“Con un bajo perfil político”, la última Cumbre del Mercosur evidenció el cambio de la política exterior del bloque, apuntando a negociar acuerdos comerciales con otros países y regiones. De todas formas, se advierte que “al bloque le urge mostrar algún éxito concreto en política internacional”.
Así surge del último informe elaborado por el Departamento de Negocios Internacionales e Integración, de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Católica sobre los resultados de la Cumbre del Mercosur, celebrada en diciembre en la ciudad de Brasilia.
El documento destaca que la misma “se desarrolló con un bajo perfil político y con algunos avances puntuales”, y en particular, estuvo marcada “por la imposibilidad de anunciar el cierre de las negociaciones con la Unión Europea, tras el traspié de las reuniones de Buenos Aires en el marco de la Conferencia Ministerial de la OMC”.
En lo que refiere a la agenda interna, se destacó la aprobación del Protocolo de Contrataciones Públicas, el que aún debe ser incorporado por los países miembros. “Se trata de un avance que se suma al registrado en la Cumbre de Mendoza con la aprobación del Protocolo de Cooperación y Facilitación de Inversiones Intra-Mercosur”, destaca el informe.
“La Cumbre de Presidentes del Mercosur se desarrolló con un bajo perfil político y con algunos avances puntuales”
En otro orden, advierte que aún “sigue pendiente” el tratamiento de los asuntos vinculados al perfeccionamiento de la zona de libre comercio y la unión aduanera. “Prácticamente no hay decisiones que traten sobre dichos aspectos más allá de la referida a la conformación de una lista excepcional común para la importación de bienes de informática y telecomunicaciones no producidos en el Mercosur”, sostiene.
El aumento de la tasa consular definido por Uruguay, “generó debate y un reclamo específico por parte de la Presidencia Pro Tempore del Mercosur a cargo de Brasil”. En ese sentido, se recuerda que la decisión del gobierno uruguayo constituye “una violación al Tratado de Asunción que puede ser reclamada por los socios activando el Sistema de Solución de Controversias”.
Agenda exterior
En cuanto a la política exterior, si bien los resultados aún son parciales, el informe destaca el cambio en la agenda externa del Mercosur durante sus dos últimas presidencias, promoviendo acuerdos comerciales con Canadá, la Asociación Europea de Libra Comercio (EFTA), la Alianza del Pacífico y la continuidad de las negociaciones con la Unión Europea. Asimismo, destaca el acercamiento del bloque con la ASEAN en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas y las misiones de Singapur a la región.
De todas formas, se advierte que “al bloque le urge mostrar algún éxito concreto en política internacional, independientemente del creciente número de contactos y de las negociaciones en curso”. En ese sentido, el informe sostiene que el cierre de las negociaciones con la Unión Europea, debería impactar positivamente para dinamizar definitivamente la agenda externa del bloque.
Por último, se recuerda que el pasado primero de setiembre de 2017 entró en vigencia el acuerdo Mercosur-Egipto, firmado en 2010. No obstante, se entiende que “las mejoras en las condiciones de acceso para Uruguay en este mercado son poco significativas si se consideran las corrientes actuales de comercio”. Por ese motivo, el documento cree relevante “desplegar un apoyo por parte del gobierno a la promoción comercial para identificar nuevas oportunidades de negocio en este mercado”.
