“Desarrollo de Productos” se consolida como la temática más demandada para las instancias de formación de Impulsa Alimentos, al realizarse la quinta edición de dicha capacitación con la participación de 53 personas integrantes de 45 empresas del rubro alimentos y bebidas, que residen en 8 departamentos de nuestro país.
Desarrollar un producto nuevo o aplicar nuevas tecnologías en uno ya existente implica analizar el producto, investigar a los futuros consumidores y comparar con otros productos que se encuentren en el mercado a nivel local y global. Para ello, es necesario conocer las tendencias en desarrollo de productos, y la capacitación brindada por Impulsa Alimentos presenta un amplio panorama de lo que se debe tener en cuenta a la hora de innovar.
En esta quinta edición, se renueva el espacio de trabajo de Impulsa Alimentos con el Departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Facultad de Química de la Universidad de la República (UdelaR), teniendo como temática principal el estudio sensorial con consumidores y la determinación de vida útil de alimentos. Se presenta al personal de la industria alimentaria, los fundamentos técnicos involucrados en el desarrollo de productos, haciendo hincapié en las tendencias e innovaciones mundiales e incorporando este año información sobre nuevos hábitos de consumo vinculados con la pandemia COVID-19.
Dentro de los temas abordados en profundidad durante la actividad se encuentran: motivos por los cuales desarrollar un nuevo producto, factores sociales asociados al consumo de alimentos, ciclo de vida de un producto, evolución de las tendencias de consumo, prioridades en el desarrollo de productos, importancia de la opinión de los consumidores, jueces sensoriales, investigación cualitativa, focus group, técnicas proyectivas, entre otros.
En esta oportunidad, la capacitación tuvo algunas diferencias en cuanto a su formato ya que en el marco de las medidas de aislamiento ocasionadas por el COVID-19 en nuestro país, Impulsa Industria adaptó los contenidos y la forma de llevar adelante sus actividades para que las empresas industriales fortalezcan sus capacidades. En este sentido, la capacitación se realizó a través de la herramienta digital ZOOM permitiendo que participen de la misma, integrantes de 8 departamentos de nuestro país. También se dividió en dos jornadas; el jueves 28 de mayo que se trabajó principalmente sobre los estudios sensoriales con consumidores y el jueves 4 de junio que se focalizó en la vida útil de alimentos.
Primera jornada: Estudio sensorial con consumidores
La Dra. Adriana Gámbaro, Docente y Directora del Departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Facultad de Química de la UdelaR, llevó adelante la primera jornada enfocándose en los motivos para desarrollar un producto, presentó las tendencias mundiales en innovación de alimentos y los nuevos hábitos de consumo vinculados con la pandemia COVID-19. Además, profundizó en los fundamentos de la percepción sensorial, las metodologías y aplicaciones del estudio sensorial con consumidores en el desarrollo de productos y la planificación y diseño de estudios sensoriales.
En cuanto a los efectos del COVID-19 en los consumidores, Gámbaro afirmó: “Las necesidades de los consumidores cambian día a día, y con el COVID-19 más aún. Hay que estar atentos porque el cambio en el consumidor de alimentos se ve afectado por lo social”. A raíz de esta afirmación, es que explicó que desde que llegó la pandemia a nuestro país, hubo un aumento de consumo de productos básicos y alimentos de indulgencia, además, en estos días el consumidor prefiere los paquetes de alimentos más grandes.
Segunda jornada: Vida útil de alimentos
La segunda jornada estuvo a cargo de la Ing. Alim. Antonella Roascio, ex docente de la Facultad de Química de la UdelaR, quién trabajó sobre los factores que intervienen en la pérdida de calidad de un producto alimenticio y la conservación de alimentos para alargar su vida útil, así como los aspectos legales y el etiquetado de alimentos.
En cuanto a la selección de la metodología a utilizar para el estudio de vida útil de un alimento, Roascio explicó que “…según el tipo de producto es el criterio de falla a utilizar; no es lo mismo el nivel de aceptabilidad inicial del agua que la consumimos por necesidad que el de un producto que consumimos porque nos gusta”.
El interés de los participantes indica que es una temática que se debe seguir trabajando ya que el consumidor modifica sus hábitos e intereses y para satisfacer sus necesidades, las industrias deben adaptarse constantemente a lo que los consumidores demandan y a los cambios que suceden a nivel local y global.
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Impulsa Alimentos es una de las líneas de acción de Impulsa Industria; un proyecto ejecutado por la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU) y apoyado por el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (INEFOP).
