El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) otorgó una línea crediticia especial a través de la herramienta del Programa Microcrédito Rural, que lleva adelante la Dirección General de Desarrollo Rural (DGDR). La inversión fue de unos $ 10.000.000 para la línea PMR Sequía.
El impacto de la sequía y la extensión de la emergencia agropecuaria no dan tregua al sector, que una vez más se ve obligado a generar herramientas para paliar esta situación. En esta oportunidad, mediante un crédito para familias rurales de un máximo de $ 100.000 con un plazo de entre 12 y 24 meses.
El objetivo de este beneficio es aliviar la compleja situación de la producción agropecuaria, lograr un reinicio del ciclo productivo y proveer a los animales de una buena alimentación, además de mejorar la circulación de agua en la extensión total del predio.
Déficit hídrico
El director de Desarrollo Rural, Carlos Rydström, comentó que se trata de “otra herramienta importante para la producción familiar y para toda la población rural”, en este momento de efecto negativo en sentido económico, productivo y anímico para todos los productores.
“Para nosotros es muy importante poder mantener de pie y fortalecer esta herramienta que siempre está disponible y cerca del productor”, explicó el jerarca, según consignó Presidencia, y aseguró que es una más de las herramientas que se pusieron a disposición del sector rural ante la crisis por el déficit hídrico.
“La resiliencia de la producción familiar y de este programa, se ponen nuevamente a prueba para demostrar que es una herramienta fuerte y adaptada a la realidad del medio rural”, aseguró Rydström.
La herramienta crediticia funciona desde 2004, es ejecutada y articulada entre la Dirección General de Desarrollo Rural – MGAP y Fundasol, en conjunto con los integrantes de los Comité de Crédito Local, quienes hacen posible su instrumentación.
