Juan Olascoaga, gerente general de Montecon
El ejecutivo establece que el 2021 se presenta desafiante para la compañía en varios frentes. Hace hincapié en la necesidad de promover la competencia interna en el Puerto de Montevideo para así mejorar la competitividad y habla de la responsabilidad de una mayor fiscalización por parte de la ANP de los estándares operativos que hay entre los distintos actores dela terminal portuaria.
¿Cuáles son los planes de Montecon y dónde pondrá énfasis la empresa en lo que respecta a su gestión en 2021, teniendo en cuenta el contexto por el que atraviesa el país y el mundo?
El año que viene se nos presenta como un período por demás desafiante. Por un lado, la necesidad de seguir asegurando la continuidad operativa del Puerto de Montevideo en el marco de la presente pandemia. Por otro, seguir avanzando en mejorar nuestros procesos atendiendo a las distintas necesidades de nuestros clientes. Tenemos planes concretos de más inversión en equipamiento e infraestructura que esperamos poder concretar durante el 2021.
¿Cuáles son los desafíos que tiene por delante el sector del que forma parte Montecon en el Puerto de Montevideo en tiempos de pandemia, y cuáles son las amenazas que ve en el horizonte ante este nuevo escenario?
El 2020 estuvo signado por la aparición de un cisne negro que nos obliga a una profunda reflexión: quien más rápido y mejor avance en la digitalización de sus procesos de negocio, mas chance tendrá de sobrevivir.
El Puerto de Montevideo tiene grandes desafíos y amenazas. El principal desafío es mejorar su competitividad y, a nuestro juicio, eso se sustenta en fomentar la competencia interna, permitiendo inversiones tanto en equipamiento como en infraestructura que permitan mejorar la productividad y, por ende, bajar costos operativos que se traduzcan en tarifas más competitivas. La principal amenaza esta ligada a lo anterior, esto es caer en monopolios -“de hecho”- privados que dejen de rehén a todo el comercio exterior uruguayo.
En su opinión, ¿cuáles son las mayores necesidades que tiene el Puerto de Montevideo en lo que refiere a infraestructura, ya sea en materia de instalaciones como tecnológica, u otro tipo?
El Puerto de Montevideo,antes que más obras, necesita optimizar las obras que ya ha realizado. A modo de ejemplo, no se explica un muelle C/D que hoy sea utilizado para amarre de pesqueros o sólo para carga de rolos. El puerto tiene que fomentar el mejor uso de sus recursos escasos a través de inversión en el mejor equipamiento disponible que permita optimizar su uso, y esto es responsabilidad del sector privado
Es cierto que hay varios proyectos en desarrollo que van a significar mejoras sustanciales, tales como el nuevo puerto pesquero de Capurro, o el ordenamiento del tráfico interno. Pero aún estamos en el debe en temas tales como gates automáticos, sistema de agendamiento para el ingreso de camiones, etc.
¿Qué otras herramientas son necesarias para fomentar un mayor desarrollo del Puerto de Montevideo?
Hoy son muchas las herramientas tecnológicas disponibles que todos los puertos del mundo aplican, no hay que inventar nada, solo comprender qué y cómo lo hacen los mejores. Dejarnos de eternos diagnósticos y consultorías y ejecutar.
Un tema del cual mucho se habla y acá aun está por implementarse es lo que se conoce como Port Community System (PCS), esto es, una plataforma tecnológica para la gestión de solicitudes y prestación de los distintos servicios portuarios de forma inteligente, donde todos los actores -tanto privados como públicos- interactúan, facilitando gestiones y procesos. Entiendo que es un tema que está en la órbita del Inalog,y que no es nada novedoso en el mundo, hay mucha oferta el respecto, pero acá aún estamos en el debe.
Pero también hay que avanzar en incorporar otras herramientas disruptivas como los son Internet de las Cosas, herramientas de reconocimiento facial y tratamiento de imágenes, inteligencia artificial, etc. En Montecon ya hemos incorporado varias de estas herramientas a nuestros procesos.
¿Cómo evalúa lo que está haciendo la actual administración de gobierno en ese sentido? ¿Qué se ha hecho de positivo y qué falta por hacer y no se ha hecho?
La actual administración ha impulsado positivamente algunos proyectos en curso -Capurro, terminal de celulosa de UPM, viaducto-, pero aún hay mucho por hacer. El dragado a 14 metros anunciado será importante, pero antes que eso hay que resolver temas más concretos, como por ejemplo completar la demolición de los freus del dique de cintura para permitir una más segura maniobra de entrada de los grandes buques a las dársenas interiores. También debería trabajar con mayor foco en temas de seguridad y salud ocupacional y en temas ambientales. Hoy, los estándares operativos entre los distintos actores del puerto son muy dispares y es necesaria una mayor fiscalización y liderazgo de la ANP (Administración Nacional de Puertos) al respecto.
¿Algo más para agregar?
En lo general, remarcar la responsabilidad con que toda la comunidad portuaria, empresas y trabajadores, se han manejado en el marco de esta pandemia, logrando mantener las operaciones preservando la salud de las personas.
En lo particular, destacar la rebaja de tarifas que hemos realizado en el suministro de frio al sector de los contenedores reefer, lo que demuestra que toda vez que se nos permita invertir y mejorar nuestra estructura de costos, Montecon esta dispuesto a compartir dichas mejoras con sus clientes. En este caso, a raíz de una muy fuerte inversión en nuevos andenes reefer que nos permitieron mejorar nuestra matriz energética, pasando de gas oil a energía eléctrica.
También marcar nuestro permanente foco en temas de seguridad y salud ocupacional, preservación del medio ambiente y políticas de género, en los que Montecon, aún con mucho terreno por avanzar, es referente en el quehacer portuario.
Finalmente, destacar nuestra convicción que el actual gobierno va a continuar la ya instaurada política de Estado y que ha trascendido distintas administraciones respecto a defender la Ley de Puertos, y con ella la libre competencia entre privados. Es un tema que a nuestros accionistas, tanto chilenos como canadienses, les preocupa y que están siguiendo muy atentamente.
