Una reciente investigación de New Edelman muestra que tres cuartos de las personas confían en su empleador, pero menos de la mitad tiene fe en su gobierno. Además, el 73% piensa que una empresa puede “aumentar las ganancias y mejorar las condiciones económicas y sociales en las comunidades donde opera”. Eso es un aumento de 9% respecto al año anterior.
Con las crecientes expectativas de los accionistas, ninguna empresa puede darse el lujo de quedarse atrás. Los líderes de hoy deben pensar en el futuro de su negocio y también demostrar una contribución positiva a la humanidad.
Así que los expertos han hecho cinco sugerencias para ayudar a las personas y a sus negocios a equilibrar las ganancias con los objetivos.
Invertir en las personas
La OCDE estima que el 65% de los niños de hoy tendrán trabajos que aún no existen. Los avances en robótica e inteligencia artificial ya están creando oportunidades para aquellos con la experiencia y la capacidad adecuadas para aprovecharlos, pero otros temen quedarse atrás.
Junto a los gobiernos, las empresas tienen la responsabilidad de equipar a sus empleados con las habilidades que necesitan para mantenerse a la vanguardia del cambio tecnológico.
Invertir en capacitación para habilidades técnicas y blandas, repensar formas de trabajar y construir proactivamente un flujo de talentos son algunas de las cosas que los equipos de administración deben hacer para garantizar que su empresa y su fuerza laboral sigan siendo competitivos en las próximas décadas.
Mantener el ritmo con la tecnología
La tecnología está transformando dónde y cómo los consumidores compran bienes y servicios, cómo interactúan con las marcas y entre sí, y cómo las empresas producen y venden sus productos.
Las ventas online se han duplicado en solo cinco años, los bancos utilizan el aprendizaje automático para comprender mejor las necesidades de los clientes. A su vez, los fabricantes utilizan datos inteligentes para adaptar sus líneas de producción.
Mantenerse al día con respecto a las últimas innovaciones, pensar en las tendencias futuras y crear una estructura y cultura lo suficientemente ágil como para capitalizar el cambio es fundamental para que las empresas sobrevivan a la transición digital.
Mirar a Asia
Para 2050, miles de millones de consumidores se unirán a las clases medias, particularmente en Asia. La región ya alberga al 28,5% de los 2.754 multimillonarios del mundo, más que América del Norte.
El reequilibrio de la riqueza global hacia Asia está abriendo nuevos mercados para que las empresas con mentalidad internacional puedan aprovecharlo. Esto comienza con la investigación de la oportunidad para el producto o servicio específico, posiblemente adaptándolo a las preferencias locales, y luego aprovechando el poder de las herramientas digitales para llegar a estos clientes cada vez más expertos en tecnología.
Durante la próxima década, aproximadamente el 70% del crecimiento mundial provendrá de países que actualmente describimos como mercados emergentes.
Descarbonizar operaciones
Una encuesta reciente de HSBC mostró que una de cada tres empresas planea hacer que sus cadenas de suministro sean más sostenibles. Sin importar su tamaño, las empresas pueden reducir su huella ambiental y desempeñar un papel activo en la mitigación de los riesgos asociados con el cambio climático.
La buena noticia es que ser ecológico también puede hacer que el negocio sea más competitivo. Las empresas que pueden demostrar credenciales de alta sostenibilidad y atraer al creciente número de consumidores que desean comprar productos ecológicos.
Una acción común es tratar de encontrar una fuente más cerca de casa. Cuando las materias primas viajan distancias más cortas, eso ayuda a reducir las emisiones y ahorra costes de transporte. Los líderes que desean hacer una transición de su negocio para ser más sostenibles pueden ver a quién le compran y dónde, e invertir en fuentes de energía renovables.
Entender el propósito
El propósito significa más que entregar los productos y servicios correctos a los clientes, también se trata de hacer lo correcto por la comunidad.
Las expectativas del público y de los accionistas nunca han sido más altas, por lo que las empresas deben demostrar un impacto positivo en las condiciones económicas y sociales.
Algunas empresas ya están liderando con el ejemplo. Unilever, por ejemplo, ha desarrollado un Plan de Vida Sostenible que busca el progreso hacia la reducción de su huella ambiental, al tiempo que aumenta su impacto social positivo.
Es importante que los líderes entiendan el impacto social de su negocio e implementen una estrategia de RSC medible y transparente para mejorarla. En este enfoque, los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU pueden proporcionar una hoja de ruta útil.
Cambiar el modelo de negocio para satisfacer nuevas expectativas y aprovechar nuevas oportunidades requiere un fuerte liderazgo, inversión y visión.
En un entorno que cambia rápidamente, los líderes que pueden demostrar agilidad y responsabilidad estarán en la mejor posición para asegurar el éxito a largo plazo.
Esto puede parecer más fácil para las grandes empresas con equipos de estrategia dedicados que para los propietarios de pequeñas empresas, pero el futuro siempre es importante, independientemente del tamaño.
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