar una decisión y que no todo venga impuesto”, expresó.
Agregó que donde haya hombres y mujeres trabajando juntos siempre se van a generar mejores políticas, y no solamente en el gremialismo. “Cada uno aporta lo suyo y es lindo trabajar así”, opinó.
Sobre la premisa de que el sector agropecuario es machista, Silva señaló que “machistas hay en todos lados” y que en el campo la mujer ha ido cambiando su rol a lo largo de los años.