La economía uruguaya creció un leve 0,2% en 2019 respecto al año anterior, según la información oficial publicada por el BCU. El crecimiento registrado en Transporte, almacenamiento y comunicaciones y Suministro de electricidad, gas y agua, compensaron las caídas registradas por Comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles, y de las Actividades Primarias. Desde el enfoque del gasto, la menor demanda interna fue compensada por una menor demanda externa.
El Banco Central del Uruguay (BCU) publicó ayer jueves el informe de Cuentas Nacionales correspondiente al último trimestre de 2019, que determinó un leve crecimiento interanual de 0,2%, pero una caída de 0,6% medida en términos desestacionalizados contra el trimestre anterior. Con el dato del último cuarto del año, se constata que el Producto Interior Bruto (PIB) de Uruguay cerró el año pasado con un tenue crecimiento de 0,2% respecto a 2018.
De esta forma, la economía local se mantiene prácticamente estancada y el inicio de año estará marcado por una fuerte contracción de la actividad, según evaluaron economistas consultados por CRÓNICAS (ver nota página 13).
Al analizar la evolución de la economía local desde el enfoque de la producción, en 2019 se destacó el desempeño positivo de los sectores Transporte, almacenamiento y comunicaciones -como resultado del crecimiento en las telecomunicaciones- y de Suministro de electricidad, gas y agua -explicado por la mayor generación de energía eléctrica para exportación-. Estos aumentos fueron parcialmente contrarrestados por las caídas en Comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles, Actividades Primarias, Construcción e Industrias Manufactureras. En el primer caso, se destaca principalmente la caída en la comercialización de bienes nacionales, y en menor medida de bienes importados, así como la caída de los servicios de restaurantes y hoteles por la menor demanda de turistas. En Actividades Primarias, el desempeño negativo del sector se explica por la disminución en la faena en frigoríficos y de las exportaciones de ganado en pie.
Cae demanda interna
En cuanto a los componentes del gasto final, dicho resultado se explica por una leve caída de la demanda interna que fue más que compensada por una mejora de la demanda externa neta respecto a 2018. El Gasto de consumo final presentó un incremento de 0,5%, mientras que la Formación bruta de capital en 2019 fue 2,9% inferior a la del año anterior, debido a una menor acumulación de stocks. Por su parte, la Formación bruta de capital fijo aumentó 1,4% respecto a 2018. Atendiendo al sector inversor, este comportamiento respondió a un aumento de la inversión privada debido, principalmente, a una suba en la inversión en Maquinaria y equipo.
Por su parte, las Exportaciones de bienes y servicios presentaron un incremento de 1,2% y las Importaciones de bienes y servicios crecieron 0,2%. Esto determinó que el volumen del saldo comercial con el exterior resultara menos negativo que el del año anterior en términos de volumen físico.
Si se observa la participación de las actividades económicas en el PIB del año 2019, se destaca el incremento en la participación del sector Actividades primarias (6,3%) y Otras actividades (38,7%) y la reducción de los sectores Construcción (9,7%) y Suministro de electricidad, gas y agua (2,3%).
La mayor participación de Actividades primarias se debió al aumento de precios de sus productos, que fueron superiores a los de la media de la economía, en tanto que el resultado del agregado Otras actividades se explica por el incremento en volumen físico por encima del promedio de la economía.