El nivel de actividad de la industria manufacturera se mantuvo prácticamente estable en el primer trimestre del corriente año respecto al mismo trimestre del año anterior. El índice de volumen físico en abril registró una importante disminución.
Por Sofía Tuyaré (*)
El dato que todos esperaban con atención se publicó la semana pasada. Las cuentas nacionales confirmaron lo que se estimaba, y el nivel de actividad disminuyó en el primer tramo del año. No fue sorpresa este comportamiento de la economía, dado el contexto mundial y regional que enfrenta el país.
Según los datos publicados por el Banco Central del Uruguay (BCU), en el primer trimestre del año el Producto Interno Bruto (PIB) disminuyó 1.4% respecto al mismo periodo del año anterior, luego de registrar un magro desempeño en el último tramo de 2019-recordemos que en el periodo octubre-diciembre el PIB creció levemente un 0.2%-.
Si el indicador se compara respecto a trimestre inmediatamente anterior, tomando la serie desestacionalizada, el PIB lleva dos trimestres consecutivos de caídas y varios periodos mostrandoun desempeño debilitado. En el periodo enero-marzo de 2020, el nivel de actividad se contrajo 1.6% respecto del trimestre inmediatamente anterior, luego de caer 0.7% en el cuarto trimestre del año pasado para la misma medición.
Estos números se conocen en un contexto adverso para la economía uruguaya. Sin embargo, las dificultades de muchas ramas de actividad se observan previo a la crisis sanitaria. El año pasado el país enfrentó en materia económica un escenario internacional de desaceleración en el crecimiento mundial, y a nivel regional una compleja situación de los vecinos, sobre todo de la crisis económica que enfrenta Argentina desde el año pasado.
La llegada del Covid-19 al Uruguay tuvo efectos que se reflejan parcialmente en los datos presentados por el BCU. Recordemos que el 13 de marzo se decretó la emergencia sanitaria, lo que provocó el freno o la disminución de la actividad en varios sectores, sobre todo las ramas orientadas a servicios. En abril se registró la mayor restricción a nivel sanitario.
Según el informe de cuentas nacionales, en términos interanuales, en el periodo enero-marzo la mayoría de las ramas de actividad registraron caídas, a excepción del Transporte, almacenamiento y comunicaciones que se expandió, producto del aumento en los servicios de comunicaciones.
Los demás sectores productivosregistraron caídas en su actividad respecto al mismo trimestre del año anterior: el agro, el suministro de electricidad, gas y agua, la construcción, el sector comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles, y otras actividades. Por su parte, la industria registró niveles similares a los del año pasado.
Industria
Según el BCU, la industria manufacturera disminuyó ligeramente un 0.1% en el primer trimestre de 2020 respecto al mismo trimestre del año anterior, luego de caer 2.2% en el cuatro trimestre de 2019, para la medición interanual. Si se toma la variación del índice desestacionalizado, el PIB en el periodo enero-marzo de este año aumentó 2.9% respecto al trimestre inmediatamente anterior, es decir, el periodo entre octubre y diciembre de 2019. Este crecimiento se registra luego de caer en el último tramo del año pasado -el PIB en el cuarto trimestre de 2019 disminuyó 5.4% respecto al tercero-.
El comportamiento del indicador en términos interanuales en el periodo enero-marzo de 2020 explica que, por un lado, se registró incremento en la actividad de rubros como la elaboración de jarabes y concentrados, pulpa de celulosa y la refinería de petróleo. Pero, por otro lado, disminuyó la producción en el resto de las industrias, y se destaca el desempeño contractivo principalmente de la industria frigorífica, seguido con menos incidencia por la fabricación de productos textiles.
La información que nos muestra las cuentas nacionales es del primer trimestre del corriente año, pero contamos con algunas variables del sector que nos brinda información adicional un poco más actualizada. En este caso, el Instituto Nacional de Estadística (INE) elabora el índice de volumen físico de la industria manufacturera. Según este indicador, en abril de 2020, último dato disponible, cayó 19.3% respecto a abril de 2019. Si se excluye la refinería del indicador, el índice disminuyó 22.2% para mismo periodo.
Otros datos interesantes que elabora el INE, dentro de este indicador, es el Índice de Horas Trabajadas (IHT) y el Índice de Personal Ocupado (IPO). Según el organismo, en abril ambos indicadores se mostraron a la baja, algo que no sorprendió debido a la conocida compleja situación del mercado laboral. El IHT en el cuarto mes del corriente año disminuyó24.6% respecto al mismo mes del año anterior, y el IPO cayó 14.9% para el mismo periodo de medición.
Expectativas
Los datos de contracción se esperaban dado que en este primer semestre del año el mundo, la región y Uruguay enfrentan circunstancias poco conocidas y difíciles de pronosticar. Las noticias que vienen de China y Europa son de mayor optimismo dado que se empezaron a prender los motores y a abrir sectores. Si bien la pandemia no se extinguió, se espera que para el segundo trimestre del año la situación esté más controlada, según las proyecciones de los expertos.
Los organismos internacionales pronostican bajas en el nivel de actividad este año y recuperación en el próximo. En este sentido también van los analistas locales. Según la Encuesta de Expectativas Económicas que elabora el BCU, en mayo de 2020, último informe disponible, la mediana de los analistas proyecta una caída del PIB de 3.5% en 2020, que crezca 4% en 2021 y 2.5% en 2022.
(*) Economista, integrante del departamento de Consultoría de CARLE & ANDRIOLI, firma miembro independiente de Geneva Group International.