Escribe: Anahí Acevedo @PapovAnahi
Montevideano y analista en marketing, ventas y programación, Adrián Rosso está inmerso en un mundo sobre ruedas. Gerente comercial de la división Motos de Grupo Piaggio y de la sección Camiones (JMC) de Santa Rosa Motors, de pequeño sus sueños eran infinitos. De esta forma, proyectaba su futuro entre profesiones que pasaban de médico a bombero, pero su meta más latente fue la de futbolista.
Hoy acompasa su pasión de deportista con los desafíos empresariales. En JMC colabora para que la compañía sea líder en camiones livianos, dirigiendo sus esfuerzos para superar el punto porcentual que los separa del primer puesto.
A su vez, en Grupo Piaggio intenta conquistar a los usuarios de motocicletas con las cuatro marcas disponibles que ofrecen, dentro de las que se encuentra la clásica Vespa.
De todas formas, el mayor desafío se encuentra en posicionar los modelos de 50 cc para que los jóvenes, a medida que vayan creciendo, al recordar su primera moto, ya no cambien de marca.
Aunque considera que tanto el mercado de camiones livianos como el de motos actualmente están devaluados en comparación a años anteriores, Rosso es optimista y señala que todo hace pensar que se normalizarán en los próximos años, impactando de forma directa en sus ventas.
Su carrera laboral se inició a los 19 años, cuando cursó una pasantía de seis meses en el Banco de Previsión Social (BPS), abonando jubilaciones y pensiones. A partir de entonces, de cada experiencia de trabajo extrajo conocimientos, herramientas, vivencias y amigos que lo formaron personal y profesionalmente.
A Grupo Piaggio arribó en febrero de este año, gracias a la oportunidad que le brindó uno de los directores de la empresa, lo que representó un reto para Rosso, puesto que por entonces no tenía experiencia previa en el rubro.
Acerca de su vinculación con JMC, el hoy gerente comercial de la sección Camiones, relató que si bien lleva adelante una nueva representación en el grupo, cuando ingresó a la empresa, en agosto pasado, la marca ya poseía un mercado interesante en Uruguay.
“El desafío para JMC es llegar a ser líderes en camiones livianos; hoy estamos segundos con el 17% de participación, pero solamente a 1 punto del eventual primero”.
Lo que más le agrada de su lugar de trabajo es el respaldo y la importancia del grupo, así como el joven y pujante equipo laboral y la confiabilidad de las marcas que representa.
Su familia está compuesta por sus padres Rodolfo y Graciela, Su hermana Laura, su cuñado Hugo, sus sobrinos Lucía y Mathías, y su señora Laura. Pero sin duda, “la pequeña estrella de su familia” es Olivia, su hija de 9 meses. En sus horas libres Rosso disfruta de compartir tiempo con ellos, regocijarse al ver crecer a Olivia, jugar al fútbol y reunirse con amigos.
En su oficina no puede faltar su notebook y música, dentro de la que le agrada el rock y el reggae. Su libro preferido es “Steve Jobs”, de Walter Isaacson, no sólo por el contenido, sino porque fue un obsequio de un “hermano de la vida”. Su momento preferido del día son las mañanas, las que prefiere acompañar con un mate amargo.
Dentro de los estilos cinematográficos opta por el género policial o comedia. En este sentido expresa “Hay películas que he visto más de tres veces, generalmente si son divertidas”.
A la hora de proyectarse, Rosso desea continuar dentro de Santa Rosa Motors, cumpliendo con los desafíos y las responsabilidades que le toque afrontar. En cuanto a las vivencias personales, manifiesta: “Quiero seguir siendo yo mismo, rodeado de mi familia y amigos, con mis virtudes y defectos”.