Geoffrey Fichte, CEO de HSBC Uruguay
En un contexto que presenta importantes transformaciones tanto a nivel global, como regional y local, el principal desafío de HSBC es que el negocio continúe creciendo en forma ordenada.
¿Cuáles son las expectativas que tiene para el banco en 2020, teniendo en cuenta, no solo el cambio de administración de gobierno, sino también la desaceleración regional y mundial de la economía?
Estamos cumpliendo los objetivos del plan estratégico 2018-2020 que acordamos con nuestra casa matriz de Londres en 2017, y a pesar de los desafíos planteados, estamos convencidos que también alcanzaremos nuestras metas en 2020.
Hemos mejorado la rentabilidad del banco aumentando nuestro negocio en moneda local tanto a nivel corporativo como de personas, alocando el capital a los sectores y productos con mayores rendimientos. Esto lo hemos logrado, además, buscando simplificar la operación y el servicio al cliente, siendo más eficientes, seguros y rápidos.
Esto es muy importante. El cliente y su negocio es el centro de nuestra propuesta, y es por eso que nos esforzamos por brindar un mejor servicio, mejorar nuestra propuesta en todos los segmentos para responder a sus demandas de la mejora manera, y trabajamos de forma continua en la mejora de nuestros canales de atención.
Nuestro mayor desafío siempre será el de ser cada día un mejor banco para nuestros clientes, y eso implica estar presentes, asesorarlos y apoyarlos para enfrentar los desafíos de la coyuntura económica y social que puedan impactar sobre sus negocios.
En medio de un contexto de desaceleración o de menor crecimiento tanto en Uruguay como en la región, ¿qué líneas de negocio ve con posibilidades de crecimiento en el país?
Confiamos en nuestra propuesta y nuestros clientes. Estamos seguros de que hay espacios para seguir creciendo. Somos un banco activo y comprometido con las necesidades de nuestros clientes, por eso siempre estamos evaluando posibilidades de mejora y proponiendo nuevas alternativas para mejorar su experiencia con HSBC.
Tenemos previsto un crecimiento razonable en el área de banca corporativa captando más clientes y más operativa de los ya existentes a través de nuevos y mejores servicios, como por ejemplo el pago a proveedores remoto y una nueva app de banca digital.
También con una nueva propuesta para pymes, donde pensamos que podemos crecer. Y finalmente, buscaremos crecer en negocios de comercio exterior, donde vemos buenas perspectivas y HSBC es líder.
En lo que refiere a personas, buscaremos seguir creciendo en productos de consumo, financiación de autos, casas y en créditos personales, con experiencias digitales más simples, rápidas y seguras.
Por otra parte, en lo que refiere a nuestra banca preferencial, lanzamos una nueva propuesta Premier ajustada a las personas que cobran sueldos, honorarios o rentas periódicas con un pago de intereses sobre saldos muy atractivo, además de otros beneficios.
Tenemos una propuesta muy competitiva, y contamos con el respaldo de un banco global que nos permite impulsar los negocios de nuestros clientes hacia cualquier lugar del mundo. Eso genera confianza, respaldo y oportunidades.
¿Cuáles son los desafíos que tiene por delante el banco, y cuáles son los temas de mayor preocupación?
El principal desafío es que el negocio continúe creciendo en forma ordenada en un entorno que presenta muchos cambios importantes a nivel global, regional y local. Los temas de mayor preocupación en este marco son la rentabilidad de las empresas, el empleo, la inflación, las tasas de interés internacionales y la evolución del dólar; son todos factores que condicionan la economía y a la comunidad que servimos desde el banco.
En lo que refiere específicamente al banco, nuestro mayor desafío es el de ser todos los días una mejor opción para nuestros clientes. Eso implica la mejora continua de nuestra propuesta, de nuestros productos y servicios. Tenemos que seguir avanzando para ser un banco siempre disponible para nuestros clientes, y a través de la tecnología hoy es posible. Es un mensaje que HSBC ha dado a nivel global con una inversión planificada de hasta US$ 17 billones en la incorporación de tecnología, para la mejora de procesos y servicios, la generación de nuevas oportunidades de negocios, y el impulso a los negocios de los clientes.
¿Cómo observa el proceso de bancarización? ¿Ve algún riesgo de que pueda enlentecerse su marcha?
La inclusión y el uso de instrumentos financieros han crecido sostenidamente desde la vigencia de la ley por tanto gran parte del camino ya fue recorrido. No vemos, por tanto, riesgos de enlentecimiento relevantes.
