Expectativas de inflación siguen marcando bajas, pero “nos cuesta romper el 6%”

BCU mantuvo la Tasa de Política Monetaria en 8,5%

Foto: www.bcu.gub.uy

El presidente del BCU, Diego Labat, destacó que la inflación está “donde queremos”, y permanece desde hace trece meses dentro del rango objetivo. Si bien se estima un aumento de la inflación, que llegaría en agosto al techo del rango, se sigue manteniendo la proyección de 5% para el cierre del año. En materia de expectativas, si bien siguen evolucionando a la baja, advirtió que “nos cuesta romper el 6%”.

El pasado martes se reunió el Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central (BCU), instancia en la que se resolvió dejar sin cambios la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 8,5%, para “consolidar la baja sostenida de la inflación y sus expectativas en el objetivo de 4,5% en el Horizonte de Política Monetaria”.

Al día siguiente del cónclave, el presidente del BCU, Diego Labat, acompañado de otras autoridades, mantuvieron un encuentro con periodistas especializados del que participó CRÓNICAS, donde se buscó explicar la coyuntura actual que llevó a tomar la decisión de mantener la tasa.

Explicó que el contexto económico evolucionó “sin grandes novedades”, y con la inflación que “está donde queremos estar”. Resaltó que el mes pasado se cumplieron 13 meses dentro del rango objetivo, lo que implica el periodo más largo cumpliendo con la meta.

El jerarca fundamentó que lo importante para esta administración “es mirar la línea roja” (en referencia al centro del rango objetivo dibujado en un gráfico) y agregó que “la diferencia” respecto al pasado es que ahora la política monetaria “reacciona” sobre el centro de la meta y no cuando supera el techo del rango.

Labat se refirió a la fuerte incidencia de frutas y verduras, con un aumento de precios en conjunto de 19,4%. “No me gusta que esté alto, pero son precios volátiles y no se arregla con tasas altas”, señaló. De todas formas, mostró su preocupación respecto a “que esta división no se meta en otros precios”.

Por otra parte, destacó la caída de los precios no transables (en especial alquileres) y el hecho de que los transables se encuentran dentro del rango, pese al reciente “salto” por la evolución del dólar.

Si bien se estima que para agosto la inflación llegaría al techo del rango, se sigue manteniendo la proyección de 5% para el cierre del año. Aun así, reconoció que ello “implica un riesgo”.

En materia de expectativas, resaltó que siguen evolucionando a la baja, y en especial la de los empresarios, que son las que se muestran “más rígidas a la baja”, algo que, explicó, es normal en este tipo de sondeos. Sin embargo, advirtió que le sigue preocupando al BCU que las expectativas no bajan del 6%. “Nos cuesta romper el 6%”, comentó. De todas formas, destacó que el país pasó de expectativas “ancladas” al 8%, a un nivel dos puntos inferior.

En la presentación, también se mostró la situación de Uruguay en materia de inflación respecto a más de 150 países. En 2019 solo había 13 países con inflación más alta, mientras que, al cierre de abril, estábamos “a mitad de tabla”.

El comunicado

El comunicado del Copom destaca que en el escenario internacional, en las principales economías se mantiene la desaceleración de la actividad económica, y la inflación en EEUU muestra una mejora lenta en su trayectoria de convergencia a la meta.

Labat valoró que estamos frente a “un mundo complicado”, pero con precios de commodities estabilizados. Si bien se siguen proyectando tasas altas por más tiempo, se interpretó que los últimos datos de inflación y empleo en EEUU podrían hacer que la Fed mostrara “algún afloje” en sus próximas reuniones.

Asimismo, se advierte por un incremento de la probabilidad de estanflación en Europa (bajo crecimiento y alta inflación) y las tensiones geopolíticas.

A nivel regional, el comunicado señala que para Brasil se observan buenas perspectivas para el nivel de actividad y un incremento en las expectativas de inflación, mientras que para Argentina se observa una desaceleración de la inflación en un marco de caída del nivel de actividad. Labat valoró que la situación de ambos países “no nos ayuda demasiado”, en especial la de Argentina, donde la situación parece estarse complicando nuevamente.

En el plano interno, se destaca que la economía uruguaya registró un aumento desestacionalizado de 0,9% en el primer trimestre de 2024, ubicándose 0,6% por encima del nivel de un año atrás. Las proyecciones de corto plazo, que recoge el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE), sugieren que la economía continuaría su crecimiento en los dos trimestres siguientes.

A nivel interno, los mayores riesgos, aunque con probabilidad de materialización baja, son un desalineamiento de las expectativas de inflación, y el ciclo político, en particular por el plebiscito planteado para reformar la seguridad social.