La Reserva Federal (Fed) estadounidense, analiza la posibilidad de modificar las pruebas con las que evalúa si los bancos del país pueden soportar una crisis financiera, y usar los resultados de los exámenes de solvencia para determinar los requisitos de capital a los grandes prestamistas. Así lo manifestó la presidenta del organismo, Janet Yellen, en una audiencia en la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, donde indicó que el Banco Central «está considerando varios cambios a nuestra metodología y proceso de pruebas de solvencia».
«La regla actual de conservación de capital sería reemplazada por un respaldo específico y sensible al riesgo que será determinado por los resultados de las pruebas de solvencia», agregó.
En el caso de ocho bancos estadounidenses que son considerados importantes para el sistema financiero mundial –los considerados “too big to fail” (demasiado grandes para caer)-, el nuevo cálculo «representaría un aumento significativo de sus requerimientos de capital».
Yellen no se refirió a las perspectivas para la economía estadounidense ni a asuntos de política monetaria en su intervención del miércoles.
Sus declaraciones se suman a señales de posibles cambios a la supervisión de la Fed sobre el sistema bancario de Estados Unidos, luego de que republicanos en el Congreso criticaron la regulación de instituciones clave bajo las capacidades que otorgó la ley Dodd-Frank de 2010, que reformó Wall Street.
El gobernador de la Fed, Daniel Tarullo, ofreció un discurso detallado sobre las posibles reformas, y la semana pasada el Banco Central reveló sus planes de restringir las operaciones de Wall Street en el sector energético.
Yellen dijo a la Comisión que, en general, está observando que los grandes bancos regionales y nacionales están bien capitalizados y son rentables, y que la Fed está detectando un crecimiento del crédito comercial e industrial.