El Centro de Estudios de la Realidad Económica (Ceres), tras el análisis de una gran base de datos, concluyó en que el Índice Líder, que funciona como anticipador de tendencia del PBI, dio una suba de 0,5% en setiembre. Esto indica que la economía uruguaya se encuentra en un período alcista desde el mes de abril.
Uruguay, como gran parte del mundo, en el último año sufrió diversas fluctuaciones a nivel económico, derivadas del contexto de pandemia.
Esto se vio reflejado en este índice, que se encarga de anticipar la tendencia en la actividad económica, y que ha sido eficiente en la tarea de detectar cómo se comportará el ciclo económico.
Entre noviembre de 2019 y junio de 2020 el Índice Líder Ceres (ICL) cayó ocho meses seguidos. Luego, desde junio a octubre, registró cuatro meses positivos, para luego volver a caer en noviembre. En los siguientes meses osciló, pero finalmente desde abril de este año el ICL se mantuvo estable en cifras positivas. A día de hoy, se cumple un semestre entero de tasas que manifiestan reactivación.
Esto da cuenta de una recuperación firme, lo que se explica, principalmente, por los efectos de la vacunación en la población, que trajo consigo la disminución de los casos de covid-19 a nivel nacional y que ha permitido que se retomen ciertas actividades.
A su vez, todo parece indicar que el consumo interno se recupera de manera heterogénea.
De todos modos, la suba no es suficiente como para volver a las cifras de prepandemia, pero demuestra que la economía uruguaya se va reactivando en diferentes áreas.
El informe del Ceres incorpora variables de diversos sectores, como el agropecuario, industrial, construcción, comercio y servicios, energía, telecomunicaciones, financiero, entre otros, y la recuperación de estas ramas puede verse a través del Índice de Difusión, indicador complementario al ILC, que se encarga de medir la amplitud de la base de sustento de su movimiento mensual. Esto, al considerar la proporción de las variables del ILC con tasas positivas en cada mes.
El Índice de Difusión de setiembre fue 70%, lo que demuestra que la mayoría de las variables que componen el ILC dieron tasas positivas en el mes.
Hay que recordar que el indicador del Ceres no permite realizar proyecciones cuantitativas sobre los niveles de la actividad económica, sino que su fin es dar señales sobre el signo de la evolución de la actividad económica general.
Para realizar comparativas entre el período julio-setiembre con respecto a abril-junio habrá que esperar al registro oficial de Cuentas Nacionales, que será expedido a mediados de diciembre
