Quantik: una marca para seguir construyendo el futuro

Rafael Staricco, CEO de Quantik


Grupo Isbel ahora es Quantik. La compañía tecnológica uruguaya presentó una nueva identidad para integrar sus marcas, con el objetivo de consolidar la historia de crecimiento y enfrentar nuevos desafíos. En esa línea, Empresas & Negocios dialogó con el CEO de la empresa, Rafael Staricco, quien se vinculó a la misma en el año 2004.

¿Qué cargo ocupa y cómo se dio su ingreso a la compañía?

Actualmente ocupo el rol de CEO en Quantik, un grupo tecnológico bajo el que se encuentran tres empresas: Isbel (integrador tecnológico), Qubox (fabricante de productos tecnológicos) y Synapsis (outsourcer tecnológico). Soy responsable del negocio de las tres empresas y también de las áreas transversales que dan soporte a las tres compañías (gestión humana, operaciones, marketing, administración y finanzas). Además,  desde 2019 soy socio.

Mi historia dentro de la compañía inició en 2004, cuando ingresé por una pasantía de seis meses. Luego tuve la oportunidad de pasar por varias áreas, técnicas, comerciales, de desarrollo de negocios, trabajando tanto localmente como para nuestras operaciones en el exterior, hasta que en 2014 tomé el rol de CEO. Fue un viaje del que estoy muy orgulloso, pero sobre todo muy agradecido a quienes confiaron y confían en mí. Siempre digo que este recorrido es un ejemplo más de algo que está en el ADN de la compañía, y es que aquí damos oportunidades para que las personas crezcan y se desarrollen.

¿Cómo fue el proceso para llegar a la nueva marca Quantik y cuáles son los objetivos principales de esta transformación?

Quantik surge motivado por una deuda pendiente con nosotros mismos: alinear la forma en que nos presentamos al mundo, con lo que hoy realmente somos y con cómo nos estamos proyectando hacia el futuro.

Nuestro grupo tiene una trayectoria de 40 años en el sector, ha crecido y se ha diversificado en los últimos tiempos. Si bien nuestro entorno cercano de clientes y allegados ha sido testigo de esta evolución, sentíamos que debíamos generar una plataforma que explicara lo que somos y que nos ayudara a contar mejor las múltiples historias que hemos transitado en estos años.

El proceso de creación de la marca duró varios meses. Recibimos un gran apoyo de la consultora especializada en comunicación y diseño I+D, con quienes generamos una sinergia muy positiva. Más allá de la parte estética y de diseño, entendieron desde el primer día que lo que estábamos buscando era algo mucho más estratégico, algo que tenía que ver con cómo somos y con nuestro rumbo.

Para lograrlo se armó un proyecto que partió desde lo conceptual, en el que participaron colaboradores internos, clientes, proveedores, y que avanzó para formar las bases que luego dieron cabida a este hito, que para nosotros significa una nueva etapa en la historia de nuestras organizaciones.

Así surge, a partir de noviembre de este año, la marca Quantik, nombre en el que se engloban nuestras marcas para seguir construyendo el futuro junto a nuestros clientes y consolidarnos como un grupo sinérgico de empresas guiadas por un espíritu común, pujante, humano y transformador.  

Otro punto que abarcó el proceso fue la evolución de la identidad visual y verbal de Isbel y Synapsis, que se armonizan junto con las nuevas marcas Quantik y Qubox para potenciar la integración.  

¿Qué productos y servicios se ofrece a los clientes?

Los productos y servicios se canalizan mediante las empresas del grupo. Si bien todas tienen a las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en el centro, cada una se especializa en una disciplina diferente.

Isbel es lo que en la jerga se conoce como un integrador de tecnología. Básicamente, se trata de una empresa con capacidades para aplicar tecnología y servicios de ingeniería que desarrollan soluciones en diferentes líneas. Con origen en las telecomunicaciones, en los últimos años hemos diversificado el alcance de nuestras soluciones y servicios. Ciberseguridad, internet de las cosas, inteligencia artificial y analítica de datos son algunos de los conocimientos que la empresa ha desarrollado, y hoy tiene capacidades para combinarlos en función de lo que los proyectos requieran.

Qubox es una empresa que se dedica a la fabricación de productos tecnológicos propios. Se trata de la más joven del grupo. Surge como un spin off de lsbel, con el objetivo de aumentar el foco y la especialización en la creación de productos propios. Hey Now es hoy el producto más relevante de Qubox. Se trata de una plataforma de bots en la nube que permite automatizar procesos de negocio a través de diferentes canales, usando técnicas de inteligencia artificial. El sistema tiene más de 100 clientes activos, bancos, retail, utilities, salud, telcos, y lo estamos comercializando localmente y también en Latinoamérica.

Synapsis es un tech BPO: se especializa en tercerizar procesos de negocios y potenciarlos mediante un uso intensivo de la tecnología. Su objetivo es hacer estos procesos más eficientes y efectivos. Estas tareas incluyen atención de clientes, soporte técnico o e-commerce. Synapsis trabaja tanto para clientes del mercado local como para Latinoamérica y Estados Unidos.

¿Cuál es el diferencial de la compañía en comparación con otras empresas del rubro?

