El año pasado la economía uruguaya aumentó levemente un 0,4%, empujado por el turismo en la temporada de verano de 2023, la nueva planta de celulosa y la mejora en la zafra agrícola luego del impacto de la sequía.
Por Sofía Tuyaré (*)
La economía registró un magro desempeño el año pasado, donde algunos acontecimientos marcaron el rumbo económico. Enumerando algunos de los factores que incidieron, se destaca la sequía, que afectó a las exportaciones y generó una emergencia hídrica sin precedentes; la situación en Argentina, que llevó a una diferencia cambiaria que impactó en el país -principalmente en el litoral-; el contexto mundial más adverso con un comercio internacional desacelerándose, entre otros sucesos que impactaron en el nivel de actividad local.
Algunos riesgos empiezan a mitigarse y podría impulsarse el crecimiento este año. Si bien existe incertidumbre respecto a algunas variables que pueden empañar la evolución de la economía, se prevé que este año repunte.
PIB
Según los recientes datos publicados por el Banco Central del Uruguay (BCU), el Producto Interno Bruto (PIB) en 2023 aumentó 0,4%, luego de crecer 4,7% el año anterior.
Según el informe de Cuentas Nacionales que elabora el BCU, el desempeño de 2023 es producto del aumento en los sectores relacionados con el turismo que ingresó al país en la temporada de verano, la tercera planta de celulosa y la mejoría en los rendimientos agrícolas de la zafra 2023/2023 luego de la sequía. Estos acontecimientos positivos fueron parcialmente contrarrestados por la baja en la generación de energía eléctrica debido a la sequía, la caída en la construcción -resultado principalmente de la finalización de las obras relacionadas con la nueva planta de celulosa-, y el cierre de la refinería de Ancap por tareas de mantenimiento en el tercer trimestre del año pasado.
Como se menciona habitualmente, la variable del PIB tiene dos caras para analizar su comportamiento. Si se analiza desde el punto de vista de la demanda, el incremento de 2023 se explica por el incremento de la demanda interna, empujado por el consumo privado. La externa disminuyó en este periodo, donde se observó una caída en la demanda externa neta.
El otro punto de lectura es desde el enfoque de la producción. El año pasado se destaca el incremento de las ramas de actividad Agropecuario, Pesca y Minería y Comercio, Alojamiento y Suministro de comidas y bebidas. En la vereda de enfrente, los sectores que se comportaron de manera contractiva el año pasado fueron la Construcción y la Industria Manufactura.
En el último tramo del año la economía registró un repunte. En el cuatro trimestre de 2023 el PIB aumentó 2% respecto al mismo trimestre del año anterior, luego de caer 0,2% en el tercer trimestre para misma medición.
Si se toma la serie desestacionalizada, el nivel de actividad para el periodo octubre-diciembre se incrementó 0,4% respecto al trimestre inmediatamente anterior.
Variación trimestral del PIB de Uruguay, trimestre contra trimestre inmediatamente anterior
Fuente: Elaboración propia en base a datos de BCU.
Proyecciones
El Banco Mundial, en su informe de Perspectivas económicas mundiales publicado en enero, proyectó que la economía uruguaya crezca 3,2% en 2024 y 2,6% en 2025.
Según la Encuesta de Expectativas Económicas que elabora mensualmente el BCU, en marzo de 2024 la mediana de las respuestas proyecta que el nivel de actividad del país se expanda un 3,3% este año y un 2,5% el próximo.
En línea con lo que organismos internacionales y analistas locales prevén para este año, el equipo económico estima que el crecimiento del PIB se ubique en 3,5%.
Variación del PIB de Uruguay
Nota: (E) Datos estimados
Fuente: Elaboración propia en base a datos de BCU.
Proyecciones: Encuestas de Expectativas Económicas BCU (mediana, marzo 2024)
(*) Economista, integrante del departamento de Consultoría de Carle & Andrioli, firma miembro independiente de Geneva Group International