La situación climática para el sector agropecuario uruguayo no presenta grandes modificaciones a pesar de las últimas precipitaciones. La situación es compleja y no se descarta que en las próximas semanas puedan incluirse nuevas zonas. También el SUL realiza recomendaciones para la próxima esquila ante el Covid-19.
El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), a través de la Unidad de Descentralización, extendió la Emergencia Agropecuaria a los departamentos de Artigas, Salto y Rivera; también se incluyen otras seccionales de Cerro Largo y Treinta y Tres.
De acuerdo al Ministerio, ingresan ahora un total de 17 seccionales nuevas, superando las 5,7 millones de hectáreas desde la primera declaración, el 9 de marzo. Ahora a 8.100 productores familiares, y productores con menos de 100 hectáreas.
Agrega que, el monitoreo es constante y que no se descarta que puedan haber más zona incluidas en las próximas semanas.
Los productores deberán registrarse en el Fondo Agropecuaria de Emergencia (FAE) y tienen tiempo hasta el 15 de junio.
En cuanto al rodeo vacuno en nuestro país, el precio de los mejores novillos de exportación sufrió un pequeño descenso mientras que las vacas y las vaquillonas mantuvieron sus valores. Los ganados de pasturas son escasos y la industria muestra preferencia por vacas y por animales de abasto.
La categoría de novillos muestra dificultades para su comercialización debido a la dificultad de colocar sus cortes en Europa, a lo que se agrega el retraso en la llegada de las cuadrillas Kosher. El valor por esta categoría oscila entre U$S 3,15 y U$S 3,20 por kilo en cuarta balanza.
Las vacas cuyo destino principal es China se pagan entre U$S 3,05 y U$S 3,10, en tanto las especiales pueden llegar a U$S 3,15, también por kilo en cuarta balanza, mostrando un acercamiento de precios entre éstas y los novillos. En lo que refiere a las vaquillonas -que se destinan al abasto- cotizan entre los U$S 3,20 y U$S 3,25 el kilo.
En la última reunión de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) se fijaron los valores para el novillo gordo especial de exportación en U$S 3,19 y los de abasto en U$S 3,22 (1 centavo menos); la vaca gorda especial se mantuvo en U$S 3,10 el kilo y la vaquillona buena subió dos centavos a U$S 3,18. El comentario dice: «Con buen nivel de faena por alta participación de haciendas de corral, continúa la poca oferta de ganados de pasturas y las preferencias por vacas».
Las exportaciones están complicadas. Al igual que en el mes de noviembre, los exportadores uruguayos como los de la región indican que existen renegociaciones de precios y el retraso de los pagos por parte de los varios importadores chinos de carne vacuna.
En el gigante asiático, ante la falta de carne porcina -que solo ingresa por el canal gris (Hong Kong y Vietnam)- decidieron liberar la compra de carne vacuna. Esto hace que importadores conservadores no se encuentren dispuestos a realizar dichas prácticas. Los industriales uruguayos se vuelcan a la colocación de carne por los canales oficiales, porque de lo contrario esta situación genera incumplimientos comerciales graves.
Alerta
El Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), realizó una alerta a los ganaderos de vacunos y ovinos por altos volúmenes de nitratos en pasturas que provocan intoxicaciones.
El origen de las mismas se debe a una excesiva acumulación de nitratos en los forrajes, particularmente verdeos, y malezas, que ocurre cuando la absorción desde el suelo es superior a la posibilidad que tienen las plantas de sintetizarlos y convertirlos en proteínas. Los altos niveles de nitratos en el suelo pueden deberse a fertilizaciones nitrogenadas recientes, agregados de estiércol, cultivos estresados por falta de sol y excesos de frío, y a déficit hídrico prolongado.
Los nitratos pueden acumularse prácticamente en cualquier forraje, siendo más común en las gramíneas que en las leguminosas, pudiendo ocurrir incluso en malezas. Su concentración es normalmente mayor en tallos que en hojas. Por lo tanto, los animales que pastorean estos tipos de alimentos están expuestos a un mayor riesgo de intoxicación.
La probabilidad de intoxicación aumenta tras el pastoreo de verdeos que sufrieron estrés hídrico y/o fueron fertilizados con nitrógeno o estiércol.
La intoxicación por nitratos produce pérdidas productivas, reproductivas e incluso la muerte de animales. Esta intoxicación es de fácil prevención.