Diez años pensando la comunicación política desde el sur

Hace una década, en un Uruguay electoralmente polarizado pero todavía sin una industria de consultoría política desarrollada, nacía Ciudadana. Lo que empezó como una apuesta por profesionalizar la comunicación en campañas y gobiernos, se convirtió con los años en una experiencia global: 10 años, 4 continentes, más de 12 países y decenas de campañas después, esta consultora uruguaya celebra una trayectoria marcada por la creatividad, el trabajo de campo y una mirada profundamente ciudadana.

Fundada en 2015 por Julián Kanarek, Milena Guillot y Nacho Vallejo, Ciudadana se propuso desde el inicio cambiar la manera en que se pensaba la comunicación política en Uruguay. Pero no tardó en cruzar fronteras: en poco tiempo ya estaban asesorando campañas en América Latina, y en 2018 lograron su primer triunfo presidencial fuera del país, en Costa Rica.

Desde entonces, participaron en campañas ejecutivas, legislativas y regionales en países como Argentina, México, Ecuador, Panamá y hasta Namibia. Si bien algunas elecciones se ganaron y otras no, lo que nunca faltó fue aprendizaje: “La comunicación cambió radicalmente en estos años, y nosotros con ella. Entender al votante, al ciudadano común, es un trabajo que no se termina nunca”, dice Kanarek.

Además del trabajo con candidatos y partidos, la consultora también acompañó procesos comunicacionales con organismos internacionales como ONU Mujeres, OMS, Unión Europea, OEA y BID, dejando su impronta en campañas institucionales en contextos tan diversos como los Emiratos Árabes, Madrid o la región andina.

El equipo de Ciudadana —siempre en movimiento, siempre curioso— ha sido premiado por su trabajo tanto en el ámbito publicitario como en el de la consultoría política. Pero más allá de los reconocimientos, lo que celebran este 2025 es una década de compromiso con una idea: que la comunicación política no es solo técnica, sino también empatía, escucha e interpretación de lo social.

Hoy, con oficinas en Montevideo y Madrid, y colaboradores en distintas partes del mundo, Ciudadana sigue creciendo. Pero mantiene intacta su vocación original: hacer comunicación con sentido, desde el sur hacia el mundo.