Por más esfuerzos que haga Uruguay por reducir su déficit fiscal -que de hecho lo pudo lograr el pasado año-, las calificadoras no acceden a subirlo de nivel, según evaluó Munyo en un evento organizado por el banco HSBC. La clave para lograr ese objetivo, estaría en la reforma de la seguridad social. En este punto convergen la política y la economía, aunque lo catalogó como “tremendamente impopular”.
La bienvenida estuvo a cargo de Geoffrey Fichte, CEO de HSBC Uruguay, quien destacó el compromiso del banco de acompañar y ayudar a sus clientes. “Conocer más del contexto económico y político es insumo para visualizar y generar nuevas oportunidades de negocio. Por eso el banco está invirtiendo en Uruguay: en digital para mejorar la experiencia del cliente y recibiendo más capital para acompañar a nuestros clientes en su crecimiento”, afirmó Fichte.
Además del director de Ceres, el evento que se llevó a cabo en el Hotel Cottage Carrasco, también contó con un análisis de la situación política del país por el periodista Nelson Fernández.
En su oratoria, Fernández dilucidó que la oferta política nacional está sufriendo una renovación donde ha habido sorpresas, como Lacalle Pou. “Fue subestimado en su momento, pero demostró ser un gran caudillo”, opinó el periodista.
Luego de un repaso por las fuerzas político partidarias y los sindicatos uruguayos, advirtió que se está perdiendo la capacidad de acuerdo y lo ejemplificó con el Tribunal de Cuentas en la Suprema Corte de Justicia, que en dos años de gobierno no se han logrado poner de acuerdo para renovar los cargos. Sin embargo, lo diferenció de la idea de “grieta”.
«No confundamos con Argentina. En Uruguay no hay grietas. La convivencia política en vigencia es muy buena”, aclaró Fernández.
Hacia dónde ir
A su turno, Munyo recordó que el contexto internacional mantiene gran influencia en el ámbito económico y este persiste una enorme incertidumbre a nivel financiero. “Este contexto internacional es hoy para Uruguay muy favorable. Tenemos una conjunción de tasas internacionales y de precios que hacen que los vientos soplen a favor”, afirmó.
Según el experto, en este momento hay un “pico máximo” en el empleo. Sin embargo, las perspectivas macro, no se reflejan en las micro. «Vamos a tener en números macro un muy buen año, el problema es que esto no se refleja a nivel micro. ¿Cuánto la agroexportación puede derramar en el resto de la sociedad? Nosotros lo medimos y daba muy bien, que había gran derrame, pero por ahora no está derramando tanto cuando uno analiza indicadores de consumo en el interior», puntualizó.
Según expuso el director de Ceres, por más esfuerzos que haga Uruguay por reducir su déficit fiscal -que de hecho lo pudo lograr el pasado año-, las agencias calificadoras de riesgo no han accedido a subir escalones en su calificación crediticia.
«La deuda pública ha dejado de crecer, venía creciendo fuerte en años anteriores. Uruguay tiene mucha reserva y tiene una solidez financiera que es muy importante. Eso ha permitido que las calificadoras mejoren las perspectivas, pero no nos han subido escalones […] uno de los informes dice que está muy bien el esfuerzo fiscal pero hay una reforma que no nos olvidamos, todos lo marcan, que es la de la seguridad social, la clave para que esto sea sostenible», desglosó Munyo
Por este camino explicó que la mayor parte del gasto se explica por la seguridad social, y que si al tratarla en el Parlamento la aprueba, generaría “una espalda” para mayor gasto público.
“Es la llave de otras reformas que el país tiene pendiente”, subrayó.
Además, destacó que en la agenda del gobierno, los acuerdos comerciales más allá del Mercosur, siguen siendo una prioridad. “Sabemos que abrirse termina generando un país más desarrollado, pero el camino es muy largo”, añadió.
