Las expectativas de los empresarios en relación al futuro de la economía y sus negocios continuaron en terreno levemente positivo durante enero, aunque registrando un descenso, según la última encuesta industrial realizada por la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU).
La sombra del inicio de un período de recesión en los principales mercados, la baja de los precios de exportación, el aumento de las tasas de interés para combatir la inflación y la baja del tipo de cambio en Uruguay, a contramano de lo que ocurre en el mundo, podrían ser las causas de este comportamiento negativo de las expectativas empresariales.
Entre octubre y diciembre, las ventas de la industria, sin refinería ni zonas francas, disminuyeron 8,8% respecto a igual trimestre del año anterior. Si se considera el acumulado del año, las ventas del núcleo industrial aumentaron 0,6% respecto a 2021.
De ese total, las ventas industriales en volúmenes físicos con destino al mercado interno disminuyeron 5,3% en el cuarto trimestre de 2022 en términos interanuales. Mientras que las ventas destinadas al mercado interno cayeron 1,2% en relación a 2021.
Por su parte, el empleo industrial revirtió gran parte de la caída de la pandemia pero entró en un período de estancamiento. Respecto al cuarto trimestre de 2022, el personal ocupado se mantuvo estable con respecto a igual trimestre de 2021.