Las responsabilidades del sector público y del sector empresarial para el desarrollo económico del país
El presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay, Dr. Alfredo Antía, expuso en el Almuerzo ADM la visión de la gremial sobre los temas centrales que aportan al desarrollo económico de nuestro país. Para ello, se centró en tres bloques temáticos que requieren diferentes roles desde el sector público y el empresarial: entorno de negocios, competitividad y actitud del empresario industrial. Además, planteó un tema que representa el principal desafío para el país: la mejora de la educación.
El pasado jueves 26 se realizó una nueva edición del Almuerzo de Trabajo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing del Uruguay; un punto de encuentro de debate y de exposición de los sectores productivos más importantes del país, en donde se promueven los vínculos y las relaciones entre los ámbitos empresariales y gubernamentales.
Allí, disertó el presidente de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU) con una presentación denominada “Presente y futuro del desarrollo económico nacional: visión del sector industrial”. También hicieron lo suyo, presidentes y representantes de las Cámaras de la Construcción, de Comercio y Servicios y de la Asociación Rural. Además, estuvieron presentes el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Dr. Pablo Mieres; y la Ministra de Vivienda, Dra. Irene Moreira.
El ciclo de conferencias lo inició el presidente de CIU, Dr. Alfredo Antía, quien centró su presentación en el análisis de los actores que se encuentran vinculados con las bases del desarrollo económico de nuestro país y las responsabilidades que le corresponden a cada uno. Durante la misma, explicitó la posición de la gremial empresarial y los apoyos que ofrece al sector.
Responsabilidades del Estado vinculadas al entorno de negocio
Como responsabilidad de gobierno y en el marco institucional, existen tres aspectos que se encuentran en el cofre de seguridad de la economía uruguaya: la economía estable, la estabilidad política y la paz social.
Sobre la primera, Antía afirmó: “La pandemia generada a raíz del Covid desnudó nuestras carencias, pero también mostró nuestras fortalezas. Llevó al gobierno a tomar medidas muy inteligentes que permitieron mantener los motores de la economía funcionando: el manejo de las mencionadas “perillas”, la ayuda a las empresas, los créditos contingentes, el seguro de paro parcial, la ayuda a la población más vulnerable, entre otros.”
En cuanto a la estabilidad política, Antía compartió un recuerdo que le resulta representativo: “La imagen de nuestro expresidente Dr. Tabaré Vázquez sonriendo y colocando la banda presidencial a un nuevo presidente de otro partido, Dr. Luis Lacalle Pou, en un marco de celebración de Estado. Esto que nos enorgullece, es visto desde afuera como una virtud de un país que tiene una separación de poderes clara, con valores que son señalados por organizaciones internacionales, que afirman que somos ‘un país único en América’”.
Sobre el último de los tres aspectos, afirmó: “Estos conceptos, sumados a la paz social, de la que se menciona poco, muestran el contraste con países que son cercanos. Esa es la base sobre la que debemos construir nuestros desafíos”.
De forma complementaria se refirió al entorno macroeconómico. Por un lado, la relevancia del mantenimiento de la regla fiscal para el sector industrial, porque lo fiscal incide en lo cambiario, y el tipo de cambio es una variable muy relevante para las empresas que compiten con el exterior, exportando, o las que venden en el mercado interno. Otra variable relevante es la inflación, sobre la cual planteó que se precisan otras contribuciones para abatirla, además de las monetarias que despliega el BCU.
Antía profundizó especialmente en la presión fiscal, la cual afecta a la inversión: “Para ser más justos, equitativos y estimular la inversión del país hay que revisar y recuperar el ajuste por inflación en el IRAE. Es increíble que tengamos una carga impositiva para las Pymes por fictos donde una empresa que factura US$ 200.000 por año, el día que se pasa un dólar de ese valor, en lugar de abonar por el 3,3% de las ventas, lo hace por el 9%”.
También el representante de la gremial industrial destacó aspectos referidos al funcionamiento del Estado, los mercados energéticos y la Seguridad Social.
En todos estos temas de entorno económico, los empresarios tienen poco por hacer, salvo incidir para que los gobernantes adopten buenas prácticas que procuren entornos competitivos para las empresas industriales.
Responsabilidades de los empresarios
Las empresas tienen un rol de responsabilidad exclusiva que deben asumir y ejecutar. En este sentido, el presidente de la Gremial hizo especial hincapié en el rol del empresario ante la sociedad, afirmando: “Como empresarios tenemos que hacer un esfuerzo por demostrarle a la comunidad que somos una figura que venimos a sumar y a hacer crecer el país, que representamos el liderazgo social. Hoy por hoy, hay un paradigma que hace que miremos de reojo al empresario, con una mirada que censura el éxito. Es difícil hacer crecer un país si no cambiamos esta visión sobre quienes traccionan el Uruguay”.
Además, el sector empresarial debe asumir que las nuevas tecnologías son una prioridad en la actualidad, y por ello, se debe profundizar en las posibilidades de incorporación en los negocios. Por su parte, los ámbitos saludables resultan fundamentales para la atracción de talentos y la generación de espacios de realización. De igual forma, la seguridad y salud, que se vinculan directamente con el clima laboral.
Responsabilidades compartidas
Por último, Antía mencionó los temas que consideró de “responsabilidad compartida” del sector público y el sector empresarial, donde destaca la inserción internacional, producción sostenible, relaciones laborales, emprendedurismo e innovación.
Sobre la inserción internacional de las empresas nacionales, Antía afirmó: “Como Cámara, en los últimos 10 años hemos colaborado desde nuestros departamentos técnicos con 250 empresas que han salido al exterior, fortaleciendo sus capacidades en un trabajo conjunto con Uruguay XXI”.
Otro tema relevante que aborda activamente la CIU es la producción sostenible. Al respecto, su presidente comentó: “Hay mucho para hacer y un compromiso grande con las próximas generaciones. En CIU tenemos un Sitio de Disposición Final que lleva depositadas 82 mil toneladas de residuos peligrosos. Además, estamos trabajando en un plan de recuperación de envases que es muy desafiante y para el cual tenemos que alinear a gobiernos departamentales, gobierno nacional y empresas. Hay mucho camino por recorrer”.
Otro foco de trabajo al que la CIU presta gran importancia es el emprendedurismo: “Desde CIU trabajamos con mucho esfuerzo para apoyar a las nuevas empresas. En 2021, más de 100 emprendimientos industriales fueron ayudados con su nacimiento, puesta en el mercado, potenciación y escalamiento”.
Educación y capacitación
El final de la exposición de Antía se centró en el principal desafío país, la mejora de la educación. Sobre este tema, afirmó que es necesario dar un salto cualitativo en las capacidades de los integrantes de las empresas para que exista un real desarrollo económico. “Como industriales tenemos dificultades para conseguir personal calificado. Además, debemos ayudar a los colaboradores que ya están en las empresas y que no tienen la posibilidad académica de mejorar. Las industrias son escuelas de conocimiento, trabajo y superación”, afirmó el presidente de CIU.
Asunción de responsabilidades
Para cerrar, Antía explicó el resultado esperado si cada uno de los actores se hace responsable de “la parte que le toca”, afirmando: “Si estas responsabilidades se transforman en deberes, nuestro país tendrá mejores condiciones para inversión y, por ende, de desarrollo económico”.
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