La Reserva Federal (Fed) estadounidense mantuvo las tasas de interés en el rango de 5,25%-5,5% por sexta reunión consecutiva, advirtiendo por “la falta de progresos” para volver a situar la inflación en el objetivo del 2%. “Necesitamos gran confianza en que la inflación va hacia un sostenido 2% y hasta entonces será apropiada esta política”, aseguró el presidente de la Fed, Jerome Powell.
Tras una fuerte caída registrada durante buena parte del 2023, la inflación entró en una meseta, evidenciando las dificultades para recorrer esos últimos metros en el camino de llevar el nivel general de precios de la economía al objetivo del 2%. Esta situación ha despertado preocupación y dudas respecto al rumbo de la política monetaria de la Fed, que mantiene el “precio del dinero” en sus máximos en 23 años desde julio de 2023.
El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) señaló la “falta de progresos” para volver a situar la inflación en el objetivo del 2%, aunque se comprometió “firmemente” a cumplir con esa meta. “El Comité no espera que sea apropiado reducir el rango objetivo hasta que haya adquirido una mayor confianza en que la inflación se está moviendo de forma sostenible hacia el 2%”, señaló el comunicado de la Fed.
Este comentario resultó desalentador porque se dedujo que esa meta está más lejos ahora que hace un tiempo. A finales del 2023 se apostaba por hasta siete recortes en las tasas de interés. Ahora hay dudas y parece aceptarse que las apuestas por ese inicio de los recortes en las reuniones de junio o julio, comienzan a trasladarse para setiembre.
Paso a paso
“Vamos reunión a reunión”, afirmó el presidente de la Fed, Jerome Powell, durante la rueda de prensa posterior a la reunión del FOMC. “Necesitamos gran confianza en que la inflación va hacia un sostenido 2% y hasta entonces será apropiada esta política”, reiteró el funcionario en línea con lo señalado en el comunicado.
Consultado respecto a si la persistencia de la inflación podría llevar a un incremento de tasas, Powell aseguró que “es poco probable que el próximo movimiento de las tasas de interés sea una subida”.
Por otra parte, destacó los “considerables progresos económicos”, la fortaleza del mercado laboral y la solidez del consumo, pese a la política monetaria restrictiva. No obstante, consciente del peligro de prolongar en exceso las restricciones y también del riesgo de aligerar antes de hora, Powell remarcó que están “dispuestos a mantener las tasas altas el tiempo necesario”.
Por otra parte, el FOMC votó a favor de reducir el ritmo de reducción del gigantesco balance de la Fed, un proceso conocido como endurecimiento cuantitativo (QT, por sus siglas en inglés), en lo que podría considerarse una relajación gradual de la política monetaria de la entidad. Según explicó el banco central, a partir de junio se enlentecerá el ritmo de venta de sus tenencias de valores del Tesoro y de deuda de agencias y valores respaldados por hipotecas de agencias de 60.000 millones de dólares a 25.000 millones.