Uruguay se ha transformado con el correr de los años en un destino cada vez más frecuente de inversionistas extranjeros que buscan invertir y desarrollar sus negocios. La gran interrogante es el motivo de ello, es decir por qué razón eligen un pequeño país cuasi desconocido y alejado en el sur de América y lo ven como una posibilidad para hacerlo. El objetivo del presente artículo es intentar aproximarnos a dicha respuesta desarrollando los aspectos más sobresalientes y las políticas estatales de apertura interna y externa que han llevado a los inversionistas a elegir a Uruguay como destino.
Inversión, ese es un término que ha acompañado el desarrollo del país en los últimos años y ha llevado a que se desarrolle de forma significativa la inversión extranjera en el Uruguay en rubros comerciales de los más variados como el industrial, automotriz, turístico, construcción, forestal, ganadero o agrícola. Dichas inversiones provienen de la propia región y de mercados de todo el mundo como el asiático, estadounidense y europeo. Dicho aumento de la inversión no ha sido casualidad sino causalidad y la razón fundamental ha sido la sucesión de políticas y legislaciones cuyo principal objetivo han sido desde hace años “vender” a este pequeño país al mundo como un destino ideal para la inversión. La herramienta fundamental para alcanzar este objetivo fue llevar a la expansión de una economía chica y netamente dependiente del consumo interno, insuficiente para una posibilidad real de crecimiento, con capitales provenientes del exterior. Uruguay fue una de las primeras economías latinoamericanas que comenzó a evolucionar y salió a la búsqueda de la inversión extranjera a fin de crecer como país y acompasarse a las realidades del mundo. Este crecimiento trajo aparejados cambios en la idiosincrasia de un pueblo que no estaba acostumbrado a grandes obras de infraestructura y a que los capitales extranjeros fueran los que lideraran los mismos. Obviamente ese cambio tuvo que ir acompañado de una evolución jurídica y política que permitiera a dichos inversionistas adecuarse y desarrollarse de manera confortable en Uruguay.
A continuación enumeraré cuales han sido desde mi perspectiva esas modificaciones y las razones por las cuales muchas empresas extranjeras han optado por invertir en Uruguay:
a) Estabilidad política y social: diferentes estudios e índices publicados en los últimos años han señalado a Uruguay como un referente en la región así como a nivel mundial en lo que respecta al desarrollo y la defensa de las instituciones de la democracia, la baja corrupción, la estabilidad política- jurídica, el nivel de paz existente, la libertad de prensa y el índice de desarrollo humano. Estos factores coadyuvan a que las empresas extranjeras vean a Uruguay como un país más que interesante para invertir. También cabe agregarle a estos los factores y condiciones externos geográficos-climáticos ya que no hay terremotos, volcanes, huracanes, tsunamis, etc. por lo cual ambos en conjunto conforman un “combo” más que tentador para poder desarrollar sus emprendimientos en un clima acorde a sus necesidades. Esto se ve reflejado en informes de instituciones internacionales como por ejemplo “Doing Business” que han caracterizado a Uruguay como uno de los países con mejor clima de negocios de la región con un promedio que en el año 2014 era solo superado por Chile.
b) Apertura del mercado hacia la región y el exterior: Uruguay fue uno de los fundadores junto a Brasil, Argentina y Paraguay del Mercado Común del Sur (Mercosur) en el año 1991. Hoy día el mismo también está conformado por Venezuela y su principal objetivo es desarrollar y consolidar al bloque regional y ampliar sus mercados hacia el exterior. Uruguay no fue solo uno de los principales impulsores sino que también ha sido uno de sus más fervientes defensores e incluso se encuentra la sede del Mercosur en su capital, Montevideo. Ha sido a partir de la creación del Mercosur que Uruguay ha buscado la apertura del mismo entre sus propios miembros y hacia otros bloques y países extranjeros. El Mercosur a su vez ha suscrito acuerdos comerciales con varios países latinoamericanos y con varios países fuera de la región como Egipto, Palestina, Israel, Rusia, USA. etc.
El Mercosur en estos años ha alcanzado algunas metas sobresalientes como representar el 36 % del comercio de Latinoamérica y el 56 % del Producto Bruto Interno de Latinoamérica.
