Los protagonistas de la próxima campaña electoral tendrán un nuevo desafío: la inteligencia artificial (IA). A nivel internacional, muchos políticos utilizaron la herramienta para producir materiales útiles y en oportunidades, complejos gracias a la generación de noticias falsas –fake news-. Para poner luz sobre el tema, CRÓNICAS dialogó con el creativo publicitario, Álvaro Ahuchain; el especialista en IA, Mauricio Repetto; y el politólogo, Daniel Chasquetti.
Por Antonella Aguinaga – @antoaguinaga15
El uso de la inteligencia artificial actúa como arma de doble filo; si bien por un lado, puede realizar discursos y publicidades que se adapten a cada público, se vuelve peligrosa al momento de viralizar fake news.
Otro actor fundamental en este nuevo esquema de la campaña política son las redes sociales, el medio por excelencia a través del cual se difunden estos materiales. La fuerte incidencia de las redes y las nuevas dinámicas sociales que estas generan son aspectos sobre los que los entrevistados plantearon como novedad en la próxima campaña.
Ahunchain sostuvo que a diferencia de la campaña del 2019, la generación de contenido excede a las productoras audiovisuales y agencias de comunicación ya que cualquier persona con acceso a un aparato tecnológico puede hacerlo. Por su parte, Chasquetti hizo hincapié en la fortaleza de los partidos políticos uruguayos y resaltó que los dirigentes fueron los últimos en adentrarse al mundo de las redes sociales.
Regulación de los materiales
Repetto explicó que si bien no existen reglas que amparen al uso de la IA, están surgiendo movimientos que piden su regulación. También se solicita que los materiales contengan una marca que los identifique como creados por IA.
Además, Ahunchain expresó que los comandos de comunicación de los partidos deben tener equipos amplios y software apropiado para analizar y medir el impacto de los mensajes sobre sus candidatos en las redes sociales.
Otra de las maneras de responder a las fake news, según el publicista, es generar más mensajes para que las noticias falsas queden entre el historial más antiguo.
Por otra parte, Chasquetti reflexionó sobre la necesidad por parte de los actores políticos de no usar este tipo de estrategias y apelar a que los medios de comunicación chequeen los datos.
Próximos desafíos
Una de las características fundamentales de Uruguay es no generar ni consumir fake news, sin embargo, para los especialistas es algo que podría pasar y sobre lo que destacaron la importancia de que el país tome un rol proactivo en este tipo de insumos tecnológicos.
“Lo que está en riesgo es la veracidad de las cosas que se publican”, dijo Repetto, mientras que Chasquetti se refirió a la necesidad de crear esperanza por parte de los partidos políticos. “Las elecciones deben devolverle credibilidad a la ciudadanía, ese es un problema político”, opinó, y agregó que en la actualidad la campaña no presenta la discusión de programas y políticas públicas.
Situación de Argentina
La pasada campaña en el vecino país consagró como presidente al libertario, Javier Milei y estuvo colmada de fake news y el uso de herramientas tecnológicas.
Chasquetti sostuvo que Uruguay no deposita su voto basándose en la situación o elección de los argentinos y resaltó la resistencia de los partidos políticos locales.
Por otra parte, el politólogo evaluó que es muy pronto para visualizar algunos cambios en Argentina y dijo que en Uruguay las campañas estarán más profundizadas entre marzo y abril del próximo año.
