La organización internacional que nuclea a las principales naciones desarrolladas y emergentes, duplicó su pronóstico de crecimiento para Estados Unidos, según sus últimas proyecciones. La fuerte corrección al alza se debe principalmente al impacto esperado sobre la actividad del plan de estímulos del presidente estadounidense Joe Biden, que también tendría impactos positivos para China, México, Canadá y Europa. También se espera un mayor crecimiento global.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) esperaba en diciembre que la economía de Estados Unidos en 2021 creciera un 3,2%. Sin embargo, en su último informe, la organización duplicó su previsión y ahora espera que la mayor economía mundial se expanda 6,5%.
La corrección en las proyecciones de la OCDE se explican en la mejora de la economía global y el buen ritmo de vacunación, pero lo espectacular del aumento se debe al optimismo que despierta el amplio programa de estímulos que está llevando a cabo el presidente Joe Biden. Se trata de un estímulo fiscal que asciende a US$ 1,9 billones, y que entre otras medidas otorgará a cada estadounidense que no supere cierto umbral de renta, un cheque de US$ 1.400.
De esta forma, Estados Unidos sería la economía desarrollada con mayor crecimiento. Además, la economía estadounidense venía de contraerse un 3,5%, cifra que, aunque significativa, fue tan solo la mitad del retroceso registrado por el conjunto de Europa (ver recuadro).
«El significativo estímulo fiscal en Estados Unidos, junto con una vacunación más rápida, podría impulsar el crecimiento de los PIB unos tres puntos más de lo que preveíamos, con un impacto sobre la demanda que será bienvenida en socios comerciales clave», explicó la OCDE en su informe.
Como el estímulo fiscal está centrado en potenciar el consumo interno, ello repercutirá positivamente en las importaciones, por lo que también podría aportar dinamismo a otros socios económicos como China, México, Canadá y Europa.
Tirá para arriba, tirá
Pero la OCDE no sólo revisó al alza sus previsiones de crecimiento para Estados Unidos, sino que lo hizo para el conjunto de la economía mundial y para la mayoría de los países. En su nuevo reporte, estima que el PIB global crecerá un 5,6% en 2021 y añadirá un 4% más en 2022, alcanzando así los niveles económicos de prepandemia más rápido de lo previsto.
La recuperación económica mundial será diferenciada y varios países demorarán más en recuperar la actividad aún después del 2022
No obstante, apuntó que la recuperación será diferenciada y varios países demorarán más en recuperar la actividad aún después del 2022. Además, indicó que las medidas de distanciamiento social aún vigentes continuarán afectando al sector de servicios en el corto plazo.
Una rápida campaña de vacunación a nivel mundial podría generar el levantamiento de las medidas de mitigación más rápido, impulsando así a un mayor consumo. Por el contrario, una vacunación más lenta de lo esperado, o una mutación del virus y su resistencia a las vacunas, podrían resultar en una recuperación más débil, una mayor pérdida de empleo y mayores empresas en quiebra.
La OCDE expone que pese al aumento en los precios de los commodities, el resurgimiento de la demanda y las disrupciones en la oferta, la inflación aún se mantiene por debajo de los objetivos de los principales bancos centrales del mundo, apoyada en parte por la capacidad ociosa de la economía.
De acuerdo a la organización, la prioridad de los gobiernos es asegurar que todos los recursos sean utilizados para hacer una campaña de vacunación eficiente y veloz en todo el mundo, y de este modo, preservar los ingresos y mitigar el efecto adverso de las medidas de contención en la economía mundial.
De igual forma, considera que el continuo apoyo al ingreso familiar y de las empresas debería proseguir hasta que se generen las condiciones de permitir regresar a la actividad económica con normalidad.
De acuerdo al reporte, India será el país de la OCDE con mayor crecimiento este año, registrando una expansión de 12,6%. Le sigue China con un crecimiento de 7,8%, Estados Unidos con 6,5%, Turquía y Francia con 5,9% en cada caso, España con 5,7% y Reino Unido con 5,1%. En cuanto a nuestros vecinos, la organización espera para 2021 un crecimiento de 4,6% para Argentina y de 3,7% para Brasil, mientras que en 2022 crecerían 2,1% y 2,7%, respectivamente.
Eurozona tuvo caída récord en 2020, pero menor a la esperada
El PIB de la zona euro registró una caída anual del 6,6% en 2020, frente al crecimiento del 1,3% de 2019, lo que, a pesar de ser la mayor contracción de toda la serie histórica, resulta dos décimas menos profunda de lo estimado anteriormente por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
En el conjunto de la Unión Europea (UE), el PIB registró en 2020 una contracción del 6,2%, en contraste con la expansión del 1,6% en 2019.
La economía de la zona euro había retrocedido 4,5% en 2009 como consecuencia de la crisis financiera mundial, mientras que la UE cayó un 4,3% ese año.
Entre octubre y diciembre, la economía de la eurozona se contrajo un 0,7%, una décima más de lo previsto, después de haber rebotado un 12,5% en el tercer trimestre, mientras que en comparación con el cuarto trimestre de 2019 retrocedió un 4,9%.
En la UE, el PIB cayó un 0,5% en el último trimestre de 2020, después de una expansión récord del 11,6% en los tres meses anteriores. En comparación con el mismo periodo del año 2019, la economía se contrajo un 4,6%.
Entre los países de la UE, Rumanía (+4,8%) y Malta (+3,8%) registraron los mayores incrementos trimestrales del PIB entre octubre y diciembre de 2020, por delante de Croacia y Grecia (ambos +2,7%), mientras que las caídas más pronunciadas se observaron en Irlanda (-5,1%) y Austria (-2,7%), seguidos de Italia (-1,9%) y Francia (-1,4%).
En comparación con el cuarto trimestre de 2019, la mejor evolución de la economía correspondió a Irlanda, con una caída del 0,2%, seguida de Lituania y Finlandia, con contracciones del 1% y del 1,4%, respectivamente.
Por el contrario, las mayores caídas interanual del PIB en el cuarto trimestre se observaron en España (-9,1%), Grecia (-7,9%) y Croacia (-7,1%).