En un editorial que lleva como título “El peligro de la mentira”, el presidente de Casmu, Dr. Raúl Rodríguez, cuestionó severamente el comportamiento del consejero de la institución, Álvaro Niggemeyer, quien ha incumplido con los estatutos de la institución y ahora lidera una campaña pública que impulsa una intervención de la entidad.
“Este señor consejero ha afirmado además en los medios, en forma temeraria que Casmu es “igual a Casa de Galicia” y que por lo tanto deberíamos ser intervenidos. Como todas sabemos, este hecho generaría daños irreparables sobre nuestros médicos, funcionarios y usuarios”, dijo Rodríguez, quien sostuvo que Niggemeyer ha recibido “toda la información económica, administrativa y asistencial solicitada” pese a haberse negado, en un hecho sin precedentes, a firmar las confidencialidades del caso.
“En claro incumplimiento de su función de consejero (Niggemeyer), se niega desde el primer día que asumió a firmar los cheques, las transferencias y demás documentos obligacionales, omitiendo intencionalmente ejercer su obligatorio control y escapando irresponsablemente a su responsabilidad de consejero de mantener la empresa en marcha. Cómo es de usanza en toda institución, los miembros del Consejo Directivo de Casmu realizamos al asumir una declaración de nuestros bienes, que entregamos en sobre cerrado y que queda en custodia del notario de la Institución. A su vez, por ser una empresa privada, se firma un convenio de confidencialidad para proteger a la institución. Por primera vez en la historia de Casmu este señor consejero se negó, desde el primer día, a firmar ese convenio”, detalló Rodríguez.
El presidente de Casmu se preguntó “qué busca este señor consejero”. “¿Por qué alguien que debería defender a Casmu impulsa una intervención de la institución? Dice que hay sueldos descomunales, y sin embargo el mayor sueldo de Casmu es precisamente el de este señor consejero (superando a cirujanos, gerentes, anestesistas y cualquier otra especialidad). ¿Por qué no dice este señor consejero que el balance de Casmu, la institución a la que debería defender, ha sido positivo en 2023 y por tercer año consecutivo? ¿Por qué tanto empeño porque se intervenga Casmu, y no alguna de siete instituciones que presentan balances negativos? ¿Hay algún directivo de esas instituciones con balance negativo que ataque a la entidad donde trabaja?”, se preguntó.
Rodríguez indicó que las instituciones médicas de Montevideo perdieron 11.000 socios Fonasa, la mayoría a manos de ASSE. De ese número, una mutualista chica perdió 5.068 afiliados. ¿Alguno de sus directivos salió a pedir la intervención? ¿Y entonces? ¿Cómo se entiende que un señor consejero de Casmu, que debería defender a la institución que integra y celebrar tres años de balances positivos, recorra los medios pidiendo la intervención de Casmu? ¿Qué hay detrás de este repentino e insistente pedido de que Casmu sea intervenido? ¿Quién o quiénes están detrás? ¿Qué lleva a este señor consejero a pedir, en democracia, que se intervenga al Casmu, cuando la institución sólo fue intervenida durante los años oscuros de la dictadura militar?”, inquirió Rodríguez, quien afirmó que “Casmu es de sus socios. De los médicos. De los funcionarios. Y quienes hemos sido elegidos para llevar adelante la institución y ponerla de pie, no vamos a permitir que nada ni nadie ponga en riesgo todo lo conseguido con el trabajo de todos”.