Avances en innovación, sostenibilidad y economía del conocimiento

EDICIÓN ESPECIAL 2024

ELISA FACIO, MINISTRA DE INDUSTRIA, ENERGÍA Y MINERÍA

La gestión del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) se destacó por logros como la adhesión al PCT tras 30 años de espera, promoviendo innovación y patentes; la consolidación del Uruguay Innovation Hub, impulsando la economía del conocimiento; y avances en hidrógeno verde e inteligencia artificial. Para 2025, se espera mantener políticas de apertura, fortalecer la industria tecnológica y fomentar la colaboración público-privada.

¿Qué balance hace de este año en lo que respecta a la gestión del MIEM?

Fue un año de cierre de muchas cosas que nos propusimos, terminamos de concretar temas prioritarios que se planteó esta administración desde el comienzo.

Concretamos la adhesión de Uruguay al Tratado de Cooperación en Materia de Patentes (PCT), que se esperaba hacía más de 30 años. Este tratado fortalece el sistema de patentes del país, facilitando la protección internacional de innovaciones para inventores, emprendedores y empresas. Este logro fue fruto de un esfuerzo mancomunado de autoridades e instituciones. Ahora somos el país 158 en formar parte del PCT, estamos en la etapa de capacitación en el nuevo sistema que rige a partir del 7 de enero. Con este paso modernizamos la normativa local, promovemos la colaboración internacional en investigación y desarrollo, y ofrecemos nuevas oportunidades para competir en la economía global. Ha sido un hito que refuerza el compromiso de esta administración con la innovación y el desarrollo tecnológico, desde el aporte normativo con una herramienta clave para el crecimiento de la economía del conocimiento. A partir del 7 de enero, los investigadores podrán patentar sus investigaciones e inventos en Uruguay a muy bajo costo, obteniendo una reserva de 30 meses en el mundo.

Consolidamos la creación del programa Uruguay Innovation Hub (UIH), que comenzó a funcionar durante el 2022 y hoy cuenta con su sede en el Parque de la Innovación dentro del LATU. UIH nace como respuesta a nuestra visión de un futuro donde la innovación y la tecnología son motores fundamentales del desarrollo de la economía del conocimiento. Dimos el espacio donde el ecosistema vibrante de emprendedores, investigadores, empresas y el gobierno colaboran para impulsar la creación de soluciones innovadoras que mejoren la vida de las personas y generen nuevas oportunidades de desarrollo. UIH es parte de la estrategia del gobierno para posicionar a Uruguay como un hub de innovación, atraer inversiones y trabajo calificado principalmente para los jóvenes.

Avanzamos en el desarrollo de la industria del hidrógeno verde y esperamos que se transforme en una política de Estado que dará grandes frutos al país en unos años. Se calcula que para el 2040 significará US$ 1.300 millones en exportaciones, generando más de 30.000 puestos de trabajo. Esta industria se convertirá en una de las más fuertes del país, comparable a la industria cárnica y la de lácteos. Es una gran oportunidad para los uruguayos; dejamos una hoja de ruta preparada para que sigan concretándose las etapas planificadas.

También desarrollamos la estrategia de inteligencia artificial para el gobierno. En nuestro país se desarrollan 27 proyectos de inteligencia artificial y Uruguay ocupa el tercer lugar en el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial, lo cual es un motivo de orgullo. Era necesario gestionar una estrategia para impulsar la adopción de esta tecnología, comenzando con el gobierno, que es en donde debemos ser más eficientes. Para desplegar esta tecnología necesitamos invertir en infraestructura local y se está haciendo con Antel, que ofrece sus servicios a través de sus datacenters. La inteligencia artificial no solo representa una oportunidad para construir una sociedad más equitativa y sostenible, sino que también potencia la creación de empleos calificados y mayor eficiencia en los servicios. Todo esto se traduce en una mejor calidad de vida para todos.

¿Cuáles son las expectativas que tiene para el sector industrial y el energético en 2025, teniendo en cuenta el cambio de signo político en el gobierno, pero también la situación actual de la economía tanto nacional como mundial?

