Es propicio el Día Nacional de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) para destacar la relevancia y compromiso del 99% las industrias nacionales con el país. El esfuerzo e inversión realizado por empresarios del sector, que de forma silenciosa construyen una red de capacidades, arroja como resultado productos que llegan a los mercados y brindan empleo a 90.000 personas.
En el contexto actual quedó visible la importancia de contar con empresas nacionales que puedan reaccionar ante una emergencia, produciendo lo que se necesita para abastecer a la población y a otras empresas de diferentes cadenas de valor. Su capacidad de resiliencia quedó revelada ante la situación de pandemia que atravesó el país. Miles de empresas se adaptaron al nuevo contexto, con nuevos productos, novedosas propuestas comerciales y aplicación de protocolos que permitieron continuar produciendo.
Las mipymes industriales son pieza fundamental de la economía nacional. Un total de 16.902 empresas trabajan día a día, generando 88.970 puestos de trabajo para el país. En el día a día, sus ganas de superación y mejora de competitividad se ven reflejadas en la inversión que realizan para innovar y ampliar sus mercados.
Inversión y compromiso empresarial
La realización de inversiones en nuevas plantas de producción, en tecnología y en conocimiento permite aumentar la capacidad de producción nacional, mejorar los procesos productivos y desarrollar líneas de productos.
La empresa PR Ltda. (La Trigueña) fabrica productos panificados, dando empleo a 65 personas. Sus desafíos se mantienen vigente con el tiempo. En palabras de su director, Diego Pereira, los mismos son: “Crecer, innovar y ser competitivos. Innovar nos impulsa a avanzar en nuevos proyectos para seguir creciendo”. Bajo esa filosofía empresarial, en 2016 decidieron invertir en una nueva planta industrial, la cual empezó a construirse en 2019 y está culminando la obra en el presente año. “Asesorándonos, viendo el crecimiento que teníamos, decidimos empezar con el nuevo proyecto de planta, sino no avanzábamos”.
Pedro Merla S.A. es una empresa familiar del sector plástico. Tiene 62 años de historia y actualmente emplea a 54 personas. En 2020 adquirieron maquinaria que les permite fabricar productos que antes tenían que importar. Según su directora, Alina Merla, la incorporación de tecnología les permitió fabricar en el país y además exportar sus productos.
Ulbrika Uruguay S.A. es una empresa familiar con 60 años de historia, ubicada en Maldonado, que fabrica pinturas. Hace unos años presentaron un proyecto al instrumento Fondo Industrial del Ministerio de Industrias que les posibilitó actualizar el sistema de extracción de polvo, propio del proceso de elaboración de pinturas. Además, pudieron modernizar los procesos de trabajo, formar al personal e incluir automatismos en la planta, comprando maquinaria de fabricación nacional a empresas locales, lo cual llevó a mejores condiciones de trabajo y a una mayor capacidad productiva. Su director, Carlos Sader, afirma: “Siempre estamos desarrollando cosas nuevas, siempre hay que tener novedades para nuestros clientes”.
Artobe S.A. es un laboratorio dedicado a la fabricación de productos cosméticos y de tocador. Alejandro Gold, director de la empresa, destaca la necesidad de innovar, de hacer productos nuevos. Al respecto, señala: “Es un desafío permanente llegar al mercado con productos muy buenos, que sean reconocidos en un mercado con jugadores tan poderosos”. Durante los últimos 10 años hemos crecido, mejorado nuestros productos y hecho productos innovadores”.
La empresa Tecnobalizas S.R.L. nació en el 2015 y emplea actualmente a cinco personas. Se dedica a la fabricación de productos de señalización transitoria de obras viales, de infraestructura e industriales. Su mayor desafío es continuar creciendo. Para ello, se plantean como opciones pasar a otras áreas vinculadas a su rubro, apalancando su conocimiento y experiencia y explorar nuevos mercados. Para Fabián Arocena, director de la empresa, “ha sido un logro pasar de una idea a un producto innovador, competitivo y estandarizado”.
Apoyos de CIU a las mipymes industriales
La CIU cuenta con una cartera de 37 servicios de apoyo a empresas, los cuales se agrupan y coordinan de acuerdo a los múltiples aspectos referentes a la gestión empresarial: internacionalización, innovación, gestión ambiental y capacitación de los recursos humanos. Además, cuenta con servicios que apalancan el crecimiento de los nuevos emprendimientos del sector industrial.
Sus acciones llegan a más de 1.000 mipymes por año y permiten que el sector potencie sus capacidades, accediendo a conocimiento y financiamiento diseñado de acuerdo a la realidad de las empresas nacionales.
Laboratorio Artobe S.A. elaboró su Plan de Transformación Digital gracias al apoyo del proyecto Impulsa Industria de CIU. Su director señaló: “Hay una cantidad de actividades de CIU que ayudan mucho a las empresas y hay que aprovecharlas. A nosotros nos han ayudado muchísimo a crecer”.
De forma complementaria, la empresa Tecnobalizas S.R.L. participó en la Aceleradora de Empresas Industriales, donde recibió asistencia técnica para mejorar su proceso productivo. En este sentido, Arocena destacó: “La CIU nos puso en contacto con expertos en materiales, lo cual hizo que nuestra curva de aprendizaje se empinara muchísimo”.
Las puertas de CIU están abiertas para todas las empresas industriales. La opinión de Carlos Sader, director de Ulbrika Uruguay S.A., refleja el compromiso de la institución referente de la industria nacional: “Invito a los socios de la Cámara a acercarse, que consulten, que pregunten. La gente que está al frente de los programas es genial, abierta y con muchas ganas de trabajar. Cuando vas con una idea, seguro vas a encontrar un programa que te ayude a desarrollarlo. A los que no son socios los animo a que se unan al fogón. Solo hay que tener curiosidad e ideas, allí vas a encontrar los apoyos para empezar a crecer”.
