Luego de que el encargado de representar a la Unión Europea en el acuerdo comercial con el Mercosur declarara que “faltan solo 100 metros” para cerrarlo, CRÓNICAS se contactó con especialistas para analizar el futuro del tratado. Thomas König, de la Universidad de Mannheim en Alemania, explicó por qué el acuerdo se ha estancado tanto, y tanto Marcel Vaillant como Ignacio Bartesaghi coincidieron en que no hay un cierre en el horizonte visible.
Por Sofía Dri
El experto en comercio internacional Marcel Vaillant comentó a CRÓNICAS que las palabras del jefe negociador son un mensaje por parte de la Comisión de que “no dan por perdida la batalla” y “quieren mantener viva la llama”, pero a la misma vez interpretó que el acuerdo “aún parece estar muerto”, sobre todo luego de las palabras de Macron de que la versión actual es “muy mala” y “hay que hacer uno nuevo”.
Por su parte, Ignacio Bartesaghi, experto en relaciones internacionales, en diálogo con CRÓNICAS dijo que “es normal” que el negociador del acuerdo se haya expresado de esta manera luego de las “declaraciones inapropiadas” de Macron, y que quiera dar señal de que el acuerdo sigue vivo. “También es natural no creerle”, sopesó, “teniendo en cuenta que han corrido la meta para adelante en tantas ocasiones”.
Conflictos de interés
Thomas König, politólogo de la Universidad de Mannheim, comentó a CRÓNICAS que con dos bloques tan grandes, es difícil llegar a un acuerdo. Primero tiene que haber consenso dentro de cada bloque, y eso se complica “con una heterogeneidad de intereses” como la que hay dentro de la Unión Europea y dentro del Mercosur. En Europa claramente Alemania ve el acuerdo como una oportunidad favorable para exportaciones industriales, pero Francia lo ve desfavorable por las importaciones agrícolas.
Aun así, hay intereses incluso dentro de Alemania que se contraponen al acuerdo. König mencionó que, luego de que se quitaran algunos subsidios a la industria agrícola en Alemania, el lobby del sector “pudo impulsar grandes protestas” en el país. Si bien la agricultura no es tan importante para el país centroeuropeo como puede serlo para Francia, España o Polonia, “el lobby fue eficiente en movilizar a la gente”, y eventualmente esos subsidios que se habían retirado, volvieron a entrar en vigor. “Me temo que, de haber un acuerdo con el Mercosur, habrían enormes protestas agricultoras”, concluyó.
La Unión Europea aprobó en 2020 el Pacto Verde Europeo, que consiste en una serie de políticas orientadas a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en el viejo continente, con una meta de neutralidad total para 2050. Esta línea de trabajo en la que la UE ha invertido mucho dinero, parte de la base de que hay que alentar a otras zonas del mundo a tomar el mismo rumbo, y es una de las fichas de negociación de la UE en tratados internacionales como el del Mercosur. “Aunque Alemania eliminara sus emisiones totalmente, eso significaría una reducción del 0,3% a nivel mundial, lo cual no es mucho. Por eso para tener algún efecto necesitamos que otras regiones se sumen”, explicó König.
Para Bartesaghi sería deseable que se buscaran acuerdos bilaterales entre el bloque europeo y países sudamericanos a nivel individual. “Si Uruguay puede firmar el acuerdo que se estableció en 2019, debería poder firmarlo individualmente con la UE”, reflexionó.
Las elecciones europeas
Las elecciones europeas tomarán lugar entre el 6 y el 9 de junio en los 27 Estados miembro, y sus resultados definirán la conformación del parlamento de la UE durante los próximos cinco años. Una vez conformado el Parlamento, este vota al presidente de la comisión europea, que es la autoridad máxima del brazo ejecutivo de la unión. Este asiento hoy lo ocupa la alemana Ursula Von der Leyen, que además busca ser reelecta en esta contienda.
Estas elecciones podrían llegar a impactar en el acuerdo. Según König, las negociaciones necesariamente tendrán que esperar a retomarse luego de la contienda electoral. Lo que pase en esta instancia es incierto, pero el experto adelantó que si bien “como en todo el mundo, Europa está viendo un alza en los partidos populistas”, al final del día “si se analizan las intenciones de voto, la mayoría del apoyo se concentra en partidos más tradicionales”. En ese sentido, el politólogo pronosticó que “no es probable” que estas elecciones amenacen la ratificación del acuerdo con el bloque sudamericano.
Aun así, König advirtió que, dado el vínculo entre el populismo europeo y los sectores rurales, como sucede con el apoyo a Marine LePen en Francia, si viéramos una mayor representación de estos políticos en los gobiernos nacionales, a la larga eso sí podría poner en peligro el acuerdo definitivamente.
Por su parte, Vaillant expresó que “si lo que Schlegelmilch quiso transmitir con sus palabras” fue certidumbre, no me la generó”, ya que “aún no está claro si la actual presidenta de la comisión será reelecta” en el marco de las elecciones europeas, a celebrarse entre el 6 y el 9 de junio. Una cosa que le llamó la atención al experto fue que mencionara a Macron de manera directa, lo cual “en cierta medida demuestra que está subiendo el calor del conflicto” entre la Comisión y algunos Estados miembros.
Brasil
Hay que estudiar también qué intereses hay dentro de Mercosur. Para Bartesaghi “es obvio” que Paraguay y Uruguay quieren el acuerdo, y que Argentina con la nueva administración también, pero “no queda claro aún” si Brasil está del todo interesado. “En su momento no dio las señales firmes que se esperaban”, reflexionó. Vaillant estuvo de acuerdo en este punto, y expresó que ve “muy difícil” que pueda haber un acuerdo por parte de actores protagónicos del Mercosur, especialmente en lo que respecta a las exigencias en deforestación. “A pesar del discurso proambiente de Lula, no creo que Brasil sea capaz de llevar adelante ese tipo de condicionamientos”, sentenció.