El director del Instituto Nacional de Calidad, Gonzalo Blasina, habló con Empresas & Negocios sobre los premios de calidad y la búsqueda de evaluadores voluntarios, cuya convocatoria cierra el 7 de abril. Además, el 22 del mismo mes inicia el ciclo de talleres en habilidades de dirección. Blasina destacó que Uruguay, segundo en Latinoamérica en uso de vehículos eléctricos, debe mejorar sus normas de comercialización y uso, para lo que hay que “potenciar el Sistema Uruguayo de Normalización, Acreditación, Metrología y Evaluación de la Conformidad”.
Por Agustina Gómez
Hasta el 7 de abril está abierta la convocatoria para postularse a los premios que el Instituto Nacional de Calidad (Inacal) otorga cada año. El principal reconocimiento es el Premio Nacional de Calidad, basado en un modelo de mejora continua. Sin embargo, el Inacal, dirigido por el ingeniero químico Gonzalo Blasina, creó diversos modelos para facilitar que las pequeñas y medianas empresas, así como también entidades públicas y cooperativas, puedan participar de los premios sin aspirar necesariamente al Premio Nacional de Calidad.
De esta manera, cada organización puede postularse a distintos niveles de reconocimiento, entre ellos, el Premio Compromiso de Calidad con el Turismo, exclusivo para organizaciones registradas en el Ministerio de Turismo; el Premio Compromiso con la Gestión Pública, para organizaciones del sector público con hasta 199 empleados; el Premio Compromiso con la Gestión en el Sector Industria; el Premio Compromiso con la Gestión en Organizaciones Privadas, que apoya a pequeñas empresas privadas en su camino hacia una gestión de calidad; y el Premio Más Valor Cooperativo, que busca reconocer y fomentar la calidad e innovación dentro del movimiento cooperativo. Además, existen menciones en Equidad de Género y el reconocimiento por Niveles a la Gestión de Innovación.
En diálogo con Empresas & Negocios, el director del Inacal enfatizó en el vínculo entre calidad e innovación, ya que “es fundamental para el desarrollo de un país”. Las naciones que lograron avances significativos en innovación, como Alemania, Corea del Sur, Japón, Francia y Estados Unidos, demostraron que la calidad es un factor clave en el éxito de sus productos y servicios. En este sentido, expresó que Uruguay trabaja en la creación de un modelo propio de gestión de la innovación con el objetivo de alinear sus estrategias de calidad con los estándares internacionales.
Sus inicios
La iniciativa de establecer un premio de calidad en Uruguay surgió en el contexto de la adhesión al Mercosur, cuando se observó el modelo estadounidense de gestión Malcolm Baldrige. Este modelo fue desarrollado en respuesta al avance de la industria automovilística japonesa, que logró dominar el mercado norteamericano gracias a su enfoque en la calidad y eficiencia. La situación llevó a Estados Unidos a desarrollar un modelo de gestión competitivo.
Con el objetivo de fomentar la mejora continua, Uruguay adoptó las bases del Malcolm Baldrige. En ese momento el Inacal no existía, pero el Comité Nacional de Calidad, del que Blasina formó parte, ya trabajaba en la promoción de la excelencia. Desde 1993, se implementó de forma ininterrumpida la entrega de los diferentes premios para incentivar la excelencia en la gestión organizacional y la innovación.
Convocatoria a evaluadores
El Inacal abre anualmente una convocatoria dirigida a profesionales interesados en participar como evaluadores en el proceso de Premios y Reconocimientos de Calidad. El entrevistado destacó que se trata de una función voluntaria en la que los participantes no solo evaluarán a las organizaciones postulantes, sino que también podrán aprender de aquellos evaluadores con mayor experiencia.
Este modelo de evaluación es aplicado en múltiples países que promueven la calidad como un pilar fundamental para el desarrollo, entre ellos, Brasil, México, Colombia y Argentina, además de diversas naciones europeas. La convocatoria está abierta a técnicos, ingenieros y profesionales jóvenes de cualquier área, ya que “la calidad tiene un enfoque multidisciplinario”, afirmó. Las postulaciones se recibirán hasta el 7 de abril a través de la web del Inacal (www.inacal.org.uy).
Diplomas
El 22 de abril comienza el ciclo de talleres para la obtención del diploma en habilidades de dirección 2025 que ofrece el Inacal. Desde hace seis años, el instituto brinda espacios interactivos sobre habilidades en dirección, destinados a mejorar las competencias de liderazgo y gestión. Son dictados por expertos con trayectoria a nivel nacional e internacional, quienes desde el primer día proporcionan herramientas prácticas para aplicar en su gestión.
La propuesta incluye encuentros sobre el rol del liderazgo, la relación con el cliente, la gestión de indicadores y la planificación estratégica, con énfasis en las habilidades que se necesitan en la actualidad y con una visión proyectada hacia el futuro. La lista de talleres contempla en detalle la realidad de las organizaciones e incluye la interacción con el mercado, que es la fuente de sustento de las mismas. Asimismo, brinda herramientas actualizadas y de aplicación inmediata para asegurar que los conocimientos puedan ponerse en práctica de forma efectiva. Una vez que se completa cada taller, los participantes reciben un diploma en habilidades de dirección que certifica su formación en estas áreas.
El diploma cuenta además con el respaldo de la Red Iberoamericana de Excelencia en la Gestión (Redibex), de la que Inacal es parte desde su creación. “Este diploma tiene el peso de que son instituciones específicamente abocadas y con mucha experiencia en el tema, además de que tiene contactos con toda Iberoamérica”, expresó. El contenido de los cursos se actualiza continuamente con la participación de docentes miembros de la Redibex.
Los desafíos ante el avance de la movilidad eléctrica
Con 17,4 vehículos eléctricos por cada 10.000 habitantes, Uruguay se posiciona como el segundo país de Latinoamérica con mayor uso de estos, quedando por detrás de Costa Rica. En 2024, más de 5.000 vehículos eléctricos fueron vendidos en Uruguay, lo que representa un crecimiento del 310% respecto al año anterior. El uso de flotas eléctricas contribuye a reducir el impacto ambiental, a mejorar la rentabilidad de las empresas gracias al ahorro operativo, los incentivos fiscales y el creciente valor de reventa.
Blasina manifestó que “Uruguay tiene que trabajar en mejorar las normas que regulan la comercialización y el uso de vehículos eléctricos”. Para eso, el Sistema Uruguayo de Normalización, Acreditación, Metrología y Evaluación de la Conformidad (Sunamec), busca acordar normas de medición, laboratorios debidamente acreditados y sistemas de medición consensuados.
Sunamec está conformado por el Inacal, el Instituto Uruguayo de Normas Técnicas (UNIT), el Organismo Uruguayo de Acreditación (OUA) y el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU). Tiene como objetivo “mejorar sistemáticamente la eficiencia energética de todos los vehículos y que los consumidores tengan la mayor cantidad de información posible sobre los distintos tipos de vehículos”, especificó, en referencia no solo a los autos eléctricos, sino a todo el parque automotor.