El vecino país enfrenta importantes desafíos tanto en materia sanitaria como económica. Estos días se decidió un nuevo confinamiento para apaliar el crecimiento de contagios.
Por Sofía Tuyaré (*)
La situación sanitaria que atraviesa el mundo ha demostrado ser impredecible, y luego de casi un año y medio de pandemia aún golpea fuertemente a las naciones que enfrentan el virus. La creación de vacunas, que según las pruebas parecen efectivas, genera optimismo y esperanzas de estar cerca del final de este complejo escenario, pero aún las realidades entre los países es muy dispar. Mientras Europa tímidamente comienza a pensar en la temporada de verano, y algunos países de la comunidad diagraman las posibles aperturas al turismo para vacunados, la región afronta un momento crítico de la pandemia.
Argentina, previo a la aparición del covid-19 en el mundo, enfrentaba dificultades económicas, pero la pandemia profundizó los problemas. Recordemos que la economía argentina en 2019 registraba recesión, alta tasa de inflación, fuerte devaluación y complicaciones fiscales que lo llevaron a solicitar un préstamo al Fondo Monetario Internacional (FMI).
La llegada del virus al país generó medidas de confinamiento muy restrictivas el año pasado, algo que dificultó las actividades de muchos rubros; solamente los considerados “esenciales” pudieron trabajar con cierta normalidad. Como es de esperar, esto repercutió en el desempeño económico de los sectores económicos que fueron cerrados total o parcialmente. Recientemente se volvieron a tomar directivas en el mismo sentido, según anunciaron es de carácter temporal –en principio por nueve días-, debido al aumento de casos de covid-19 en las últimas semanas.
El plan de vacunación avanza lento y la llegada de las vacunas genera muchas expectativas en la población. Las miradas están en cómo progresa el programa de inmunización de los habitantes, que generó mucha controversia y críticas. Según lo que se conoce hasta el momento, la única salida que visualizan los expertos es alcanzar una importante porción de los habitantes inmunizados, y así poder salir de esta crisis sanitaria y económica.
Nivel de actividad
En 2019 el Producto Interno Bruto (PIB) se contrajo 2.1% y en 2020, año marcado por la pandemia, la economía cayó un 9.9%. Con esta caída se completan tres años de bajas consecutivas en el nivel de actividad.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el PIB en el cuatro trimestre de 2020, último dato disponible, disminuyó 4.3% respecto al mismo periodo del año anterior. Si se analiza la serie desestacionalizada, el PIB en el periodo octubre-diciembre de 2020 se incrementó 4.5% respecto al tercer trimestre. Recordemos que en el primer tramo del año las medidas de confinamiento eran las más estrictas.
El Estimador Mensual de Actividad Económica que elabora el Indec, en marzo de 2021 creció 11.4% respecto al mismo mes del año anterior. Tomando la serie desestacionalizada, el índice cayó 0.2% respecto de febrero de 2021.
La incertidumbre es muy relevante en el actual contexto, no se conoce con exactitud cuán efectivo será el plan para salir de la crisis sanitaria, pero se espera que en la segunda mitad del año se avance en la vacunación masiva. Se proyecta una recuperación para este año. Según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central de la República Argentina de abril de 2021, los analistas que responden la encuesta proyectan un crecimiento del PIB de 6.4% para 2021.
El FMI en su informe de abril prevé que la economía argentina aumente 5.8% este año y 2.5% el próximo.
Precio y dólar
El nivel de precios de la economía argentina es un tema que es centro de debates desde hace tiempo. Según el Indec, en abril de 2021, último dato disponible, la inflación mensual fue de 4.1%, Con este incremento, se acumulan en los primeros cuatro meses del año un crecimiento en el nivel de precios del 17.6%. Si se toma la variación interanual, en los últimos doce meses a abril la inflación fue de 46.3%.
Según la Encuesta REM de abril de 2021, la mediana de las estimaciones sitúa a la inflación de 2021 en 47.3%.
El mercado de cambios tiene la particularidad de que en el mismo conviven varios mercados paralelos; esto, como consecuencia de las medidas de control que llevan adelante las autoridades. Como dólar libre se toma el denominado dólar “blue”, que es al que se accede en los mercados paralelos, mientras que el oficial es la cotización del Banco Central de Argentina, que tiene restricciones. A mediados de 2019 el tipo de cambio registró un salto importante en las pizarras, y las autoridades implementaron restricciones, un instrumento ya utilizado en el vecino país. Eso llevó a que existan brechas entre ambas variables.
En abril de 2021, último mes cerrado, el valor del dólar “blue” registró un crecimiento de 28% respecto al mismo mes del año anterior.
(*) Economista, integrante del departamento de Consultoría de Carle & Andrioli, firma miembro independiente de Geneva Group International.