Se mantuvo prácticamente incambiado el mercado lanero australiana al sostener la ganancia lograda la semana pasada, más allá del aumento de la oferta. En la plaza local no aparece oferta hasta que se consoliden los valores en el exterior y los productores fijen su posición.
El jueves pasado en Australia a U$S 10,47 por kilo base limpia cayendo nuevamente 0,85 en la semana. Esto aconteció básicamente el dólar estadounidense frente al australiano. En la divisa local el Indicador de Mercado del Este (IME) ganó siete centavos o 0,46% por kilo base limpia.
En el acumulado de la zafra 2019/2020 – que comenzó en julio- el Indicador da 12,7% en dólares estadounidense y 10,1% en la moneda local.
Un dato importante es que la semana pasada aumentó la oferta llegó a 30.130 fardos, un volumen 38% superior a los 21.830 fardos de la semana anterior. Por su parte, la comercialización se ubicó entorno al 90%.; en el informe del IME se reportó desde Australia se indicó que se retiraron menos fardos antes de los remates respecto a lo que sucedió en las semanas anteriores ante la baja de los precios.
Caída
Según un informe de Australian Word Innovation en una conferencia de lana en Nanjig, en China se notó una sorprendente mejor atmósfera de negocios de lo que esperaba la mayoría. La mayor parte del interés se da en las lanas entre 18 y 22 micras con menos demanda por las lanas superfinas.
El Gobierno australiano prevé caída de 26% del Indicado de Mercado del Este en 2019/2020. El Consejo Autraliano de Agricultura y Recursos Económicos (Abares, por su sigla en inglés) proyecta que en 2019/2020 el valor promedio del IME se ubique en AU$ 14,35 por kilo, una caída de 26% respecto a la media de 2018/2019 fue de AUS 19,39 por kilo.
En el reporte se indica que este ajuste se dará mayormente por la menor e incierta demanda en los mercados laneros internacionales.
El organismo indicó que la tensión entre Beijing y Washington dieron un incentivo a los industriales chinos a postergar las compras de lanas. «Una prolongada trayectoria de precios históricamente alta de la lana estimula a los textiles industriales a sustituir por fibra de menores costos» apuntó el informe.
Abares resaltó que el IME está todavía por encima de del promedio de largo plazo en términos reales. «Sin embargo, la actual incertidumbre sobre el comercio y la competencia de fibra alternativa, podría forzar a la lana a acercarse a la paridad con esa otra fibra en términos de dólar», agregó.
Para 2019/2020 el consejo prevé que la producción de lana australiana caiga 5% respecto a la alta anterior hasta 286 millones de kilos.