Las políticas macro se deberían mantener y pienso que seguirán su curso. Dejamos un país muy bien posicionado globalmente, con acuerdos de trabajo firmados con China, Estados Unidos y la Comunidad Europea. A nivel regional somos referentes en energías renovables y un ejemplo de cómo se realiza un proyecto a largo plazo como lo son las transiciones energéticas. Recordemos que llegar a ser un país con matriz eléctrica 97% renovable tomó muchos años y leyes propuestas por gobiernos de diferente sello. Por ejemplo, permitir que haya generadores de energía privados y luego, con el Decreto 147/023 del 17 de mayo de 2023, habilitarlos para que vendan sus excedentes a UTE. Estas y otras medidas impulsan la adopción de energías renovables como biomasa, energía eólica y fotovoltaica.

Alcanzar a ser el segundo país del mundo con la mayor matriz eléctrica renovable tomó décadas y decisiones que no siempre fueron aceptadas desde lo ideológico. Fueron leyes promovidas por diferentes gobiernos, si bien el partido que gobernará el país no las apoyó en su momento, seguramente estén de acuerdo con que el resultado ha sido relevante y será trascendente para el crecimiento del país y el bienestar de la ciudadanía.

Y en materia de industria, ¿cuáles son las perspectivas?

La industria es un sector clave, fue de los más golpeados con la pandemia y aún hoy está en recuperación. Desde el gobierno se tomaron medidas a partir del diálogo fluido y constante con los referentes de la Cámara de Industrias del Uruguay y con todos aquellos que necesitaron reunirse con nosotros. En concreto, se tomaron medidas desde varios ministerios para dar espalda a los industriales y emprendedores. En el MIEM se aumentó el monto de apoyo al Fondo Industrial y se crearon nuevos fondos, como el de vinculación tecnológica, el de robótica, el de biotecnología y el fondo naranja especialmente creado para la industria creativa del diseño.

Estos novedosos fondos se crearon para potenciar industrias sumergidas o apoyar las que tienen gran potencial, con el objetivo de que se desarrollen impactando en un ecosistema bien identificado: el sector de tecnologías de la información. Impulsamos la adopción de tecnología para hacer que los procesos sean más eficientes en su producción y gestión. Potenciamos que las plantas sean autosustentables, que aprovechen la oportunidad de generar su propia energía a través, por ejemplo, de paneles solares, lo que les permite ahorrar un costo fijo que suele ser alto.

Para el próximo año espero que se continúe fortaleciendo la relación con los industriales, grandes y pequeños. Que se mantenga el vínculo de colaboración público-privada que había sido relegado anteriormente. Por último, también espero que se mantenga el espíritu de escucha constante y que el MIEM siga siendo de puertas abiertas para todos.

¿Qué desafíos cree que deberán sortearse hacia 2025?

Hay que seguir apuntalando el desarrollo de las tecnologías emergentes, de la industria del software y de la innovación. El camino del crecimiento del país va de la mano de una economía del conocimiento, hay que ir por ahí, fortalecerla y ayudar a que continúe el desarrollo vertiginoso de estos últimos años. También creo necesario mantener la estrategia de inteligencia artificial en el sector público que recientemente lanzamos, lo que hará al Estado más eficiente y menos costoso. Además, sería una referencia para otros sectores como el privado para adoptar herramientas de esta tecnología.

Espero que el país mantenga un rumbo de apertura y colaboración internacional, hemos firmado acuerdos en los que se pondera la generación de capacidades y el intercambio de conocimiento con el objetivo de potenciar nuestros talentos que hacen parte al prestigio de nuestra marca país. Es un valor intangible que debemos cuidar. Hacia la interna del país, espero que se siga promoviendo el acceso a la tecnología y que más niños y niñas sean inspirados, acompañados a estudiar carreras relacionadas al desarrollo de la tecnología. Que sigamos el rumbo planteado hacia un país productivo, porque es el camino de la equidad y el bienestar para los ciudadanos.