El 28 de marzo partió a Río de Janeiro el vuelo inaugural de la ruta que conectará esa ciudad con Montevideo. JetSmart, compañía low cost con sede en Chile y muy extendida en Argentina, presentó su segundo destino desde Uruguay y desarrolló un fam press de tres días por la capital del carnaval.
Escribe: Matías Kapek | @matias_kb, enviado especial a Río de Janeiro
Sobre las 10 de la mañana partió el Hervas A 320 desde el Aeropuerto internacional de Carrasco con destino al Aeropuerto Internacional Antônio Carlos Jobim, más conocido como Aeropuerto Internacional de Galeão. Hacia ese destino partió un grupo de siete periodistas –donde Empresas & Negocios estuvo presente-, acompañados por Darío Ratinoff, gerente comercial de JetSmart en Argentina y Uruguay.
Minutos antes tuvo lugar un evento conmemorativo del hecho, donde entre otras autoridades destacaron el ministro de Turismo, Tabaré Viera, y el embajador de Brasil en Uruguay, Marcos Leal Raposo Lopes.
En su alocución, el ministro Viera se mostró esperanzado con la ampliación de la conectividad con el país norteño. Destacó que este paso significa ensanchar horizontes en materia de turismo y junto a ello también extender horizontes para mucha gente que hace de esto su trabajo.
A su turno, Ratinoff se ocupó de dar detalles de las principales características de la nueva conexión aérea. Señaló que la misma se trata de la única conexión directa con Río de Janeiro del mercado, y que por lo pronto tendrá un carácter anual. Además, en principio, contará con tres frecuencias semanales: martes, jueves y domingos. Posteriormente, desde julio, se prevé el agregado de una cuarta frecuencia.
Un vuelo de alegría
Para terminar la parte ceremonial, el ministro Viera realizó el tradicional corte de cinta en la puerta de embarque. Momentos después, un grupo de entusiastas viajeros de todo tipo se dispusieron a ocupar su lugar dentro de la aeronave. Lo que no sabían era que por ser el vuelo inaugural no solo tendrían un beneficio de un 25% de descuento, sino también un bolso con regalos de la aerolínea y trivias con premios en el transcurso del vuelo.
Durante dos horas y media, 186 pasajeros y la tripulación inaugural disfrutaron de un viaje sereno y repleto de hermosas vistas. La calidez y la comodidad fueron moneda corriente en un avión que se destaca por un fresco y sencillo diseño.
En palabras de Ratinoff, el Hervas A 320 representa el espíritu de JetSmart, una aerolínea que además de tener como objetivo conectar todos los puntos de esta parte del continente, busca ser sencilla en su labor, ocupándose de llegar de un punto a otro de manera rápida, segura y barata.
La simpleza de la operación, que le cobra al pasajero solo lo que usa, y una monoflota de aviones de primera mano, permiten la eficiencia de una empresa que representa a la perfección lo que se denomina como modelo low cost. Abierta a todas las necesidades, ofrece un ticket adaptado incluso para aquellos que solo quieren un asiento y el espacio para una mochila. Por el contrario, aquel que quiere llevar más equipaje, o que incluso prefiere consumir alimentos a bordo, dispondrá también de una variada gama de posibilidades.
“Cidade maravilhosa”
Ya en Río de Janeiro, cada momento sirvió para explicar el motivo del nombre de su himno, “Cidade maravilhosa”. Frente a la playa, alojados en el hotel Mercure Río Boutique del barrio Copacabana, las zigzagueantes baldosas blancas y negras de la calzada, y el vaivén de olas y los autos, definían por el día el ritmo de una ciudad frenética. Por la noche, la música en vivo de los chiringuitos y las obras de los diferentes artistas callejeros se llevaron el protagonismo.
Más allá de los ojos y los oídos, la gastronomía y los diferentes espacios de esparcimiento se encargan de realzar los sentidos. El tour, entre otros lugares, pasó por espacios como Meza Bar, Fogo de Chao Botafogo y Río Scenarium, de los cuales solo queda decir que son una prueba más de una ciudad que no solo muestra, sino que vive.
En definitiva, Río, siempre alegre como su gente, parece estar y vivir en un bucle que aparenta ser mucho más lejano a las dos horas y media que, a partir de ahora, la separan de Montevideo.