>>El legado de Danilo Astori se puede medir en la cantidad de actores políticos que a lo largo de esta semana lo han recordado al valorar sus aportes en materia económica y política. Ante esto, CRÓNICAS conversó con Mario Bergara, Germán Deagosto y Julio De Brun, quienes reconocieron la capacidad de diálogo del exministro de Economía y su habilidad para tender puentes, entre otros aspectos sobre los que vale la pena posarse.
A donde iba la muerte, que salió en puntas de pie, la mañana del pasado viernes 10 de noviembre, cuando el país amaneció con la noticia del fallecimiento de Danilo Astori.
Su nombre y su talante nos demandan hacer un raconto de su trayectoria política y su cualidad humana, algo que, a lo largo de esta semana, le fue reconocido por diversos actores del ámbito político, económico y social, más allá de los colores y las banderas.
Su papel en la crisis del 2002, cuando se manifestó en contra del default de la deuda que el Fondo Monetario Internacional (FMI) imponía y al que su partido se había manifestado a favor, cuando se opuso al juicio político a Jorge Batlle y cuando dijo “si tiramos piedras siendo oposición, no podemos esperar otra cosa que piedras cuando seamos gobierno”, son los pilares de lo que significó su carrera política.
Mario Bergara lo definió como “la persona más importante para la modernización de la izquierda en Uruguay”, dada su impronta “seregnista”, su visión estratégica, su cabeza “abierta” y su “capacidad” de tener coraje político.
“Danilo siempre apuntó a priorizar los intereses nacionales y cuando entendió que debía dar esas batallas a costa de ser revulsivo en el debate político dentro del FA, no dudó en hacerlo”, resaltó el senador frenteamplista.
El legado de Danilo
Lo que Germán Deagosto destacó como fundamento para afirmar que Astori fue la persona “más importante del país en materia económica en el siglo XXI”, fue su rol de responsabilidad política en la conducción económica de los gobiernos frenteamplistas.
“Astori es autor de esa mirada responsable que de alguna manera condujo la economía, siempre privilegiando la promoción de la justicia social, con la consolidación macroeconómica, en el marco de ese proceso de crecimiento con derrame”, destacó el economista.
Deagosto agregó que sus actitudes, su talante, su aporte y su generosidad, “hicieron del Uruguay el país que hoy tenemos”, en cuanto al fortalecimiento de las instituciones y la reputación en materia económica. “Fue una persona que apostó a la construcción de puentes, un símbolo anti grieta con una gestión gentil y afable en los disensos, algo que no abunda hoy en día”, concluyó.
Los puentes que tendió
Su capacidad de compatibilizar visiones progresistas con la solidez y rigurosidad que caracterizaron a su gestión, para dar claridad y despejar las dudas sobre las aventuras de la construcción económica (un diferencial no menor cuando se mira a la región), son los aspectos que resaltan a la hora de mirar su actuación bajo la óptica política.
“En la crisis del 2002, lo que valoré de Astori fue el reconocimiento de la estrategia de salida, lo que reflejó en el texto de la Rendición de Cuentas que envió en el año 2005, reconociendo las mejoras que había tenido la economía debido a la estrategia de salida en los años previos, que está en el mensaje del Poder Ejecutivo”, contó Julio De Brun, presidente del Banco Central del Uruguay (BCU) de aquél entonces.
De Brun también recordó y valoró cuando Astori organizó una conferencia con el Ministerio de Economía, para conmemorar los cinco años del canje de deuda, “un evento realizado durante un gobierno anterior”, invitando a figuras de la oposición a que participaran del evento como expositores.
Bergara, por su parte, reflexionó que su “visión seregnista”, de “pensar primero en el país”, se vio “claramente” en la crisis del 2002, donde Astori se manifestó en diversas oportunidades a costa de saber que dentro del FA iba a recibir posturas contrarias y negativas, lo que habla de su “coraje político”.
“Danilo siempre apuntó a priorizar los intereses nacionales y cuando entendió que debía dar esas batallas a costa de ser repudiado en el debate político dentro del FA, no dudó en hacerlo”, concluyó el senador.
Este tipo de talantes, con su apertura al diálogo y su preocupación por el bienestar común explican, en parte, la magnitud del homenaje que, a lo largo de esta última semana, los principales actores de la sociedad uruguaya le han dedicado.
Las principales reformas que promovió Astori
El grueso de las reformas que llevó adelante el FA se hicieron en su primer gobierno comprendido entre el 2005 y el 2010, que tuvo al MEF como epicentro de todas ellas.
La reforma tributaria, la más icónica de sus improntas, “fue una reforma integral del sistema que generó más justicia y mantuvo la responsabilidad en el terreno fiscal y del estímulo a la inversión”, reconoció Bergara y agregó que fue una reforma “muy compleja de procesar”.
Reabrir el Banco Hipotecario del Uruguay (BHU), crear la Agencia Nacional de Vivienda (ANV), reformular la estructura organizacional de las políticas de vivienda, incluidos los estímulos con la Ley de Vivienda Promovida, el impulso al cambio en las relaciones laborales con una cantidad de leyes que implicaron un “re-equilibrio” de poder a la hora de la negociación laboral entre empleadores y trabajadores, según el senador Bergara, fueron sus principales aportes.