Es importante destacar que Uruguay no se ha detenido en el bloque regional y ha ampliado su mercado hacia países afuera como Japón, USA, Rusia, China o la propia Unión Europea, entre otros, con quienes ha firmado acuerdos bilaterales de servicios, de bienes, fiscales, sistemas generalizados de preferencias (SGP).
Estas políticas regionales e internacionales denotan una política del país tendiente al crecimiento hacia el exterior y a la captación de inversiones de países para el crecimiento sustentable de la economía uruguaya.
c) Modernización del Sistema: En Uruguay se ha logrado en los últimos años dar preferencia a la inversión extranjera y por ende se ha tratado de acompasar su realidad a la de inversionistas que vienen de diversas partes del mundo y que buscan alcanzar de manera eficiente, rápida y efectiva sus objetivos planteados. En virtud de ello se han desarrollado y actualizado diversas áreas que estaban vetustas y arcaicas en su funcionamiento.
A modo de ejemplo podemos enumerar algunos de los principales logros alcanzados en lo referente a este tema: I) Se creó un sistema impositivo único en todo el territorio que permite unificar y centralizar de forma eficiente todo lo referido a impuestos, su regulación y pagos. II) Se aprobó la ley 18.600 que regula la nueva modalidad de facturación y firma electrónica, su validez, admisibilidad y eficacia jurídica al igual que en las principales economías del mundo. III) A partir de la ratificación de parte de nuestro país del Convenio de La Haya la autentificación de documentos públicos extranjeros es ágil y eficiente IV) En lo relativo a la exigencia de visas para el ingreso a Uruguay, son más de setenta países a quienes no se le exige la misma a sus ciudadanos V) Se encuentra reglamentada la igualdad de trato para extranjeros y nacionales lo que permite al inversor extranjero estar en la misma posición al momento de realizar negocios que los nacionales VI) Libre mercado de cambios sin restricciones VII) En lo relativo a los trámites burocráticos como por ejemplo la tramitación de la Cédula de Identidad o las residencias e incluso para la apertura de la Sociedad al inicio de la actividad comercial, se pueden realizar en plazos escuetos y con trámites sencillos.
VIII) Se ha modernizado la cobertura y conectividad de internet, el uso de celulares y digitalización en todo el territorio nacional logrando una conectividad de 24 horas con Asia, Europa y Oceanía. Es importante destacar la ventaja de tener un uso horario similar al de USA y al resto de América IX) En lo relativo a ingreso y egreso del país se cuenta con una infraestructura portuaria de primer nivel y con un aeropuerto construido a nuevo en el año 2009 y considerado como uno de los mejores del mundo. En lo relativo a la conexión interna la misma es de fácil traslado y rápida a través de carreteras que unen todo el país y que tiene como mayor extensión desde el Sur al Norte una distancia aproximada de 650 kilómetros.
d) Recursos humanos locales: En Uruguay existe una excelente capacitación profesional en lo que refiere a capital humano y mano de obra calificada además de sueldos competitivos para la región. Se transformó en el primer país del mundo en entregar gratuitamente computadoras a todos los alumnos e instituciones educativas públicas en todo el país en lo que se conoció como el Plan Ceibal y que permitió una capacitación informática desde la más temprana edad.
Es importante tomar en cuenta que la educación terciaria es gratuita y de primer nivel y un gran porcentaje de la población tiene estudios en idiomas como inglés y portugués y en menor escala en francés, alemán e italiano.
Uruguay siempre se ha caracterizado por proteger y mantener una clase media fuerte desarrollada intelectualmente y que ha sido a lo largo de la historia un pilar fundamental para el desarrollo del país.
e) Legislaciones acordes y modernas: Históricamente Uruguay se ha distinguido por mantener una política de apertura a la inversión extranjera y al capital proveniente del exterior entre otras razones por los motivos desarrollados a lo largo del presente artículo. El año 1998 y la aprobación de la ley 16.906 “Ley de Protección y Promoción de Inversiones Nacionales y Extranjeras” supuso un pilar fundamental en la consagración de estas ideas y principios y la piedra angular es el principio fundamental de “igualdad de condiciones para los inversores nacionales y los extranjeros”. Una vez que se presenta el proyecto de inversión y es declarado de interés nacional se concede una serie de incentivos fiscales y arancelarios que sin dudas son un gran atractivo para que inversionistas extranjeros busquen instalarse en nuestro país. Dichos beneficios a modo de ejemplo se dan a través de: I) Exoneración del Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE) si se cumplen con requisitos especialmente previstos en la ley II) Exoneración del Impuesto al Patrimonio (IP) para obras civiles de duraciones aproximadas de 10 años III) Devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a través de certificados de créditos.
