En 2020 la actividad económica de Uruguay se contraerá un 3,1%, con bajas a lo largo del año y una recuperación en el último trimestre, según estimó BBVA Research, el área de análisis económico de la entidad financiera. Asimismo, estimaron que el déficit fiscal aumentará hasta alcanzar el 7,5% del PIB este año.
El economista jefe de BBVA Research para Argentina y Uruguay, Marcos Dal Bianco, presentó los resultados del informe “Situación Uruguay primer semestre 2020”. Junto con los economistas Adriana Haring y Juan Manuel Manías, analizaron la situación del país en los primeros tres meses del año, y a la vez hicieron hincapié en la pandemia del Covid-19 que tomó al mundo por sorpresa.
Asimismo, también proyectaron sobre qué se puede esperar para lo que resta del año en materia económica.
De esta manera, la pandemia ha generado una aguda contracción de la demanda por parte de los principales socios comerciales de Uruguay, observaron los expertos en la disertación. Si a esto se le suma la caída de la demanda interna y de la inversión, habrá una “fuerte recesión” en el país durante 2020.
Según proyectó Haring, en el primer trimestre el PIB cayó 2,7%; en el segundo, se desplomará en un 10,9%; en el tercero mejorará la situación, pero mantendrá una caída de 2,4%; y recién en el último trimestre se apreciará una recuperación, con un crecimiento de 3,7%. Así, el estimado para el cierre del año es de una caída promedio de 3,1% de la actividad económica, seguida de un rebote en 2021, con un crecimiento de 3,3%.
En detalle
Al hacer un análisis por áreas, los economistas indicaron que en los primeros tres meses de 2020 las exportaciones cayeron un 14% en comparación con el mismo período de 2019. A su vez, los tres principales productos de venta al exterior -carne, celulosa y soja- mostraron caídas de 18,5% para el mismo período.
En esta línea, se proyectó que, fin de año, las exportaciones habrán caído un 11% en comparación con el año previo. En contraste, las importaciones decrecerán un 5% “pese al repunte que mostrarán en el segundo semestre”.
Por otro lado, el cierre de fronteras afectó el turismo, lo que causó que disminuyera un 13% anual el ingreso de divisas durante el período enero-marzo. Este será uno de los sectores más afectados por la pandemia, evaluaron.
En este sentido, según comentó Haring, “el Covid-19 irrumpió en Uruguay en momentos en que todavía teníamos fundamentos débiles en materia de actividad y de empleo”. Al país, que “está como queriendo salir” de esta situación, “justo le vino el pie del gigante encima”, dijo.
Al respecto, el cierre transitorio de comercios e industrias y la consiguiente reducción de los ingresos hará que el consumo en el país caiga alrededor del 3% este año. La inversión, en tanto, mostrará un retroceso de 3,8%, “aunque no será tan fuerte gracias a la construcción de la planta de celulosa UPM 2 y del Ferrocarril Central”, sostuvieron los expertos.
Otros datos
Debido a todo el parate económico, la tasa de desempleo finalizará el año con un 11,6%, según estimaron. La inflación alcanzaría un 9,7%, el registro más alto desde 2003.
Sin embargo, uno de los principales problemas de Uruguay es el elevado déficit fiscal al que se llegó en los últimos años. En 2019, el rojo de las cuentas públicas se ubicó en 3,9% del PIB pero llegó al 4,7% si se excluye el efecto de los ingresos por la Ley de “cincuentones”.
BBVA Research esperaba -previo al brote del virus y las medidas de confinamiento- que en 2020 hubiese un déficit fiscal de 3,9%, bajando levemente a 3,4% para 2021. Sin embargo, luego del ajuste por la pandemia, el déficit alcanzaría un 6,6% del PIB este año y 5,3% el próximo. Esos porcentajes, sin embargo, no incluyen el efecto cincuentones. Sin considerar estos aportes excepcionales, el déficit fiscal llegaría a 7,5% del producto.
El panorama global
Los analistas del BBVA también realizaron una evaluación general del panorama global y cómo las economías se vieron afectadas por la pandemia.
De acuerdo a sus estimaciones, la actividad económica mundial se contraerá este año un 2,4%, cuando antes proyectaban que aumentaría en un 3,2%. Sin embargo, se recuperará el año próximo, con un rebote de 4,8%.
En cuanto a las principales economías, el equipo de BBVA Research proyectó una caída de 4,4% para Estados Unidos, y una recuperación de 3,4% en 2021. Europa, a su vez, se verá más azotada aún, con una contracción de 5,2%, aunque el repunte será de 4,1%.
Mientras tanto, China verá una baja de 2,4% en su actividad este año, y un crecimiento de 4,8% en 2021.
Por otro lado, evaluaron que si bien se muestran tensiones financieras “agudas y generalizadas”, no alcanzan los niveles observados durante la crisis bancaria de 2008-2009.
