El nuevo informe anual que brinda el Sistema Nacional de Información Ganadera (SNIG), fue proporcionado el viernes 29 de setiembre. El mismo se basa en las declaraciones juradas realizadas por los productores al 30 de junio. De los datos surge que se ha producido una nueva caída del stock vacuno -aunque la excepción la marcan las categorías de vacas de cría y los terneros. Por su parte, aunque bastante lenta, se puede observar un crecimiento en el stock ovino.
El rodeo vacuno nacional tuvo una nueva caída al quedar en 11,7 millones de cabezas (-1,2%), siendo las causas, un mayor volumen y el incremento de las exportaciones en pie.
La disminución de animales afectó prácticamente a todas las categorías, a excepción de las vacas de cría 2,9% en comparación con el año anterior (+ 118.960 cabezas), y los terneros que se incrementaron 1% (+ 27.000 cabezas) respecto a 2016.
El clima que se ha registrado en los últimos meses ha permitido que el rodeo vacuno no haya afrontado problemas significativos tanto en el verano pasado, ni en el otoño y el invierno. La primavera transcurre dentro de los parámetros normales y con una abundancia de precipitaciones que provoca una buena abundancia de comida. Esto permite que técnicos y productores consideren que en las próximas pariciones habrá un importante incremento de terneros, no descartando que en 2019 se alcanzarán los tres millones de terneros.
El talón de Aquiles en la caída del stock se encuentra en la baja en la cantidad de novillos en todos sus estados. Es así que el número de animales de 1 a 2 años cayó un 9,3%; los de 2 a 3 años un 9,9%; y los de más de 3 años un 0,2%. El total de novillos faltantes con respecto al año anterior llega a 239.000 animales. El dato que enciende una luz amarilla debido a que en la categoría de novillos de 1 a 2 años, el faltante es de 100.000 cabezas; esto augura un volumen menor de faena en los próximos años.
En cuanto a la categoría vacas, se puede observar que las vacas de cría (entoradas) se incrementaron un 2,9%, en tanto las vacas de invernada disminuyeron un 6,6%, tal vez como consecuencia que los invernadores lograron una buena producción de sus rodeos. Las vaquillonas, en sus dos categorías muestra que las de más de dos años sufrieron un descenso del 7,9% (- 44.744 cabezas), como producto de un incremento por parte de los frigoríficos para cumplir con la mayor demanda de la cuota 481 y el aumento de las exportaciones en pie de esta categoría. Las vaquillonas de 1 a 2 años cayeron también un 1,8%.
Lanares
Para los ovinos, el informe destaca que el rodeo de estos animales aumentó 1,7% con respecto al año anterior (+ 109.346 cabezas). Debe destacarse este dato debido a que el año anterior la faena de ovinos se incrementó un 10%. Esto es debido al aumento de corderos y corderas en un 20%.
En relación a las ovejas, las de cría muestran una caída del 1,1%, mientras que las borregas sin encarnerar aumentaron un 7,5% lo que indica que el potencial reproductivo aún no se recupera, pero hubo una buena parición.
Las futuras madres, las borregas dientes de leche es la categoría que mostró el mayor crecimiento con un 8,3%, lo que está mostrando que en el futuro la cantidad de ovejas encarneradas sea igual o mayor al de este año.
