El dólar comenzó el 2022 con una tendencia a la baja que encendió las alertas de la Unión de Exportadores, que se reunió con autoridades del Banco Central (BCU) para pedirles “alguna señal”. La responsable de la asesoría económica de la gremial, María Laura Rodríguez, aseguró que “la evolución del dólar preocupa mucho porque está siendo persistente” y “afecta la competitividad” general del país, pero “particularmente de aquellas empresas que tienen más personal contratado y tienen mayores consumos de energía y combustible”.
El dólar comenzó el año con una tendencia a la baja que se acentuó en los últimos días, y que genera “preocupación” en el sector exportador, ya que afecta a la competitividad del mismo.
En lo que va del año, el dólar estadounidense se depreció un 3,4%, y actualmente se ubica a nivel interbancario en $ 43,182, su valor más bajo desde el pasado 5 de octubre. Ayer jueves registró su noveno descenso diario consecutivo, al registrar una baja de 0,12% respecto al cierre del miércoles.
La baja de la divisa estadounidense se acentuó en febrero, acumulando en lo que va del mes un descenso de 2,19%.
Por su parte, en pizarras del Banco República el dólar estadounidense cerró su cotización a $ 41,95 en la compra y $ 44,35 a la venta.
Preocupación y diálogo
Ante esta situación, la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU) mantuvo una reunión con autoridades del BCU, donde le expresaron “la preocupación por la baja del dólar”, según explicó a CRÓNICAS la responsable de la asesoría económica de la UEU, María Laura Rodríguez.
“La evolución del dólar preocupa mucho porque está siendo persistente”, indicó, lo cual “afecta la competitividad” general del país, y “particularmente de aquellas empresas que tienen más personal contratado y mayores consumos de energía y combustible”. “Cada dólar exportado se cambia por menos pesos, y son los que se usan para pagar esos insumos”, fundamentó.
La economista de la UEU explicó algo que debe considerarse, y es que no todos los sectores se encuentran con precios internacionales al alza que permitan absorber este descenso del valor del dólar.
Desde la gremial se entiende necesario “alguna señal por parte del BCU para frenar la caída” del billete verde. Rodríguez destacó el diálogo permanente que mantienen con la autoridad montería a través de reuniones periódicas, y subrayó que “siempre tenemos mucha receptividad” por parte de las autoridades del BCU. “Están monitoreando la situación”, agregó.
Consultada respecto a si se prevén instancias de intercambio con otros actores del Gobierno, Rodríguez explicó que “siempre analizamos la competitividad desde un punto de vista global”, que van más allá de la evolución del tipo de cambio. Para ello, hay “instrumentados grupos de trabajo donde se profundiza en diferentes aspectos”, como la logística y la conectividad, los costos de producción, el acceso a mercados, entre otros. A partir de lo que surge en cada grupo de trabajo se van contactando a las autoridades de gobierno pertinentes.