Posteriormente a la mencionada ley se continuó legislando en Uruguay a fin de alcanzar la meta de consolidar y respaldar jurídicamente a la inversión en nuestro país. Es así que el 06/12/2007 se aprobó el decreto 455/007 donde se determinó que “el crecimiento de la inversión constituye la piedra angular para consolidar el proceso de desarrollo del sistema productivo”. A fin de cumplir con este propósito se establecen como principales cometidos el adoptar las medidas necesarias para estimular la inversión mediante el mejoramiento de aspectos institucionales y de atención al inversor y establecer un sistema de exoneraciones como las que mencionáramos previamente.
Posteriormente en el año 2012 se aprobó el decreto 2/2012 que buscó optimizar y modificar la evaluación de los proyectos de inversión eliminando, por ejemplo, indicadores de difícil control y redefiniendo los indicadores de descentralización y fomentando entre otros lo pertinente a la instalación de los parques industriales. En resumen se buscó introducir criterios de mayor calidad y facilidad para la inversión extranjera.
Otra ley fundamental y que ha fomentado la inversión extranjera en Uruguay es la ley 15.291 que regula el régimen especial de Zonas Francas que permiten a las empresas que se instalen en las zonas francas tener una exoneración tributaria cuasi absoluta, con la única excepción del aporte de la seguridad social de sus trabajadores. Los bienes, servicios, mercaderías y materias primas pueden ser importados y exportados desde y hacia territorio franco exentos de todos esos tributos. Existen diversas zonas especializadas y adecuadas con toda la última tecnología y confort para brindar este tipo de servicios como son: Aguada Park, Zonamérica, Parque de las Ciencias y World Trade Center Free Zone.
También existe un régimen muy beneficioso para el sector de call-centers regulado en el decreto 379/011 que exonera de IRAE a las rentas que se originen en dichas actividades.
Además de las leyes y decretos mencionadas se ha aprobado en nuestro país otro tipo de normativas tendientes a facilitar y promover la inversión extranjera como por ejemplo la ley 17.555 que declara al Aeropuerto Internacional de Carrasco en régimen de aeropuerto libre o la ley 16.246 de Puertos. En las mismas se consagra el libre tránsito de mercaderías, la exoneración del Impuesto al Patrimonio y del Impuesto a la Renta de las Actividades Empresariales para personas jurídicas extranjeras.
Para finalizar vale mencionar las nuevas leyes aprobadas en estos últimos años como la de ley 18.786 de Participación Público-Privada donde se fomentan las inversiones conjuntas entre capitales públicos y privados y la Ley 18.795 de Acceso a las Viviendas de Interés Social donde se conceden grandes exoneraciones a quienes inviertan y construyan viviendas para familias de ingresos medios y bajos.
A modo de conclusión debemos resaltar que Uruguay siempre se ha caracterizado por una política de apertura a la inversión extranjera desde sus inicios. Tanto en los aspectos legales como tributarios se busca favorecer las inversiones en diversas áreas de la economía como la industria, el agro, finanzas e inmuebles. Esto trae consecuencias positivas para el país como la generación de trabajo, la mejora de la eficiencia, capacidad productiva y de la competitividad con una apertura constante hacia la región y hacia nuevos mercados.
Obviamente existen muchos aspectos en que continuar trabajando y mejorando a fin de acompasarlo con los países del primer mundo, el camino está trazado y ahora será cuestión de que el Estado continúe el rumbo de los últimos años y fundamentalmente que los uruguayos sepamos acompañar dicho rumbo en pos de un desarrollo sustentable de un país que precisó, precisa y precisará siempre de la palabra Inversión para continuar creciendo.
Galante & Martins