La normalización parcial de la actividad turística, sumado al empuje de la demanda externa y de algunos grandes proyectos de inversión, hicieron que la economía uruguaya creciera un 8,3% en el primer trimestre del año, en términos interanuales. Desde el enfoque del gasto, se destacó el aumento de la demanda interna por mayor consumo e inversión, y de la demanda externa.
El Producto Interior Bruto (PIB) de Uruguay registró un crecimiento de 8,3% en el primer trimestre del año en comparación con igual período de 2021, de acuerdo al informe de Cuentas Nacionales dado a conocer esta tarde por el Banco Central del Uruguay (BCU). El fuerte crecimiento interanual, refleja la “recuperación de la actividad económica apuntalada en la normalización parcial de la actividad turística, la demanda externa y algunos grandes proyectos de inversión”.
Por su parte, medido en términos desestacionalizados el PIB registró un crecimiento de 0,6% respecto al último trimestre de 2021.
Al analizar por sectores, se observó que la mayoría registraron crecimiento de su actividad, destacándose por su incidencia positiva “Salud, Educación, Actividades Inmobiliarias y Otros Servicios”.
Desde el enfoque de la demanda, se constató un incremento tanto de la demanda interna, como de la externa. En el primer caso, creció tanto el Gasto de Consumo Final como de la Formación Bruta de Capital (inversión). En el caso de la demanda externa, se destacó el crecimiento de 23,5% registrado por las Exportaciones, mientras que las Importaciones (que inciden a la baja en el PIB) tuvieron un incremento de 16,6%. De esta forma, se verificó un aumento de la demanda externa neta en términos de volumen físico.