Los datos del mercado laboral en Uruguay vienen mostrando mejoras, aunque se advierten diferentes realidades entre departamentos y también a la interna de estos. Expertos en el área de recursos humanos coincidieron en evaluar que el país “tiene un problema de educación, que se ve reflejado en los diferentes mercados de trabajo en el territorio, generando un descalce entre la oferta y la demanda de habilidades”. Se afirma que existe una “creciente demanda en el mercado de los profesionales”, y que eso se refleja en los indicadores de empleo que difunde el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En la tarde del miércoles vieron la luz los datos del INE sobre el mercado de trabajo, distinguiendo por área geográfica de residencia.
El mismo, arroja una concentración importante del trabajo en la zona capitalina. Sin embargo, también allí se pueden encontrar diferencias interbarriales. Los barrios que se encuentran más al sur de la ciudad presentan -en promedio- un desempleo del 4,7%, mientras que los del norte alcanzan el 10%.
Para generar un análisis de los datos brindados por el INE, CRÓNICAS dialogó con Juan Pablo Lara, director de Randstad Uruguay; y Federico Muttoni, director de Advice, y ambos coincidieron en la relevancia que tiene la formación profesional en los resultados.
“Son varios mercados y varias realidades, no se puede generalizar. Los hogares en el norte del departamento (de Montevideo) también son los que tienden a tener un porcentaje de integrantes en educación terciaria menor a los del sur y esto se refleja en la tasa de empleo y desempleo por zona”, desarrolló Muttoni.
Por su parte, Lara analizó que los sectores industriales tienden a moverse hacia otras zonas geográficas, lo que implica la movilidad constante del talento.
“Cuando vemos las tasas de actividades en cuanto a empleo y desempleo, podemos reafirmar un concepto que venimos trabajando y exponiendo desde nuestros valores organizacionales, que es la ‘desigualdad’ de acceso de mujeres a puestos de trabajo, ya sean formales o informales”, explicó el experto.
La mala educación
Según el informe, en el mes de abril, la tasa de empleo ascendió a 56,9% y el desempleo alcanza el 7,7%. Estos números reflejan estabilidad con tendencia a la recuperación respecto a períodos anteriores.
“Uruguay no tiene un problema de empleo, tiene un problema de educación, que se ve reflejado en él los diferentes mercados de trabajo en el país, generando un descalce entre la oferta y la demanda de habilidades, en los diferentes sub-mercados, geográficos y por sectores de actividad”, analizó Muttoni. Además agregó que, según el Monitor Laboral de Advice -en abril de 2022-, la demanda de trabajo en Uruguay disminuyó 10%, mientras que la demanda de talento (el trabajo más calificado) por parte de las empresas se incrementó en 2.026 oportunidades, que representó 73% de aumento con respecto al mismo mes del año anterior.
En la misma línea, Lara indicó que el mercado laboral uruguayo se encuentra “en un momento de recuperación genuina”.
“Desde nuestra perspectiva de búsqueda y selección de talento observamos una creciente demanda en el mercado de los profesionales, con foco en las posiciones de IT e Ingeniería, que actualmente son las más demandadas; esto incluye a perfiles técnicos juniors. Junto a la alta demanda de perfiles de candidatos vemos una escasez de talento en nuestro país que impacta en las expectativas salariales o la búsqueda de perfiles en el exterior. Observamos también solicitudes crecientes de perfiles relativos a los sectores de Marketing y Comunicaciones, en especial todo lo vinculado a la transformación digital de las empresas y específicamente al marketing de gestión digital”, relató el director de Randstad.
El futuro
Para analizar los datos del primer trimestre es necesario tener el cuidado de contemplar la situación especial que suscita la temporada de verano y -en este momento-, también la construcción de la segunda planta de UPM. Respecto a esto último, en la zona de influencia en Tacuarembó el desempleo es de 5,2% y en Durazno de 3,9%, tasas menores a la del país, aunque no las más bajas.
A consideración del director de Advice, los datos “eran esperables” teniendo en cuenta los estímulos mencionados aunque “no es poco en un mundo de incertidumbre, cambios acelerados, inflación, guerra y postpandemia”.
No obstante, Maldonado mantiene la tasa de empleo en 64,4%, y desempleo en 2,9%. “Son cifras muy superiores a las de Uruguay en su conjunto. Turismo sostenido, construcción, nuevos residentes e inmigrantes extranjeros, son algunos factores determinantes de esos resultados. Son datos esperables del trabajo que se está realizando”, justificó Muttoni.
Bajo la óptica de Lara, el flujo de empleo y talento se mueve de acuerdo a la necesidad del mercado del país, así como también a las posibilidades de traslado y modalidades de trabajo que estamos evidenciando postpandemia. En esta línea, desde Randstad consideran “que el cambio de percepción y relacionamiento del talento con la oferta de empleo vino para quedarse y esto no va a estar sujeto expresamente a periodos estacionales de contratación, sino a la capacidad del mercado de brindar ofertas atractivas para las generaciones más jóvenes asociadas a las actividades y modalidades de trabajo”.