Análisis: Covid-19: desafíos al comercio internacional

Filipe Vasconcelos Romão, pofesor invitado en la Universidad ORT del Uruguay. Presidente de Portugal – Cámara de Comercio de Atlántico Sur


La pandemia motivada por la expansión de Covid-19 provocó el pánico en los agentes económicos y parece estar llevando al mundo hacia una nueva crisis global, que afecta directamente el comercio internacional. 

Según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), la Covid-19 causó, en febrero, una contracción del 2% en la producción industrial en China (el mayor exportador del mundo) y la OCDE ya ha revisado sus proyecciones de crecimiento económico a la baja (del 2.9% al 2.4%). No existen dudas, hoy en día, de que el actual momento supondrá un duro revés para la economía mundial y que la recuperación será larga.

El comercio internacional está frenando a fondo, con dificultades para proveer las diferentes industrias y con una fuerte contracción de la demanda. En este contexto, hemos sido testigos de la cancelación de numerosas ferias, reuniones de negocios y misiones comerciales, con lo que se redujeron drásticamente las interacciones entre empresas. Esto supondrá un fuerte impacto en sus resultados. La suspensión de eventos como Mobile (Barcelona), el Salón del Automóvil de Ginebra y ProWein (Düsseldorf) destacan la diversidad de sectores afectados.

Suponiendo que los mercados externos continuarán siendo fundamentales para una parte considerable de las pequeñas y medianas empresas, y que las exportaciones no colapsarán, los agentes económicos tendrán que adaptarse en el corto plazo. Los últimos 20 años nos han proporcionado herramientas de comunicación remota y una marcada reducción en los costos de las comunicaciones internacionales. En el sector de servicios, especialmente en tecnologías de la información (por supuesto), la comunicación remota se ha impuesto normalmente, pero aún existe cierta resistencia, especialmente en áreas donde el contacto con el producto es esencial.

El momento actual requiere que actuemos rápidamente en la búsqueda y consolidación de modelos alternativos de comunicación y facilitación de negocios. En el campo de la prospección en los mercados extranjeros, es necesario reaccionar y desarrollar formas de contacto para evitar la pérdida de clientes potenciales y compensar la cancelación de ferias y misiones comerciales individuales y colectivas. Debemos tener en cuenta que esta es una crisis global y que las empresas de otros países también la están experimentando, por lo que la receptividad a los nuevos modelos de interacción es ahora mayor.

Depende de los empresarios la capacidad de adaptación, esfuerzo y creatividad, pero las asociaciones empresariales y las cámaras de comercio, en esta etapa, tendrán que proporcionar todo el apoyo necesario a las empresas para una mejor respuesta al desafío que plantea Covid-19. Los programas para innovar y acortar distancias y para facilitar este paso de comunicación a distancian gradualmente pasaran a ser más necesarios que nunca.