México ratificó el T-MEC: “una buena noticia” pero que “no es sorpresa”

Vigencia > Si EE.UU. no lo concreta en los próximos dos meses, puede retrasarse

El gobierno mexicano fue el primero en ratificar el nuevo acuerdo entre México, Estados Unidos y Canadá, que viene a sustituir el viejo Nafta. El experto en relaciones internacionales Ignacio Bartesaghi opinó que es “una buena noticia”, mientras que las economistas Erika Chabén y Ana Vignolo, evaluaron que “no es sorpresa” por la mayor simplicidad del proceso legislativo mexicano.

Por Ignacio Palumbo | @ignacio_palumbo

El 30 de noviembre de 2018, las naciones de América del Norte firmaron el “Nafta 2.0”, conocido ahora como el T-MEC o USMCA por sus siglas en inglés. El nuevo Tratado entre México, Estados Unidos (EE.UU.) y Canadá servirá como reemplazo al Nafta una vez sea aprobado por los gobiernos de las tres naciones.

Siete meses después, el pasado 19 de junio, México se volvió el primero de los tres países en ratificar el nuevo acuerdo.

“Es una buena noticia que México haya incorporado el acuerdo”, opinó el doctor en Relaciones Internacionales, Ignacio Bartesaghi, en diálogo con CRÓNICAS. Sin embargo, para Erika Chabén y Ana Vignolo, del Centro de Economía Grant Thornton de la Universidad de Montevideo (UM), “no es sorpresa” la rapidez de la ratificación por parte del gobierno mexicano “ya que tiene un proceso legislativo más simple para que estos acuerdos se concreten”.

A su vez, argumentaron que el hecho que México ya lo haya hecho “no necesariamente apresurará a los otros países” a que lo hagan.

En este sentido, Bartesaghi apuntó que “es razonable” que el acuerdo se cierre y entre en vigencia este año, lo cual sería “muy favorable” para el presidente estadounidense Donald Trump en su posibilidad de ser reelegido. Por otro lado, las economistas dijeron que si la ratificación del acuerdo por parte de Estados Unidos no se concreta en los próximos dos meses, “esto se retrasará para luego de las elecciones” del próximo 3 de noviembre de 2020.

Hasta que se apruebe, seguirá en vigencia el actual Nafta.

Mejor que el anterior

Chabén y Vignolo señalaron que la firma de este nuevo acuerdo tendrá “un efecto positivo” sobre el crecimiento económico de la potencia estadounidense. Bartesaghi, en tanto, añadió que significará un efecto positivo para el comercio mundial.

Esto se debe a que la relación entre los tres países del continente norteamericano es “de las más importantes del mundo”, por lo que “no es bueno” que sigan reguladas en el marco del Nafta “que es un acuerdo que no convence a EE.UU”.

Es así que la administración Trump empezó a “violar sistemáticamente” al Nafta, aplicando aranceles a sus vecinos latinoamericanos; pero en el momento que el T-MEC, un acuerdo que favorece al mandatario estadounidense, entra en vigencia, pierde el argumento de aplicar barreras arancelarias. Es decir, cuanto antes entre en vigencia el T-MEC, “menor va a ser el nivel de conflictos en el plano comercial que puede justificar Trump”, sostuvo Bartesaghi.

Las economistas, por su parte, destacaron que el llamado Nafta 2 “no tiene demasiadas diferencias” con el T-MEC, sino que son “ajustes”. “El principal problema sería ir de Nafta a ningún acuerdo”, comentaron, pero las diferencias entre ambos “no son demasiadas”, al menos para EE.UU.

A marcha lenta

¿Por qué, entonces, el T-MEC aún no ha sido aprobado por los gobiernos restantes, si es que soluciona los problemas del Nafta?

Por el lado canadiense, “podrían existir algunas reticencias” con el tratado, debido a que el país se sumó tarde a la iniciativa, según explicó Bartesaghi. “La decisión que toma (el primer ministro, Justin) Trudeau de llegar tarde al acuerdo, puede tener algunas dificultades”, detalló.

En cuanto a EE.UU, “no creo que tendrían que existir mayores restricciones”, consideró el experto, ya que “sale bien parado” del acuerdo. Chabén y Vignolo resaltaron que existen presiones de parte de los demócratas -partido opositor al actual mandatario- para retrasar la firma del tratado; a esto se le agregan también posibles eventos causantes del retraso, como el apagón del gobierno estadounidense -desde el 22 de diciembre de 2018 hasta el 25 de enero de 2019-, o el actual conflicto con Irán.

Cerrarle el paso a China

“Yo creo que el T-MEC fue una victoria para Trump también en ponerle un freno a la profundización de las relaciones de China con Canadá y México”, dijo Bartesaghi. Es “un freno” para los intereses del país en el continente.

La realidad hubiera sido otra de no haber tenido un acuerdo entre los tres países, ya que le deja “la puerta abierta” de la región al gigante asiático, analizó.

Las expertas de Grant Thornton concordaron con Bartesaghi, añadiendo que la firma del tratado “representaría una unidad más sólida frente a China y una unificación mayor”.

“A su vez, posiblemente haya un artículo que obligue a cualquier miembro a notificar al resto para poder firmar un acuerdo de libre comercio con China u otro país”, agregaron. Al respecto, Bartesaghi señaló que tanto Canadá como México “hace tiempo” que están planteando que necesitan diversificar su economía y diversificar sus exportaciones.

A pesar de ello, ambos países “ven con preocupación” la guerra comercial entre las dos potencias, finalizó.


Trump “satisfecho” con la firma del acuerdo

Mientras tanto, el investigador en ciencias políticas y relaciones internacionales, Nicolás Albertoni, dijo a CRÓNICAS que “no parece que Trump pueda tener respaldo para presionar al Congreso” a ratificar el tratado.

Para el experto, esta conclusión se debe a los movimientos que el presidente estadounidense ha tenido con su vecino del sur, amenazando en subir el arancel si no se resolvían los problemas migratorios.

En cuanto al retorno político “en sí mismo”, añadió, “él parece darse por satisfecho al haberlo firmado”, concluyó Albertoni.