El triunfo de Trump, el Bréxit, las dudas sobre los grandes acuerdos comerciales, auguran un “largo” período de incertidumbre y volatilidad a nivel internacional, opinó María Laura Rodríguez de la Unión de Exportadores. Sin embargo, ello puede significar una oportunidad para que Uruguay coloque su producción o concrete nuevos acuerdos. La recuperación de Rusia y el aumento de la demanda de productos de calidad por parte de China, también son noticias alentadoras para el país.
Por Ricardo Delgado | @ricardo_dl
Si bien los términos “proteccionismo” o “guerra comercial” le rechina a cualquier exportador, las amenazas de una guerra comercial entre Estados Unidos (EE.UU) y China, o las dudas que se abren respecto a la concreción de grandes acuerdos comerciales internacionales, “son una oportunidad para ganar terreno” y quizás aprovechar los huecos que impliquen esas mayores restricciones. Así lo evaluó nada menos que María Laura Rodríguez, responsable de la Asesoría Económica, Comunicación y Medio Ambiente de la Unión de Exportadores, en el marco de una conferencia sobre coyuntura económica realizada en la sede de la gremial.
A nivel internacional, lo principal a comentar fue obviamente la elección de Donald Trump como nuevo presidente estadounidense, que generó mucha volatilidad internacional e incertidumbre a futuro.
“¿Cómo nos puede afectar? Hay que esperar al 20 de enero” cuando asuma su cargo, se conozca su equipo y se comience a ver cómo va a implementar sus polémicas propuestas, estimó la economista. De todas formas, advirtió que aunque los Republicanos tienen mayoría en el Congreso, no todos están de acuerdo con Trump, por lo que le será difícil que pueda implementar sus propuestas.
En cuanto a la política monetaria, Rodríguez interpretó que es difícil pensar que la Reserva Federal (Fed) decidirá aumentar las tasas en su reunión de diciembre cuando estuvo todo el año postergando esa suba por el riesgo a incrementar la volatilidad financiera. De todas formas, auguró que el organismo “muy probablemente” optará por subir las tasas el año próximo.
En cuanto a las políticas que prometió Trump en campaña, estimó que –de aplicarse- podrían tener un impacto positivo sobre la economía estadounidense en el corto plazo, principalmente por la reducción de impuestos que propone, pero advirtió que a mediano plazo, si EE.UU. se vuelve un país más proteccionista, podría tener consecuencias negativas para la mayor economía del país.
No me digas adiós
En cuanto a la situación en Europa, valoró que tras el Bréxit, Gran Bretaña ha intentado “ganar tiempo” para alcanzar algún tipo de acuerdo con la Unión Europea (UE) antes de efectivizar la salida del bloque, mientras que éste, está apurando para que se concrete. Rodríguez opinó que esta situación “genera incertidumbre” y es probable que “esta siga por un tiempo”. Esta coyuntura, está enlenteciendo las negociaciones comerciales de la UE con el Mercosur, hasta que no se efectivice la salida. “Esto no terminó, va para largo”, recalcó.
Pero independientemente del Bréxit, la situación de la economía del viejo continente aún no es positiva. Estimó que la economía europea seguirá creciendo “de forma muy pobre” y que es esperable que se mantengan las tasas en niveles cercanos al 0% y que continúen los estímulos monetarios al menos seis meses más.
Pero el mayor desafío para la UE parece estar en el terreno político, porque “hay otros países que están pensando en el ‘exit’”, como Italia y Francia.
En cuanto al mundo emergente, destacó que Rusia vuelve a recuperarse, lo que es “muy bueno para Uruguay”, al tiempo que China muestra altibajos y parece estabilizarse, aunque hay algunos análisis que todavía advierten de un “aterrizaje forzoso” de la segunda economía mundial.
De todas formas, Rodríguez destacó que el cambio del modelo de crecimiento chino desde el comercio exterior al consumo privado, conllevará a un aumento de la clase media alta y alta, lo que podría implicar un aumento de la demanda por productos de mayor calidad. Esta situación representa un “nicho de oportunidad” para Uruguay.
A modo de resumen destacó que a futuro “todo es bastante incierto” y que en caso de que se diera una “guerra comercial” por un mayor proteccionismo de EE.UU. Uruguay podría “aprovechar los espacios que queden disponibles” de un lado y del otro para incrementar sus exportaciones.
A nivel regional, destacó que Brasil atravesó por su peor período económico desde 1930, pero para 2017 se prevé “un crecimiento leve”. Por su parte, Argentina está buscando atraer inversiones pero “no ha sido sencillo” y se espera que su PIB se contraiga un 1,5% este año, aunque repuntaría a un 3% en 2017.
No la dejes ir
En este escenario global y regional, Uruguay ha registrado un crecimiento apenas por encima del 0%, “pero crecimiento al fin”. De todas formas, interpretó que no se observa “un motor de crecimiento que nos permita repuntar”. “Las proyecciones del gobierno no se sabe en base a qué es que se van a dar”, comentó.
Las exportaciones de bienes y servicios han caído un 12,8% en el último año, y la competitividad muestra problemas fundamentalmente concentrados en el mercado laboral y en el ambiente macroeconómico.
En materia de productividad, destacó que según una encuesta realizada por la Unión de Exportadores entre sus socios, surgió que la mitad de los consultados miden la productividad de su empresa, pero que el 60% “no la aplican a los salarios”. Otra preocupación mostrada por los empresarios fue el ausentismo laboral, que fue valorado como un problema por el 64% de los consultados.
En materia de competitividad medida a través del Tipo de Cambio Real, destacó que “Uruguay está rezagado respecto a los movimientos del dólar a nivel global”. “La seguimos siempre de atrás”, opinó.
En cuanto a la inflación, destacó que ha tenido una evolución favorable luego de un comienzo de año en el que se vio acelerada por factores climáticos e impositivos que incidieron sobre el indicador. Para 2017 podría llegar transitoriamente a un nivel de 7%, vaticinó Rodríguez.
Sin embargo, criticó que las tarifas siguen siendo un problema, ya que “seguimos siendo caros”. Comentó que “desperdiciamos el momento” de bajar las tarifas de los combustibles aprovechando el bajo precio del petróleo, para buscar recomponer las cuentas públicas. No obstante, ello no ocurrió ya que el déficit continúa siendo el 3,5% del PIB. Pese a ello destacó que la deuda sigue en “niveles razonables”.
Rodríguez evaluó que “el nuevo contexto del Mercosur” permite a Uruguay negociar alianzas y acuerdos con terceros países, y en ese escenario, señaló que las recientes dudas respecto a la concreción del Acuerdo Transpacífico (TPP) o el TLC entre EE.UU. y la UE, “son una oportunidad para ganar terreno”. De la misma forma, se mostró favorable de avanzar en las negociaciones para concretar un TLC con China.
“No tenemos que dejar pasar más trenes”, concluyó.