El sorpresivo resultado de las elecciones PASO en Argentina “disparó la incertidumbre, aumentando la volatilidad y desmejorando más las expectativas para el próximo año”, según el informe Situación Argentina, elaborado por BBVA Research, en el que se mantiene un escenario de recesión y elevada inflación para 2023 y 2024. Este año la inflación alcanzaría el 200% y comenzaría a desacelerarse en el segundo semestre de 2024, siempre que “el gobierno entrante encare un plan de estabilización relativamente exitoso”.
Las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) en Argentina dejaron un final abierto para las elecciones del 22 de octubre, lo cual “disparó la incertidumbre, aumentando la volatilidad y desmejorando más las expectativas para el próximo año”, según analiza el equipo de BBVA Research en su último informe Situación Argentina.
El candidato más votado de las PASO fue Javier Milei, que hasta entonces figuraba tercero en las encuestas. “Este sorpresivo resultado deja un escenario abierto para las elecciones del 22 de octubre, en vista de la escasa diferencia entre los tres principales candidatos y el flujo de nuevos votos que se espera dada la baja participación en las primarias”, estima el informe.
Tras la elección, y con la necesidad de frenar la caída de reservas internacionales, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) debió convalidar un salto cambiario de 22% el lunes posterior a las PASO. El gobierno anunció que mantendrá esta nueva paridad (350 pesos argentinos por dólar) hasta octubre, pero el inmediato traslado a precios ya eliminó la “ganancia” de competitividad cambiaria, por lo que BBVA espera nuevas depreciaciones desde fines de octubre, para dejar el tipo de cambio (oficial) en diciembre de 2023 en 630 pesos argentinos por cada dólar.
En este escenario, la inflación alcanzaría 200% en 2023 y permanecerá elevada en los primeros meses de 2024 ya que se esperan correcciones de tarifas y tipo de cambio desde diciembre (cuando asuma el nuevo gobierno). De acuerdo a BBVA Research, recién en el segundo semestre del año próximo se comenzaría a desacelerar la inflación, cerrando el año en 155%, aunque siempre y cuando “el gobierno entrante encare un plan de estabilización relativamente exitoso”.
Respecto a la actividad económica, se destaca que los últimos datos “fueron algo mejores a lo esperado”, pero se advierte que el salto del tipo de cambio en agosto y la aceleración de la inflación deteriorarán las condiciones económicas de la segunda mitad del 2023. En ese sentido, BBVA Research mantuvo la previsión de caída de 3,5% del PIB para 2023 y profundizó a 2,5% la contracción prevista para 2024.
Una buena noticia para la economía argentina es la mejora de las perspectivas para las cuentas externas en 2024, por la recuperación de las exportaciones agrícolas y el buen desempeño esperado del sector energético. “Con ello, sumado a la prevista depreciación real del peso, se revertirá el déficit comercial de 2023 y se reducirá sensiblemente el déficit de la cuenta corriente, ayudando a estabilizar el mercado cambiario”, concluye el informe.