Con motivo del aniversario de los cinco años del Centro de Estudio para el Desarrollo (CED), el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, dio un extenso discurso en el que se refirió a los desafíos a los que se enfrenta el país en un amplio abanico de cuestiones.
En esta instancia, también se refirió a que “Uruguay es una gran nación que ha sido construida por mucha gente a lo largo de la historia”, al mismo tiempo que discurrió sobre la LUC y sus incidencias.
Del evento también fueron parte las figuras principales del espectro político y empresarial.
Por Naara Pérez | @NaaraPerez3
El aniversario del CED se celebró en las instalaciones del LATU y contó con la presencia de la máxima autoridad del país, el presidente Luis Lacalle Pou, así también como la vicepresidenta Beatriz Argimon y el expresidente Julio María Sanguinetti.
A su vez, participaron del evento diversos ministros, legisladores, y mandos superiores de empresas públicas y privadas, así como importantes personalidades del exterior.
En el mismo hicieron uso de la palabra tanto el economista y director ejecutivo del CED, Agustín Iturralde, como Lacalle Pou, quien bajo la premisa “Uruguay ante un nuevo escenario” disertó sobre un sinfín de cuestiones relacionadas con la actualidad que atraviesa el país.
“Hay que dejar de lado toda la parafernalia de la mentira y de la desinformación”
El presidente destinó una parte central de su discurso a exponer sobre la Ley de Urgente Consideración, la que calificó como “una muy buena ley” y como una “herramienta fundamental para su gobierno”.
Al mismo tiempo, afirmó que la misma no fue votada solamente por integrantes de la coalición.
Por otra parte, el jerarca opinó sobre la presentación a la sociedad de la LUC y sus plazos constitucionales. “La primera vez que hablé de la LUC fue en diciembre de 2017; el 22 de enero hicimos público el anteproyecto, el 9 de abril lo presentamos a la opinión pública, y se introdujo al parlamento el 22 de abril. Nadie se puede llamar a sorpresa”, señaló.
En referencia a dicha ley y la problemática de la seguridad pública añadió que no está conforme con los resultados en esta materia. “No es que niegue que estamos mucho mejor, con lo que no estoy conforme es que mis hijos y mis nietos tengan que criarse en una sociedad violenta”, aseveró Lacalle Pou.
Por consiguiente, mencionó que para él es fundamental que se apliquen determinadas herramientas jurídicas que, de alguna manera, “generan más herramientas de hecho a la policía”.
En referencia a esto opinó que “cualquier policía en cada barrio del país hoy siente que hay un gobierno que lo respalda y que va a estar ahí para respetar su accionar”.
Al mismo tiempo, en lo relacionado con la propaganda de la LUC, instó a “dejar de lado toda la parafernalia de la mentira, de la desinformación. Porque las elecciones pasan, los referéndums pasan, y la sociedad queda con sus mismos problemas”.
“Los políticos uruguayos no tenemos complejos refundacionales”
En otro orden, Lacalle Pou reconoció diversos logros de exmandatarios y no dudó en afirmar que desde el principio de su campaña estuvo convencido de que iba a “seguir haciendo” lo que estaba bien.
“Uruguay es una gran nación que ha sido construida por mucha gente a lo largo de la historia”, sostuvo el presidente.
Como ejemplo de políticas que han contribuido a lo que Uruguay es hoy y que han trascendido gobiernos, mencionó el plan CAIF instaurado por Sanguinetti, la ley de puertos promulgada en el gobierno de Lacalle y la masificación de las computadoras en los niños en el gobierno del Frente Amplio.
Al mismo tiempo, advirtió que “un gobierno mal inspirado, soberbio, vanidoso, que no entienda la representación popular, puede destruir una construcción de muchos años”.
“La tasa de empleo y actividad está similar a la de prepandemia”
El máximo mandatario del país destacó que se mira el futuro con optimismo y que todo parece indicar que los años precedentes serán de bonanza económica.
Para Lacalle Pou esto se justifica en ciertas cifras que señalan distintos indicadores, como la tasa de empleo y de actividad, que presentan valores similares a los de prepandemia, como así también la disminución de los seguros de empleo.
A su turno, mencionó proyectos que aportan al crecimiento del país, como el incremento de incentivos en la Comac, decretos de la vivienda de interés social, el papel de la construcción, y las grandes obras.
“En cuanto a las materias primas, parece que tenemos por delante un par de años de buenos precios”, aseguró.
En otro ámbito, el jefe de Estado resaltó la importancia de las relaciones exteriores, a las que calificó como imprescindibles, ya que “hacen mucho a la libertad del país, a la prosperidad y a la competitividad”.
Y se refirió a que “el Mercosur necesita modernizarse y que Uruguay va rumbo a la flexibilización”.
Entre otros temas, manifestó que “con el cambio de gobierno se terminó aquello de defender dictaduras y se terminó lo de utilizar eufemismos cuando hay que decir que un país tiene un dictador”.
“Yo creo que es una coalición que tiene larga vida”
En su coloquio, el mandatario también se refirió a las especulaciones que se hicieron sobre la durabilidad que tendría la coalición. En un contexto, en el que según Lacalle Pou se realizaban apuestas sobre la permanencia de la misma, el jerarca reafirmó que, en su opinión, esta tiene larga vida.
También hizo énfasis en que las diferencias entre los distintos miembros aportan fortaleza a dicha alianza, ya que en sus palabras la vigencia de la misma reside en los matices que se presentan entre los diferentes integrantes.
A la misma vez, reconoció que por lo mismo se busca que esta sea “un lugar más amplio, para que todos puedan marcar su perfil”.
Los cinco años del CED
El CED se creó en 2016 con la misión de aportar al crecimiento, modernización y competitividad del país, promoviendo una sociedad abierta y un Estado de Derecho. Esto a través de insumos, que basados en la evidencia, dilucidan las acciones y políticas que Uruguay debe implementar para estos cometidos.
A día de hoy, tras cumplirse los primeros cinco años de existencia, el CED realizó más de 20 investigaciones y más de 100 actividades.
En el marco de este aniversario, el director ejecutivo del centro, Agustín Iturralde, resaltó en su discurso que los propósitos centrales de la institución se dividen en dos macro objetivos. Por un lado, hacer “aportes sustanciales y concretos que ayudan a la formulación de políticas”. En esta materia destacó la contribución realizada a las mejoras en la institucionalidad fiscal, la inserción internacional y el tratamiento de la fragmentación social en territorios.
Por otro lado, sostuvo que, en segundo lugar, el CED busca tener “un rol fundamental” en el debate de ideas. “Hemos sido un espacio de encuentro, de discusión de ideas”, afirmó.
Al mismo tiempo, el economista señaló que el cumplimiento de estos fines se ejecuta de una forma que caracterizó como muy uruguaya, al tener un diálogo fluido con “todos los partidos, con todas las universidades, con todas las organizaciones sociales”
Finalmente, Iturralde se refirió a que desde el CED se procura “difundir en Uruguay las ideas que al mundo han traído más libertad y más prosperidad”.