Creo que la combinación de diferentes disciplinas tecnológicas da al grupo una capacidad de respuesta buena y versátil de cara a diferentes necesidades y perfiles de clientes. Hoy, el diferencial está en la capacidad de adaptación y la agilidad. La compañía ha desarrollado un músculo, que hay que seguir “entrenando”, para buscar e identificar soluciones.

Cuando arranqué, teníamos un portafolio de productos y servicios y nos dedicábamos a encontrar clientes a los que estos productos les pudieran servir. Eso ha cambiado; la cosa pasa por tener capacidad de aprendizaje, investigar y combinar herramientas para armar soluciones que resuelvan las necesidades de negocio de cada cliente.

Lo otro que destaco tiene que ver con el equipo… Una frase que siempre usamos es “la calidad no está en las cosas que hace la gente, sino en la gente que hace las cosas”, sus valores y también con las capacidades de gestión. Tratamos de aprender rápido, pero a la vez sistematizar y ser disciplinados en nuestros procesos.

¿Qué proyectos se tienen a corto y a mediano plazo?

Vamos a continuar con las iniciativas de expansión internacional. Hoy trabajamos con clientes en varios países de la región y contamos con oficinas en el exterior. Tenemos planes de crecimiento en ese sentido. También estamos trabajando en expandir hacia más países servicios especializados que hoy exportamos desde aquí para la región. Hay mucho espacio para crecer en el rubro de servicios tecnológicos especializados.

Continuaremos promoviendo las iniciativas de innovación desde nuestra incubadora interna Quantik Lab. Tenemos en curso varios MVP (proyectos en desarrollo), algunos de ellos con coinversión con clientes, lo que es muy interesante (innovación abierta) y que esperamos que se conviertan en nuevos productos propios para desarrollar y exportar.

En el plano tecnológico, lo que rodea la expansión de las redes 5G generará nuevos desafíos para los que nos venimos preparando desde hace tiempo. Estamos trabajando en varias líneas en ese sentido. El mundo del e-commerce es algo en lo que nos estamos metiendo y es posible que avancemos con acciones concretas en breve. Lo mismo con los nuevos desafíos relacionados con ciberseguridad, identidad digital, y trabajo colaborativo híbrido. En eso estamos.

En lo interno, estamos terminando el primer año de un plan a tres años, que consiste en un conjunto de proyectos para prepararnos para un nuevo escalón de crecimiento. Inversión en desarrollo del talento, renovación de sistemas internos para sostener los procesos y decisiones, comunicación y posicionamiento son partes importantes. Esto se sustenta con las capacidades clave que en estos años venimos desarrollando: equipo humano competente y comprometido, solidez financiera, innovación disciplina y responsabilidad por los resultados.

¿Qué análisis podría hacer del mercado nacional y la adaptación a las nuevas tendencias tecnológicas como las que ofrece Quantik?

Uruguay es un país con muy buenas capacidades tecnológicas. El trabajo durante la pandemia o la confianza que grandes empresas tecnológicas están depositando al instalarse en nuestro país son una muestra clara de eso.

Aquí hay muy buen nivel técnico y profesional. Generalmente, al profesional uruguayo que sale o que trabaja desde aquí para el exterior se lo valora muchísimo. Nuestro problema para seguir creciendo es la capacidad para generar más profesionales vinculados a la industria. Ingenieros, por supuesto; pero también técnicos, programadores, gerentes de proyectos y otra variedad de roles no 100% técnicos que se necesitan en la industria. Hay mucho potencial para seguir creciendo si logramos ampliar capacidades.

En cuanto al mercado local, contamos con una infraestructura de conectividad de primer nivel, lo que impulsa los servicios o proyectos que se pueden exportar desde aquí, así como implementar para aquí.

Respecto a organizaciones nacionales, creo que se puede ver un rango variado de adopción tecnológica. Hay empresas públicas y privadas (nacionales e internacionales) instaladas en Uruguay que tienen un alto grado de desarrollo tecnológico; incluso en algunos casos son referentes en la región. Por otro lado, es cierto que aún quedan aquellas que la vienen “corriendo de atrás”, pero estoy seguro de que la pandemia les hizo avanzar varios casilleros de forma acelerada. Lo que es unánime es que ya no es opcional el uso de la tecnología para ninguna actividad, y el empresariado uruguayo lo tiene claro.

¿Cómo se encuentra preparada la firma para afrontar los constantes cambios globales vinculados al sector tecnológico?

Yo soy de los que creen que, independientemente de la industria, las empresas tienen que estar preparándose y gestionando su transformación de manera constante. Es cierto que en la industria tecnológica el cambio es súper acelerado. Por eso es relevante generar capacidad de adaptación y de aprendizaje (ágil) constante.

En nuestro caso, la innovación y la gestión de la transformación es algo que tratamos de poner en el ADN de la compañía. Generar contextos en los que nuestro equipo piense en el futuro es algo que promovemos en todas las áreas, de forma de competir codo a codo con la operación del día a día, que muchas veces es el principal enemigo de parar a pensar en el futuro (hay que hacer las dos cosas).

Participar en ferias internacionales, definir objetivos individuales y de equipo relacionados con la transformación, impulsar Quantik Lab como incubadora de ideas transversal a todo el grupo y estar cerca de nuestros clientes para entender sus nuevos desafíos son ejemplos de contextos que tratamos de crear para prepararnos para el futuro, adaptarnos a los cambios que se van produciendo y, por qué no, provocar el cambio con nuestro trabajo.