Luego de un año de estar ubicada dentro del rango objetivo fijado por las autoridades, la inflación volvió a superar su techo el mes pasado y cerró en 7,07%. Los precios más volátiles y las tarifas administradas fueron las de mayor incidencia al alza.
El nivel de precios en la economía continúa con la tendencia alcista que ha mostrado en los últimos siete meses, luego de haber alcanzado en julio su valor mínimo en una década. En febrero, el Índice de Precios al Consumo (IPC) aumentó un 0,88% respecto al mes anterior, acumulando en el primer bimestre del año una suba de 3,62%, y llevando el dato anualizado a 7,07%, lo que coloca al indicador por encima del rango objetivo fijado por el equipo económico (de entre 3% y 7%) por primera vez desde febrero del año pasado.
De acuerdo al análisis que realiza mensualmente el Centro de Investigaciones Económicas (Cinve) sobre los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se observa que la inflación tendencial o subyacente (que excluye la evolución de los precios más volátiles y administrados, por lo que brinda un dato más estable del comportamiento de los precios) se ubicó en febrero en 0,94% en términos mensuales, ubicándose así en 6,48% en términos interanuales. Por su parte, la inflación residual (que mide esos componentes excluidos de la inflación subyacente) fue más alta de lo esperado, principalmente debido a un incremento no esperado en los precios de los combustibles.
“No se anticipan grandes correcciones en las proyecciones para la evolución de los precios, puesto que la inflación tendencial se encontró alineada a lo previsto y no se esperan grandes cambios para las principales variables de interés” | Cinve
En otro orden, destaca que el aumento de precios fue mayor entre los bienes y servicios no transables (que no se comercializan con el exterior) que aumentaron un 1,08%. Los precios transables (que si se intercambian con el exterior) aumentaron 0,69%.
Si bien el Cinve sostiene que la inflación de febrero estuvo por encima de su proyección puntual, el informe sostiene que “no se esperan modificaciones de importancia en las proyecciones”. “No se anticipan grandes correcciones en las proyecciones para la evolución de los precios, puesto que la inflación tendencial se encontró alineada a lo previsto y no se esperan grandes cambios para las principales variables de interés”, concluye.
Rubros varios
Al analizar el informe del Cinve según los rubros que componen el IPC, se observa que la división “Educación” fue la que tuvo mayor aumento en el mes, mientras que la división “Alimentos y bebidas no alcohólicas” fue la que más incidencia al alza tuvo en el indicador general.
La “Educación” registró un encarecimiento de 4,43% que incidió en 0,17 puntos porcentuales al alza del IPC, lo que se explica según el informe, en las subas en enseñanza preescolar (+6,16%), primaria (+5,79%), secundaria (+5,14%), idiomas (+4,40%), otros cursos (+3,18%) y clases particulares (+3,15%).
El rubro “Alimentos y bebidas no alcohólicas” aumentó un 0,66% en el mes, pero dado el fuerte peso que tiene dentro del indicador, hizo que subiera 0,18 puntos porcentuales. Ello se debió principalmente al aumento de las “legumbres y hortalizas” (+3,86%) que no alcanzaron a ser compensadas por la baja de “Frutas” (-3,56%).
Otros rubros de importante aumento fue la “Vivienda” cuyos precios aumentaron 1,02%, lo que incidió en 0,15 puntos porcentuales en el IPC, y “Muebles, artículos y productos para el hogar” que aumentó 1,88% en febrero e impactó en 0,11 puntos porcentuales al alza del IPC. En el primer caso, la suba de precios se dio por los incrementos en el alquiler de vivienda principal (+0,44%) y supergás (+15,08%), debido al aumento de tarifas vigente desde el 1 de febrero de 2018. Por su parte, en “Muebles, artículos y productos para el hogar” el aumento se debió fundamentalmente a la suba en servicio doméstico (+4,15%).
