Aunque en la segunda mitad del año la economía mostraría un mejor desempeño que en la primera, el Cinve corrigió a la baja sus proyecciones de crecimiento para este año y el próximo, y advierte por “altos niveles de incertidumbre”. A nivel interno, menciona el impacto de la sequía, el cierre de la refinería y el ritmo de incremento de la producción de UPM 2, y en el plano externo se destacan las inciertas perspectivas de crecimiento de Brasil y Argentina, el diferencial cambiario, la evolución de los precios internacionales y la desaceleración de China.
Luego de la caída de la actividad económica que se registró en el primer semestre, el Centro de Investigaciones Económicas (Cinve) espera para la segunda mitad del año una recuperación del crecimiento.
Así surge del informe elaborado tras la publicación de los datos oficiales del segundo trimestre, donde se entiende que hay “novedades relevantes para el análisis de la coyuntura de la economía uruguaya”. Por un lado, se destaca que el BCU revisó al alza el dato correspondiente al primer trimestre, debido a ajustes en sectores como industria, energía eléctrica, gas y agua, y comercio, alojamiento y suministro de comidas y bebidas. Ello permitió compensar la revisión a la baja de los guarismos inicialmente estimados para el sector agropecuario.
Respecto al segundo trimestre, a nivel sectorial, destaca la fuerte contracción del sector agropecuario, que tuvo una caída interanual de 27%, que “es comparable a la contracción registrada por el sector en el cuarto trimestre de 2017 que recogió el fuerte efecto en la producción del sector de la sequía ocurrida en ese año”. “La nueva información publicada por el BCU indica, por otra parte, que el impacto de la sequía se habría extendido en el tiempo, afectando también al desempeño del sector en el transcurso del segundo trimestre del presente año”, destaca el Cinve.
Ajuste en las proyecciones
El crecimiento esperado por el Cinve para 2023 se ubica en el entorno del 0,6%, mientras que para 2024 el PIB se expandiría un 3%, lo que en ambos casos representa una revisión a la baja equivalente a aproximadamente 0,4 puntos porcentuales.
Según se explica, este ajuste se fundamenta, además de los efectos de la sequía y del impacto positivo de la producción de la nueva planta de UPM, en el impacto negativo que está teniendo, y que previsiblemente tendrá durante los próximos trimestres, el significativo desalineamiento de precios relativos respecto a Argentina, y en los efectos que tendrá la interrupción de la actividad de la refinería de La Teja, que estaría impactando sobre los datos del cuarto trimestre del presente año y, al menos parcialmente, sobre el nivel de actividad del primer trimestre de 2024.
De acuerdo al informe del Cinve, en los siguientes dos trimestres los shocks que han estado jugando un papel determinante en la trayectoria de la actividad en la primera parte del año, modifican su influencia. En particular, señala que el impacto negativo de la sequía, que ya ha comenzado a diluirse, dejará de manifestarse. Por otro lado, el impacto del incremento de la producción de celulosa no tendrá influencia en 2024 en las variaciones desestacionalizadas del PIB. La parada de la actividad de la refinería todavía tiene una duración incierta, seguramente habrá dejado de tener importancia cuantitativa en el segundo trimestre de 2024.
En el plano externo se advierte respecto a las inciertas perspectivas de crecimiento en Brasil y en Argentina y la evolución que podrían tener los precios relativos respecto a Argentina, una vez que asuma funciones el próximo gobierno. En cuanto a los factores extrarregionales, existe incertidumbre sobre el comportamiento que pueden tener los precios de los commodities y los efectos que podría tener la consolidación de un menor crecimiento en China.