El nivel de precios en la economía sigue retrocediendo medido en términos anualizados y se ubicó en el año móvil cerrado a julio en 5,24%, según los datos divulgados ayer jueves por el INE. Se trata de la sexta caída consecutiva del indicador que se consolida dentro del rango objetivo fijado por el gobierno.
El Índice de Precios al Consumo (IPC) registró un crecimiento de 0,32% en el mes de julio, lo que implica cuatro décimas de punto porcentual menos que en igual mes de 2016, de acuerdo a los datos difundidos ayer jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta forma, la inflación medida a doce meses volvió a registrar un nuevo descenso, el sexto consecutivo, ubicándose en 5,24%, su valor más bajo desde diciembre de 2005 y muy cercano al centro del rango objetivo fijado por el equipo económico (entre 3% y 7%). Por su parte, en el acumulado del año la inflación registra un crecimiento de 4,66%.
Los datos del último informe contrastan fuertemente con los que se registraban un año atrás cuando la inflación acumulada en el período enero-julio alcanzaba el 7,51% mientras que el dato anualizado superaba los dos dígitos ubicándose en 10,05%.
Como era de esperar, este descenso en el nivel de aumento de precios de la economía también ha repercutido a la baja en las expectativas del mercado. Cuando comenzó el 2017, los expertos e instituciones consultados por la Encuesta de Expectativas de Inflación del Banco Central del Uruguay (BCU) esperaban que el nivel de precios cerrara el año con un encarecimiento de 8,5% según la mediana del sondeo. Asimismo, las respuestas no se distanciaban mucho entre sí y los más optimistas esperaban una inflación de 8,07% y los más pesimistas un 8,8%. Nadie era tan optimista de pensar que el IPC cerraría el 2017 dentro del rango objetivo fijado por las autoridades.
Sin embargo, el último sondeo del BCU marca una situación muy diferente. La mediana de las respuestas de la encuesta espera que la inflación cierre el año en 6,24%. Las contestaciones fueron desde un mínimo esperado de 6,2% a un máximo de 6,6%, es decir que ahora, ni el más pesimista espera que la inflación cierre por encima del rango objetivo.
En el último informe de política monetaria del BCU correspondiente al segundo trimestre del año y divulgado esta semana, se destaca que “la desaceleración fue generalizada a nivel de componentes, manteniéndose la tendencia a la baja en transables, pero sumando además a las frutas y verduras y a los bienes y servicios no transables de mercado”. Asimismo, destaca que la inflación subyacente se mantuvo estable entre marzo y junio.
No obstante, se destaca que “el incremento de precios continúa siendo bastante generalizado. En junio el índice de difusión se ubicó en 66% en tendencia-ciclo, manteniéndose en niveles inferiores a los observados un año atrás”.
Rubros
En el crecimiento del IPC durante el mes de julio, se destacó la incidencia al alza que tuvo la división “Alimentos y bebidas no alcohólicas” (la de mayor peso en el indicador) que mostró un encarecimiento de 0,43% que impactó al alza del índice en 0,11 puntos porcentuales. Este aumento se debió principalmente a las subas registradas en “Pan y cereales” (+0,94%) y “Carne” (+1,17%), que no pudieron ser compensadas por el descenso de las “Legumbres y hortalizas” (-1,53%).
Otra división que tuvo impacto alcista fue la “Salud” que registró un incremento de 0,88% incidiendo en 0,07 puntos porcentuales sobre el IPC, debido a las subas en medicamentos (+0,66%), odontólogo (+1,79%) y emergencia médica móvil (+2,81%).
En igual magnitud impactó al alza la división “Restaurantes y hoteles” que se encareció un 0,82%, debido principalmente a subas en bebidas fuera del hogar (+0,62%), comidas a base de carnes y pescado (+0,79%), comida a base de harinas (+0,87%) y otras comidas fuera del hogar (+0,85%).
Por su parte, “Recreación y cultura” tuvo un aumento de 0,96%, que incidió al alza del indicador general en 0,05 puntos porcentuales, fundamentalmente por las subas en club deportivo y gimnasio (+1,08%), TV cable (+1,47%) y excursiones (+2,62%).
También se destacó el aumento de 0,19% la división “Vivienda”, que se explica por subas en alquiler de vivienda principal (+0,51%), incidiendo al alza del IPC en 0,03 puntos porcentuales.
Del otro lado, incidieron a la baja de la inflación en julio las divisiones “Prendas de vestir y Calzado” con una caída de 0,83%, “Bienes y servicios diversos” que tuvo una baja de 0,34% y “Transporte” que descendió 0,15%, impactando a la baja del IPC en 0,04, 0,02 y 0,01 punto porcentuales respectivamente. En el caso de “Transporte el descenso se debió mayormente a las bajas en gasoil (-6,17%), por la baja decretada a partir del 24 de junio, ómnibus local (-1,48%), debido a la baja del boleto urbano en Montevideo con tarjeta STM, y pasajes de avión (-1,87%).